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Algo falta, algo en él no estaba completo.

Era lo que pensaba Little King John mientras se veía en el espejo. Algo faltaba para completar su grandeza como rey.

No lo había considerado antes, cuando no trabajaba por nada y solo con una orden todo se le daba en bandeja de oro; no obstante ahora que está restaurando su reino desde cero y tomando con seriedad lo que verdaderamente significa ser un rey, había algo en él que gritaba con fuerza que algo faltaba. De inmediato pensó en que era algo de su apariencia, algún accesorio para lucir como un verdadero monarca.

¿Pero qué? Ya tenía la corona y siempre de alguna forma trataba de estar arreglado y lucir bien, sus zapatos siempre estaban brillando de limpios y su ropa siempre estaba impecable. Pero algo estaba vacío.

Sus pensamientos frenaron apenas escuchó el llamado de dos toques de la puerta de su habitación.

—¡¿Quién es?!— Preguntó Little King John alejándose del espejo para aparentar un ambiente ordinario y natural.

—Soy yo, John— Se escuchó la voz de Sneezy, aquel ser que encontró perdido en un pedazo de tierra mientras lo demás estaba cubierto de agua y también su querido amigo en esos tiempos tan difíciles. — John, tengo algo que te interesará — Insistió Sneezy.

Little King John apenas escuchó su voz y sintió un pequeño malestar en su estómago y una gran sensación de calidez en su pecho, le gustaba hacerse del rogar pero con Sneezy definitivamente no lo dejaría esperar tanto tiempo. Solo se aseguró de tener una buena imagen para su amigo y en cuanto reafirmó que estaba impecable, caminó tranquilamente a la puerta.

Little King John abrió la puerta y vio a su amigo Sneezy, sentado en frente de él, con una expresión de tranquilidad y felicidad en su rostro.

—Sneezy, ¿Qué es lo que necesitas?— Preguntó Little King John.

—Como mencioné, es algo en el que tú saldrás beneficiado, así que pido permiso para pasar a tu habitación y hablar de mejor forma— Contestó Sneezy.

John no estaba acostumbrado dejar que cualquiera accediera a algo tan privado de él como su habitación, pero con Sneezy haría la excepción. Después de todo con él es el que ha pasado en estos tiempos de angustia desde que comenzó la inundación, el encuentro de esta nueva tierra y la reconstrucción de su reino. Ya ha hablado con él de todo, sus sueños, deseos, su reino, le dió su confianza, su amistad, su esperanza y anécdotas de él mismo, así que ¿Por qué no hacerlo un poco más?.

Little King John abrió más la puerta y se hizo a un lado para que Sneezy pudiera pasar, vio como en su cola cargaba con algo de color morado oscuro envuelto en un moño dorado, pero no vio exactamente qué era.

Sneezy se detuvo en el centro de la habitación mientras Little King John cerraba la puerta, el rey se dirigió a su compañero y se posó emocionado frente a él por saber que era lo que tenía Sneezy para él.

—Y dime, ¿Qué es lo que tienes preparado?— Preguntó Little King John con los brazos cruzados.

—Bien, John… Haz cambiado mucho a lo largo de este gran viaje; aún recuerdo cuando eras ese rey sin reino en busca de tierra, cuando cantábamos canciones de marineros, cuando cruzamos el mar, cuando acogiste a aquellos aldeanos que al igual que tú sintieron la desesperación de la inundación y sobretodo ver la emoción de tus ojos cuando finalmente encontramos tierra, cuando comenzaste a levantar ésta gran ciudad y cuando recuperaste tu corona y te convertiste en un verdadero rey— En eso Sneezy bajó el objeto que sostenía en su cola— Te has ganado el respeto y admiración de esa gente y el mío, es por ello que tengo el gusto y el placer de darte esto—.

Sneezy con una de sus patas acercó aquel objeto hacia Little King John. Este se quedó observándolo con curiosidad, estiró su cuello para acercarse al objeto un poco más y apreciarlo de mejor forma sin tener que tocarlo. Sonrió al ver que era algo especial.

Little King John colocó una de sus manos en su barbilla mostrando interés en el objeto con una sonrisa calculadora —Así que una ofrenda para mí por mi buen trabajo… Interesante —Luego se agachó para tomar el objeto el cuál al tocarlo se dio cuenta de inmediato que era una prenda de tela suave y fina.

Little King John la desabrochó con cuidado, tiró el lazo cuando terminó y desdobló lo que para su sorpresa resultó ser una prenda, exactamente una túnica morada con un cinturón azúl incluido, su mirada brillo de asombro al ver esto.

—Es clásico que un rey lleve algo más que una corona y su título para mostrar lo que es, algo que no solo transmita poder si no también inteligencia, ingenio, liderazgo y madurez. John, te has vuelto un verdadero rey, cumples con esas cualidades al levantarte y superar la adversidad de todo este caos — Sneezy sintió que se excedió con sus palabras y trató de acatar a solo lo requerido. —Solo quiero simbolizar eso con este humilde regalo felicitando tu crecimiento como persona, Little King John —.

Little King John no prestó atención del todo a lo que dijo Sneezy, creyó que eso era lo que le faltaba para sentirse completo. Miró con lujo de detalle la túnica que le obsequió su compañero y con una gran sonrisa y deslumbrada mirada la apegó a su cuerpo —¡Esto es increíble! ¡Muchas gracias Sneezy!—.

Sneezy sonrió y asintió mientras movía la cola de alegría por ver como Little King John moría de emoción por su detalle.

—Me lo probaré ahora mismo —Dijo Little King John mientras se dirigía a su espejo.

Se la puso con gran entusiasmo y cuando vio su reflejo no pudo evitar sentirse aún mejor. La túnica no solo le quedaba perfecta, si no que también revivía algo, como si ya hubiera visto este tipo de conjunto, como si ya hubiera visto este tipo de grandeza antes.

Sneezy se acercó con cautela, vio como Little King John miraba su reflejo y la alegría que emanaban sus ojos pero también algún tipo de inquietud y nostalgia. Esto último le preocupó, ¿Tal vez algo que su querido John no le comentó antes?.

Con un toque de su pata hacia uno de los brazos de John fue suficiente para llamar su atención y este al sentir el toque despertó de su extraño transe —¿Todo bien?— Preguntó Sneezy.

Little King John volteó a ver a Sneezy y aparentando que nada raro pasó con él, posó su manos sobre su nueva túnica para acomodarla un poco —Si, estoy bien— Contestó orgulloso. —Sneezy, en serio agradezco el grandioso detalle, gracias—.

Sneezy al oír eso movió su cola para un lado y el otro con gran entusiasmo y alegría, eso era lo que quería escuchar, que John estuviera feliz.

—Es por ello que tenemos que hacer algo para celebrar esto, esta túnica significa sin duda un tipo de ascenso simbólico de mí como rey por mi gran trabajo — Contestó Little King John con su excentricidad tan característica.

—¿Y qué es lo qué planeas?— Preguntó Sneezy con una ceja levantada y una mirada curiosa y pícara.

John procedió a salir de su habitación y Sneezy lo siguió. Caminaron hacia uno de los vagones que había por todo el lugar, John subió primero y luego Sneezy. Little King John arrancó el vagón y ambos se dirigieron al destino que solo John sabía cuál era. Sneezy no cuestionó, sabía que cuando John planeaba algo sorprendente entonces era mejor no arruinarle el momento.

Llegaron a una habitación donde se podría decir que era el estudio de John, con repisas repletas de libros y cuadernos, un gran pizarrón con todo lo que planeaba John y un gran órgano al final.

Little King John se dirigió a su gran órgano y antes de sentarse para proceder a tocar, volteó a ver a Sneezy—Lo que planeo, Sneezy, es tocar por primera vez una gran canción que he estado componiendo durante las últimas semanas y ¿Qué mejor momento más indicado que ahora?— Contestó.

Sneezy se sonrojó un poco, conocía a Jonh y sabía que esa era su forma de dar detalles. La música para él era su medio de expresión favorita junto a la escritura, así que cualquier obra dedicada a él en cualquier de ambos formatos era algo especial, aún más si se trata de algo que le ha metido tanto tiempo y esmero.

John comenzó a tocar, la melodía era suave, limpia, armoniosa y por supuesto, épica y grande al estilo Little King John. Parecida a la canción que tocó mientras aún se encontraban en mar pero aún más delicada y hasta personal que esa. Sneezy lo vio atentamente como tocaba cada tecla mientras John solo se dejaba llevar por la música.

Fueron minutos de solo gloria, solo para ellos dos.

Cuando Little King John terminó de tocar, volteó hacia donde estaba Sneezy —¿Y qué tal me quedó?— Preguntó.

Sneezy no reaccionó al momento, había quedado enganchado con la perspectiva que tenía del rey; esa túnica que ahora lo hacía ver tan imponente, la forma en la que tocó esa canción, la forma en la que lo miraba, el detalle y aprecio que le tenía lo eran todo para Sneezy.

John sabía que su música era genial, pero no para hacer perder la consciencia alguien. Estiró su mano desde donde estaba, acercó su mano en frente de los ojos y la movió de arriba hacia abajo para hacer entrar en conciencia a Sneezy —Sneezy, ¿Todo bien?— Preguntó preocupado.

Sneezy reaccionó y guardó la compostura —Si, John, estoy bien—.

Para Little King John esto fue tierno, para su agrado, se levantó de la silla de su órgano y se dirigió a Sneezy. Cuando lo tenía enfrente, lo acarició cariñosamente desde la cabeza y Sneezy claramente disfrutó de esa muestra de cariño —¿Te parece si damos una vuelta por el reino?— Preguntó mientras lo seguía acariciando.

Sneezy asintió con la mirada, mientras aún seguía gozando del cariño de Little King John. En ese instante John terminó con las caricias y caminó hacia el vagón, Sneezy lo siguió y ambos dieron un paseo por el reino. Little King John propuso esto para tener una excusa de mostrar su nueva y magnífica adquisición a los aldeanos de su reino, un clásico de Little King John, a veces incluso gritaba por la inspiración “¡Yo soy el gran Little King John!”; para Sneezy solo eran una más de las excentricidades de Little King John, una parte más del rey a quién había aprendido a querer y apreciar tanto, incluso se le hacía adorable éstas actitudes de Little King John.

Durante el paseo dieron una parada para tomar unas papas knishes y queso recién fabricado para comer al finalizar. Cuando terminaron de dar su paseo, ambos bajaron en una parada que daba una bella vista directo al mar, o bueno, una bella vista del cúmulo de agua que se hizo por la inundación, la cuál a pesar de todo se veía muy bella.

También bajaron consigo las papas y el queso, comieron tranquilamente y en casi silencio ya que era un momento de paz y silencio para ellos después de tantas emociones. Al terminar de almorzar, Sneezy se recostó en una de las piernas de Little King John mientras este aún comía su queso.

—Me alegro que te haya gustado, John— Dijo Sneezy.

Little King John miró a Sneezy y volvió a colocar una de sus manos sobre su cabeza y volvió a acariciarlo— Gracias, Sneezy. Has hecho un gran logro de estado y es por eso que—Tomó un palo que se encontraba en el suelo cerca de ellos —Por esta gran ofrenda ¡Te nombro duque de las papas knishes! —Dijo Little King John mientras alzaba el palo como si fuera una espada.

Sneezy le siguió el juego y le dio un poco de risa— Es un gran honor su majestad —Contestó tranquilamente.

Ambos rieron y después Sneezy se acurrucó más al cuerpo de John para tener más calor y estar más cerca de él. El pequeño juego de John le acercó a uno de sus más recientes y extraños sueños, ser nombrado por él para llevar un gran cargo cercano al monarca por un John convertido por completo en un rey con una espada larga y gloriosa. No porque quiera poder o algo de ese tipo, de hecho técnicamente era el segundo al mando después de John políticamente hablando; más bien era porque deseaba tener en primera vista la etapa final de madurez de su querido rey y tomar oficialmente un papel importante y cercano a él en este juego que tanto amaba, con todo el brillo y esplendor que prepararía Little King John para un momento como ese.

Pero también le temía a lo que tarde o temprano iba a pasar, temía contarle la verdad, aún no estaba listo para ello. Disfrutaba de la tranquilidad y cotidianidad del papel de Sneezy, si bien Buck Dodger solo quería cumplir y terminar con la misión para hacer que los amigos galácticos estuvieran orgullosos de él por su gran trabajo, ahora solo quería disfrutar del momento. Temía que John no pudiera con la verdad, quería protegerlo de eso y aún más cuando se ha dado cuenta que lo quiere demasiado, Incluso ha considerado y pensado que su cariño es más equiparable que solo una amistad. Antes no había considerado como se iba a sentir cuando se entere, pero ahora que significa tanto para él que sabe que para John será demasiado para digerir.

Tendría que procesar que la inundación es producto de sucesos interdimensionales y galácticos, que su único amigo llegó a su vida por una misión mandada por su enemigo, que estaba ahí con él por compromiso y no por cuenta propia o al menos eso al principio…

Sneezy terminó quedando completamente dormido, Little King John lo observó con ternura, pero reprimió esto de inmediato, negándose ver a su mejor amigo de esa forma. Tenía un amigo, algo que durante mucho tiempo no se dio cuenta que faltaba en su vida pero ahora que ya lo tenía, no lo quería perder por sobrepasarse con su cariño; era algo que iba a pasar, estaba seguro de eso.

Miró el horizonte, se dio cuenta que no estaba completo como el creía. La emoción y alegría inicial ya habían pasado, dándose cuenta que aún estaba con ese vacío. Pero tocó su nueva túnica, miró a Sneezy y sonrió sabiendo que aún tenía mucho por recorrer para restaurar su reino, así que aún tenía tiempo de encontrar ese algo que le faltaba. Dio un gran mordisco a su papa kanish y prefirió ver el panorama tranquilamente.

Seis meses habían pasado.

Después de todo lo que sucedió con la última carga y el reino de Little King John restablecido, por fin había paz.

O bueno, eso en el panorama general…

Little King John ya era considerado un monarca para todos, cuando paseaba por el reino sus súbitos le hacían reverencia, lo saludaban con alegría y admiración, sus pocos seres cercanos los consideraban así e incluso los sobrevivientes de la inundación que llegaban buscando vivienda en el reino lo reconocían como rey de inmediato.

Pero por más extraño que pareciera, eso no le llenaba. Intentó de todo para buscar algo que llenara su vacío, una actualización a su querida túnica para convertirla en una gran túnica aún más grandiosa, vender jabones de alta calidad, escribir varios libros de sus crónicas e incluso publicar su primer álbum musical. Pero nada lo llenaba, seguía sintiéndose vacío de alguna forma.

¿Pero por qué? Se preguntaba cuando quedaba solo en sus pensamientos, era una pregunta que era impregnada al final de cada anotación de su diario, ¿Por qué?.

Tenía unas cuántas hipótesis pero ninguna lo convencían. La primera es que tal vez extrañaba su anterior reino, pero si bien claro que lo extrañaba con profunda tristeza, no creía que era lo suficiente como ahora sentirse tan incompleto todo el tiempo; la segunda hipótesis era que tal vez le faltaba algo más de protocolo real para ser un rey y la tercera decía que tal vez era algo más antiguo de su vida, algo mucho antes de todo esto lo e incluso mucho antes de Baby.

Mientras su mente lo atormentaba, sentando en una silla de descanso miraba como Sneezy y Caveman jugaban lanzando pequeñas piedras entre ellos, era entretenido verlos haciendo cualquier cosa mientras él seguía en sus pensamientos enredados.

—¡Ey! Little King John! ¡¿No vienes aquí a jugar?!— Preguntó Sneezy al notar el estado tan pensativo de Little King John.

Little King John se negó con la cabeza con una sonrisa y mirada cansada.

—¡Vamos! ¡Sabes que esto es muy divertido!—Gritó Caveman mientras lanzaba una piedra de arriba a bajo, pero recibió la misma respuesta.

Tanto Sneezy como Caveman se miraron a los ojos, era obvio que algo anda mal, así que Sneezy entre señas sugirió averiguar que le pasaba a su amado amigo. Tan metido estaba el rey en sus pensamientos que no notó que estaban cerca de él hasta que levantó la mirada por unas extrañas sombras, esto le sacó una sorpresa inmediata por supuesto.

—¿Qué es lo que te pasa?— Preguntó Caveman.

—¿Yo? ¿De qué hablan? —Respondió Little King John intentando evitar la pregunta.

—John, te conocemos, esto no es normal en ti — Dijo Sneezy.

—Estoy bien, no pasa nada, solo no estoy de humor — Contestó John mientras movía sus brazos de un lado a otro para expresar su negación.

Sneezy apegó su barbilla al brazo de Little King John —¿Cuál es tu preocupación? ¿Te podemos ayudar?— Preguntó.

Little King John se sonrojó un poco por este acercamiento de Sneezy, alejó su brazo discretamente para evitar este contacto —No, bueno… No lo sé, es complicado —.

—¿Una máquina de knishes no funciona bien?—Preguntó Caveman.

—¡No!... Lo que pasa es algo más personal… Pero tal vez no estaría mal contarles —Admitió con dificultad y pena.

Ambos trataron de ser comprensivos, listos para escuchar lo que John tuviera que decir, después de todo eran una familia y solo se tenían a ellos tres.

John tuvo que reunir las fuerzas y valentía para hablar —Bien… Lo que pasa es que siento que algo falta… Sé que si bien aún falta mucho por recorrer, lo cierto es que las cosas van muy bien, pero aún con eso siento que hay un vacío en mí —.

—¿Desde cuándo te sientes así?— Preguntó Sneezy.

—Desde hace un tiempo, antes de los sucesos de la última carga—.

—¿Y qué es lo que sientes en ese vacío?— Preguntó Caveman.

—No lo sé, solo sé que siento un vacío… Podría decir que en mi pecho, algo así… Algo que viene del corazón supongo, no estoy seguro, solo sé que es algo que tiene que ver con algo personal —.

Sneezy y Caveman pensaron como ayudar a John. Sneezy no sabía que decir pero después de unos pequeños momentos a Caveman se le ocurrió algo.

—¡Ya sé! ¡Creo que ya sé que es lo que te falta, Little King John!— Expresó Caveman con emoción y entusiasmo.

—¿Y qué es?— Preguntó Sneezy.

—¡John! ¡Lo que te falta es una coronación oficial!—.

—¿Por qué crees eso?— Cuestionó Little King John.

—¡Piénsalo! ¡Has creado un gran reino, todos te respetamos pero como todo rey también necesitas una ceremonia digna. Quiero decir, Caterpillar Minister mencionó que todo lo que pasaste es solo el primer paso para volverte un amigo galáctico, eso quiere decir que te queda mucho camino por recorrer y tal vez parte del siguiente paso sea convertirte oficialmente un rey—.

—¡Tiene sentido, John!. Eres un rey técnicamente, tienes un reino, un palacio, una corona y súbitos pero aún no lo has anunciado públicamente— Dijo Sneezy feliz dirigiéndose a John, moviendo su cola de un lado a otro— Solo necesitas eso para proceder al siguiente nivel ahora como un rey completo —.

Con eso a Little King John le llegó a la mente un sentimiento de ¿Nostalgia?, Cómo si extrañara una vieja época dónde este tipo de fiestas provocaran emociones, sentimientos y un ambiente que no ha sentido desde hace tiempo; cosa que se le hizo extraño ya que no recordaba hacer algún tipo de fiestas en su anterior palacio, solo era dar órdenes y pasarla bien con sus lujos. ¿Algún tipo de dejavú? No lo sabía, pero dejando eso de lado claro que le fascinaba y emocionaba la idea.

—Sí… ¡Sí! ¡Eso es lo que falta!— Dijo Little King John totalmente determinado y emocionado —¡Solo necesito una ceremonia de coronación! ¡Una magnífica! ¡Una gloriosa y épica! —Little King se paró encima de su silla y estiró el cuello por la inspiración para verse aún más imponente —¡Es lo que yo, Little King John necesito! ¡Una celebración con grandes decorados, una gran multitud y sobre todo música! ¡Increíble música! —.

—¡Jajaja! ¡Si! ¡Será increíble de eso nos vamos a encargar! — Expresó Caveman alegre y emocionado.

—Bien, ahora que todo está arreglado insisto que vengas a jugar con nosotros— Dijo Sneezy señalando con la cabeza el lugar donde estaba jugando con Caveman anteriormente.

Little King John pensó por un segundo, no obstante la carita tierna de Sneezy y el simple hecho de que él se lo pidiera lo convenció así que asintió felizmente, encogió su cuello a tamaño normal y bajó de la silla para jugar con sus dos amigos.

Una gran coronación, justo es lo que necesita para sentirse completo finalmente como él tanto desea. Después de todo la sola idea de una fiesta grande le daba una sensación familiar y cálida, así que posiblemente sea momento de buscar algo que lo haga sacar energía.

Continuará…

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La sugerencia de una coronación no solo se quedó como una loca idea de amigos, en verdad que Little King John se tomó enserio eso. 

Comenzó a idear las cosas unos días después y cuando Sneezy había olvidado el tema por completo, se sorprendió mucho al ver a John de un lado a otro platicando con varios de sus más leales  súbitos acerca de sus planes para los preparativos de su coronación. Sneezy sabía que Little King John era determinado, pero no se esperaba esto para nada y mucho menos de que él no fuera el primero al cuál le compartiera sus planes. Claro que iba a pedir una plática personal con él para saber sobre la situación.

Mientras Little King John hablaba con uno de sus súbitos, Sneezy se acercó discretamente a ellos y se quedó parado al lado del rey sin que este se diera cuenta.

El súbito se percató de esto y de la clara expresión de inconformidad del segundo al mando, claro que se distrajo de la gran charla del rey hasta que tuvo el valor de interrumpir—Disculpe, majestad —Dijo nerviosamente por interrumpir al monarca y por la expresión de Sneezy.

—¿Qué? ¿Qué pasó?— Preguntó John severamente molesto por ser interrumpido.

El súbito señaló temeroso el costado del rey, este se dio la vuelta confundido y se llevó una gran sorpresa de la aparición de Sneezy —¡Sneezy! ¡¿Cómo es que no me percaté de que estabas aquí?!—.

—No olvides que he sido un gran agente de los súper héroes galácticos por  un buen tiempo, John, así que ser cauteloso es parte de mis fortalezas — Contestó Sneezy con seriedad.

Hubo un silencio incómodo en el ambiente. 

—¡Oh! He recordado que dejé unos frijoles en la olla express, majestad, me tengo que retirar, luego seguimos hablando de sus grandes planes en privado— El pobre súbito apenas tuvo oportunidad y se fue corriendo para no meterse en problemas.

—Así que ¿grandes planes, eh? Me extraña que no haya sido el primero en enterarme de que van esos planes—. 

Little King John intentó tomar las riendas de la situación y sonrió con seguridad —Oh Sneezy, lo que pasa es que ellos solo se quedaron con una breve sinopsis. En cambio tú, querido amigo, tengo planeado para ti una conversación más elaborada, con ellos solo estaba poniendo a prueba las partes más generales de mi “pequeño” proyecto —.

Sneezy miró incrédulo a Little King John —Antes de que me digas cualquier otra cosa, John, dime ¿Qué tramas ahora? ¿Qué tan importante es que ni siquiera fui el primero en enterarme, pero según tú seré el primero en ver la versión más “elaborada”?—. 

Little King John contestó tranquilamente— Sígueme entonces —.

Sneezy tomó confianza en John, se calmó y sonrió de vuelta para demostrar que estaba de acuerdo con ser su cómplice una vez más en lo que sea que estuviera planeando.

Caminaron hacia el estudio de Little King John, específicamente se dirigieron al pizarrón que para gran sorpresa de Sneezy, estaba lleno de papeles, hilos de estambre de color rojo que conectaban papeles unos con otros, fotos y garabatos.

—¡Sneezy! ¡Serás testigo de mi gran y nuevo proyecto que marcará un antes y un después!— Dijo John mientras caminaba hacia el pizarrón, determinado e inspirado. Cuando llegó al pizarrón posó su mano en un garabato que hizo de su propia corona y volteó a ver a Sneezy— ¡Te hablaré con la versión más completa hasta ahora del gran plan para mi coronación! —. 

Y así es como Sneezy descubrió lo que tanto tenía ocupado a John. Sneezy estaba sin palabras mientras John hablaba y hablaba sobre sus planes,  apenas recordaba esa idea y llevarse la noticia de que Little King John ya hasta había desarrollado esa idea sin duda fue algo que lo impresionó.

Básicamente su plan era el siguiente: 

La planeación y preparativos serían máximo de un mes, aunque preferiblemente quería que sucediera lo más pronto posible.

Quería que la coronación comenzara exactamente a las 10:00 am, con una gran multitud reunida en los restos de la nave porque según Little King John, eso haría que el evento se viera aún más grandioso y majestuoso de alguna forma. Sneezy, Caveman y Old Froggy estarían en primera fila para presenciar el momento; mientras que Cartepilar Minister sería la que la encargada de coronarlo y a ella le pediría el favor que lo ayude con sus votos de rey para la coronación ¿Cómo conseguirá su contacto? Bueno, ya tiene a alguien que le haría el favor de hacerlo. 

Aún faltaban más detalles como los adornos de la ceremonia, como acomodarían las cosas, su vestuario para la ocasión y otras cosas pero eso ya lo arreglaría con el tiempo.

Sneezy miró con preocupación a John —Seh, muy bonito y todo pero John, ¿No crees que estás exagerando con esto?—.

Little King John paró en seco su gran emoción y energía, miró a Sneezy detenidamente disgustado —¿A qué te refieres?—.

Sneezy trató de hablar tranquilamente con John—Escucha, la idea sonaba bien en un principio, a mí también me gustó, sonaba bien para imaginarnos un lindo escenario hipotético, pero sinceramente no creo que sea tan importante para que te lo tomes en serio —.

—¡Es que para mí no solo es un escenario hipotético, Sneezy! ¡En verdad necesito esto!— Contestó John con sus clásicos gritos de cuando quiere imponer su punto de vista, pero de inmediato se arrepintió —Lo siento… No debí hacer eso…—.

Sneezy ya conocía estás actitudes de John, así que siguió firme —¿En qué aspecto es tan necesario? —. 

Little King John guardó silencio, caminó hacia Sneezy, sabía que no le podía ocultar nada o por lo menos él no era bueno para ocultar las cosas al contrario que él —Necesito esto porque en verdad me encuentro mal en mi situación personal, Sneezy—.

—¿Quieres contarme más detalladamente lo que te pasa?—.

Little King John asintió con un movimiento de su cabeza de arriba hacia abajo. Little King John tomó el asiento de su escritorio y Sneezy se sentó frente a él. 

—Te escucho— Dijo con su seriedad en momentos de tensión.

Little King John guardó silencio por un minuto, no sabía cómo comenzar del todo, pero tomó aire y valor y comenzó a hablar.—Bien, creo que lo básico ya te lo platiqué, es técnicamente lo mismo que les conté hace unos días—.

—¿Y lo avanzado? Si dices que ya conozco lo básico entonces quiero conocer el grado avanzado del tema—.

Little King John mostró una clara expresión de incomodidad, por primera vez en su vida quería que la tierra se lo tragara. Volteó su cabeza a la izquierda para evitar una mirada directa a Sneezy, no obstante, aun así, lo miró de reojo y siguió negándose a hablar por su orgullo y porque simplemente no se sentía con el suficiente tiempo para acomodar y organizar una respuesta convincente en su cabeza. Le costaba hablar de su sentir, eso no era su fuerte; cuando habla de algo emocional le es más fácil expresarlo al convertirlo en algo organizado y calculado a través de conmovedoras notas de su diario o por medio de la combinación y armonía de las bellas notas musicales. Pero como respuestas crudas y no pulidas definitivamente era completamente torpe e inseguro, aunque le cueste admitirlo. 

Después de esperar un pequeño tiempo, Sneezy sintió que era suficiente y se levantó—Bien, no te obligaré a qué me digas, Little King John. Lo que si quiero que tengas en claro es que me preocupas genuinamente, pero no por ello quiero que escondas lo que sea que te esté atormentando debajo de planes y sueños superficiales — Con eso, Sneezy caminó lentamente a la salida.

John miraba derrotado como Sneezy se retiraba, sentía un aura de decepción proviniendo de él. Volteó a ver su gran pizarra y su mente insistió en pensar que ¡Él era Little King John, no tenía nada que deber a nadie! … Pero Sneezy no podía ser parte de esa categoría, volvió a ver en su dirección justo antes de que Sneezy tocará la manilla de la puerta para salir, Little King John estiró su mano hasta su dirección y tocó la espalda de Sneezy para evitar que saliera.

—¡Espera!...Por favor no te vayas… Quiero que seas parte de esto— Dijo Little King John.

—No mientras sea una cortina de humo para ocultar lo que te pasa, John… No quiero ser cómplice de algo que te lastime —.

—Te contaré, solo… Solo acompáñame como siempre lo has hecho , Sneezy—.

Sneezy asintió y regresó a su dirección, se paró en frente de Little King John esperando a que le encontrara las palabras para decirle aunque sea mínimamente algo de lo que pasaba. 

Little King John tartamudeó mucho, eso ya era un avance considerable para Sneezy. Así pasaron unos cuantos minutos hasta que por fin Little King John supo explicarse con  exactitud.

—Para mí es importante porque… Creo que me va a llenar… El evento cumple con algo que mi corazón anhela, no estoy acostumbrado pensar desde ahí pero estoy seguro que esto es lo que pide —Little King John comenzó a tener de nuevo esa sensación de nostalgia, dejó su mano en su pecho y habló desde esa sensación — Me imagino que será una gran ceremonia, todos me admirarán y estaré acompañado de la gente que es importante para mí, pasearé alrededor de mi gran reino desde mi nueva grandeza, saludaré a todos elegantemente y la fiesta marcará oficialmente mi corazón... Eso será lo que me llene—.

Little King John cerró los ojos y llegaron a su mente imágenes desconocidas y poco claras de un gran público alabándolo a él y al parecer a cuatro seres que lo acompañaban y tres de ellos saludaban a la multitud moviendo la mano de lado a lado; él era muchísimo más pequeño que ahora, estaba siendo cargado por una de las figuras y parecía que ellos también lo amaban, pero no como sus súbitos si no como una familia.

Él estaba acurrucado en la entidad que lo cargaba, la cuál lo hacía con cuidado y ternura, su rostro casi no se podía visualizar pero sus ropas daban a entender que era una mujer y sentía un gran calor yal estar a su lado; dos de esas entidades también eran pequeñas pero no tanto como él, eran más visibles sobretodo la figura más pequeña e inquieta de ambos la cuál daba entender que era una niña y a simple vista le daba una sensación extraña, como si la extrañara y quisiera estar con ella cuando ni siquiera recordaba haberla visto, eso era extraño; el que estaba a lado de ella, por su simple apariencia y por lo poco que se podía ver de su rostro se entendía que era un chico, también tenía una sensación de echarlo de menos aunque no era tan fuerte como en el caso de la pequeña niña y por último el más grande que se encontraba a lado de él y la figura que lo cargaba era el que menos podía visualizar, pero lo poco que podía sentir de su presencia era algún tipo de conexión y preocupación, como si antes hubiera tenido mucha angustia por él.

Sneezy miró a Little King John con cierta preocupación al ver que parecía que era algo más que eso, ver a John tan conmovido por lo que parecía ver en su mente le causó compasión y más deseo por ver el bienestar de su amigo; su querido John era alguien que siempre pensaba con la cabeza, así que sí hablaba desde el corazón era porque era un tema que ni siquiera su mente podía comprender del todo. Tomó de John una de sus manos con una de sus patas y eso hizo que el rey volviera a su presente.

Ambos se miraron detenidamente, Little King John aún estaba abrumado con la calidez y amor que experimentó con ese recuerdo, así que miró a Sneezy con cierta decepción por su realidad pero también lo miraba con cierto deseo de buscar en él algo parecido a lo que su mente le trajo.

Sneezy miró a John con su cariño y compañerismo de siempre, sus ojos hablaban que podía hacer cualquier cosa para que se sintiera mejor, con tal de que su corazón encontrara un lugar temporal donde refugiarse. 

Little King John se sentó en suelo, extendiendo sus manos para que Sneezy se acercara y pudiera abrazarlo. Sneezy aceptó y se dejó abrazar por Little King John.

Este lo abrazó con cierta desesperación en buscar en él lo que sea que le regrese a esa extraña visión. Si bien no lo consiguió, encontró algo que lo tuviera satisfecho por un tiempo. Se sintió lastimado por el hecho de que Sneezy le escondió toda una verdad, si bien creyó que su relación había sido destruida, pronto se dio cuenta que ambos habían construido un verdadero lazo que extrañamente se volvió más fuerte con afrontar la verdad. Sneezy fue muy breve cuando él lo confrontó, pero en una situación completamente a solas ambos se sinceraron como debió de ser desde un principio y al conocer que ambos en verdad se apreciaban y que Sneezy le ocultó todo para protegerlo de ese dolor, John se sintió consolado de alguna forma ya que al menos las intenciones de Sneezy no fueron hechas con propósitos malignos.

Ahora que ya eran completamente transparentes uno para el otro, momentos como estos le traían cierto grado de paz en su corazón tan vacío que buscaba lo que sea para sentirse mínimamente satisfecho. Al menos ese abrazo le aseguraba que había alguien con el que pudiera ser él mismo, con el que pudiera dejarse ver cómo débil.

Después de un rato, ambos se separaron y Sneezy se postuló para ser el principal ayudante de su gran y soñado festejo, el cuál Little King John aceptó de inmediato

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En parte, tristemente para John, los preparativos de la coronación no fueron tan rápidos como él hubiera deseado, pero fueron completamente a la perfección como pedía su gran mente .

Muchas cosas ya estaban listas o en proceso de estarlo y entre ellas era su atuendo que iba a usar para su coronación. Ya tenía un boceto de lo que quería para su traje, pero no quién se lo hiciera; obviamente Little King John iba a solicitar al mejor costurero que se pudiera encontrar y Old Froggy, un buen amigo de Little King John sería el encargado de buscar al costurero perfecto para la ocasión. Old Froggy fue escogido para esta tarea debido a que prácticamente conocía a todo el mundo, él era de un carisma y personalidad tan simpática que incluso después de que Little King John se enteró de que él fue quién ayudó a rescatar a Baby, no lo odió y ni siquiera le reprochó nada porque ¿Quién diablos sería capaz de enojarse con esa rana tan buena onda? Aunque si hizo un poquito de escándalo por eso pero eso era ya más de su personalidad que algo realmente grave, pero hasta eso fue bastante leve.

Pero fuera de ello, después de todo lo que Old Froggy ha hecho por el rey , es lógico que le tendría un gran aprecio y compasión, aún si se trata por el tema de Baby. Little King John ha crecido, actualmente es un joven adulto, pero en ese tiempo solo era un adolescente mimado que creía que posición le daba derecho de tomar y quedarse con todo lo que se le antojara, incluso apropiarse las personas como objetos. Era un tema muy complicado de tratar y ahora con una retrospectiva más madura y objetiva, Little King John entendía que sus acciones estuvieron completamente mal y Old Froggy solo hizo lo correcto; de hecho, esa misma mala decisión le condenó a un efecto dominó de consecuencias que le cobraron factura más tarde sin darse cuenta.

Uno de sus guardias fue a anunciarle que su amigo había regresado, acompañado del que al parecer era el costurero que haría su traje. Little King John corrió de inmediato a ver a su amigo y al gran personal que había conseguido, Sneezy vio como corrió por los pasillos del palacio así que también lo siguió a gran velocidad.

Old Froggy ya estaba adentro, esperando la llegada de John aunque se veía algo inquieto y preocupado. 

—¡Old Froggy!— Gritó John a lo lejos con gran entusiasmo en las escaleras que se aproximaban a las grandes puertas del palacio.

—¡Little King John!— Saludó Old Froggy de vuelta pero sin el mismo animo.

Little King John bajó rápidamente para saludar a su amigo, detrás de él le seguía un Sneezy cansado de tanto correr, a veces al pobre alíen le era imposible seguirle el paso.

—¡Me alegra muchísimo verte por aquí! — Dijo Little King John extendiendo los brazos para recibir un abrazo.

Old Froggy lo abrazó amistosamente — ¡Ribbit! Little King John—.

Pronto llegó Sneezy y se paró a lado del rey—Hola, Old Froggy, me alegro de verte por acá —Expresó Sneezy aún recuperando el aliento después del tremendo maratón.

—Igualmente, Sneezy —Respondió Old Froggy rápidamente.

—¿Cómo has estado? Me imagino que lo que te trae por aquí es que ya conseguiste a alguien que me pueda hacer el pequeño favor de mi gran traje — Expresó Little King John cuando se separó del anfibio.

—Eh estado bien, gracias por preguntar y si… He cumplido con el favor que me diste— Contestó Old Froggy con incomodidad.

—¡Fantástico! ¡Dile que pase por favor! ¡Sin duda debe ser alguien altamente calificado para que lo escogieras para realizar esta gran tarea!—  Respondió Little King John casi saltando de alegría.

Old Froggy aquí comenzó a sudar, estaba evidentemente nervioso y asustado, aunque Little King John no se percata—Eh...Si… Bu-Bueno… La cosa es que - — Fue interrumpido por Little King John.

—¿Qué pasa, Old Froggy? Necesito ver cuánto antes el asunto de mi traje ¡A este pueblo le espera ver un gran rey!— Exclamó Little King John impaciente.

—Ammm, si, bueno la cosa es que si bien sí conseguí a un gran costurero… Pero no creo que sea del todo de tu agrado, no por sus capacidades si no por su persona— Dijo Old Froggy resignado y temeroso.

—Insisto que me lo muestres— Exclamó el rey con ya cierto enojo en su voz.

Old Froggy, sacudió la cabeza para asentir y se dirigió a la salida principal para ir por el tan importante costurero.

A diferencia de Little King John, Sneezy si se percató de la preocupación y angustia de la rana. Así que aprovechó ese momento para hablar un poco con él.

—John, vi a Old Froggy muy angustiado, ¿Crees que sea bueno insistir en ver al costurero? Porque estaba muy preocupado por tu reacción, al menos eso fue lo que noté— .

Little King John pegó unos ojos en blanco y después se dirigió a Sneezy —Tranquilo, Sneezy. No hay nada de que preocuparnos, seguro Old Froggy consiguió un forastero recién llegado, un pirata de los que nos acechan en los mares a veces o algo por el estilo; no importa si es alguna de esas opciones y otra más extravagante, mientras sea alguien dispuesto a dar el mejor trabajo de su vida para el este gran deber, todo está bien. No es como si de toda la gente de ésta y otras dimensiones tuviera que escoger a- — Little King John fue abruptamente interrumpido por una desagradable voz y una irritante frase.

—¡Knock, Knock! ¡Little King John!— Exclamó una voz alegre y aguda.

Little King John y Sneezy voltearon lentamente hacia al lado de donde provenía la voz, claramente con diferentes expresiones. Sneezy estaba choqueado, asustado si se le puede llamar así, sabía lo que la presencia de Ratboy Genius representaba una posible discordia en el reino; por otro lado, Little King John claramente estaba fastidiado, podría decir que asqueado y claramente sorprendido por ésta desagradable sorpresa.

Estaba Ratboy Genius feliz parado junto a un Old Froggy que claramente quería morirse en ese momento o salir nadando a gran velocidad. Hubo un silencio incómodo que duró un tiempo, hasta que el primero en romperlo fue Ratboy Genius al acercarse al rey y a su fiel acompañante.

—¡Hola Little King John! ¡Hola Sneezy! ¡Me alegra verlos después de tanto tiempo! — Saludó amistosamente mientras extendía su mano derecha en frente de Little King John.

La situación se puso aún más tensa, Sneezy miró con pavor la incómoda escena y le inquietaba el más mínimo movimiento de Little King John. Con mucha sorpresa de parte de todos, Little King John, con cierto desagrado contenido, correspondió al apretón de manos de la rata amarilla y respondió lo más respetuosamente con una sonrisa obviamente forzada.

—Que sorpresa recibirte hoy en MÍ palacio, Ratboy Genius…—.

—Igual para mí es una gran sorpresa, pero también es un honor estar en tu palacio, Little King John —Respondió Ratboy Genius soltando la mano de Little King John. —¡Sneezy! ¿Cómo estás? — Saludó Ratboy, dirigiéndose a Sneezy mientras acariciaba su cabeza, alertando a John y poniendo aún más tenso al pobre alienígena.

—Bien, bien… Aquí echándole  ganas—Respondió un Sneezy con la mente en blanco por el miedo. 

Cuando Ratboy Genius dejó de acariciar a Sneezy, rápidamente antes de que la situación se tornara más tensa, Little King John habló.

—Old Froggy, ¿Puedo hablar contigo en privado? Es algo importante — Preguntó Little King John aún manteniendo su máscara de control.

—Claro, con gusto — Respondió mientras miraba con pavor al gobernante.

Ambos dejaron solos a la rata amarilla y al alíen para dirigirse a la salida y poder “charlar”. Detrás de esas puertas, se escucharon los gritos de furia histéricos de Little King John (y eso que las puertas eran gruesas) aunque no eran claros del todo; Ratboy Genius estaba extrañamente muy calmado para la situación en la que involucraba, así que Sneezy habló con él para llegar al fondo de esto.

—¿Qué haces aquí, Ratboy?—.

—Old Froggy me comentó que buscaba un gran costurero para el traje de Little King John que usará en su coronación, no encontró a nadie así que me ofrecí yo— Contestó mirando aún la puerta cerrada.

—Ratboy Genius, tienes que ser más prudente ¡Por favor!. Una cosa es que tú y Little King John medio se hablen para pedirse un poco de azúcar y otra muy diferente es venir y ponerte para que hagas una prenda tan importante para él — Contestó Sneezy en forma de regaño.

Ratboy Genius y Little King John quedaron en términos neutrales pero frágiles. Si bien aún Little King John tenía cierto rencor ya no por la situación de Baby, si no por el hecho de que Ratboy Genius estaba metido en el suceso de la inundación; comprendía que no lo hizo con intensión y la situación era más complicada que eso pero aún así para él era algo difícil de perdonar y olvidar.

—Sneezy, sabes que las cosas entre nosotros están calmadas—.

—Si, pero no por ello Little King John aceptará fácilmente que seas el que confeccione su más grande ilusión, dime ¿Qué tramas ahora?—.

Ratboy Genius tenía que confesar, estaba acorralado.— En cuánto me enteré de la coronación por parte de Old Froggy, sabía que John está por dar un paso importante en su vida. Yo sé que por las circunstancias nos ha costado tener algo de afinidad pero hemos tenido momentos en los que sinceramente parece haber una gran amistad potencial, así que solo quiero a través de esta oportunidad ayudarlo en esta travesía de su vida y de paso, sacar mi mayor capacidad en la confección —.

Sneezy alzó una ceja en señal de que estaba algo intrigado por la actitud de Ratboy Genius —Aprecio tu interés por Little King John, pero como su compañero y amigo, puedo decirte que por el momento no fuerces nada. John está pasando por una situación personal complicada así que sí quieres hablar con él de forma cercana, trata que las cosas surjan con naturalidad y no insistas si se te niega… Por otro lado, no sabía que le sabías a la costura—.

—Si, me enseñó la mejor maestra que puede haber, ¡Baby!—Respondió Ratboy Genius entusiasmado— Old Froggy me dijo que necesitaba al mejor y bueno… Baby no está para nada dispuesta a meterse en esto así que supongo puedo ser mínimamente capaz y algo equiparable a su talento ya que ella me enseñó —.

En eso ambos guardaron silencio cuando se escuchó al rey y a la rana ingresar nuevamente, con las aguas ya más calmadas por parte de ambos. 

—Bien, Ratboy Genius, Old Froggy me platicó que eres algo… Competente, en esto de la costura — Dijo Little King John frío y serio.

—Así es, su alteza real— Contestó amablemente Ratboy Genius.

—Pues no quiero que seas competente, quiero que seas excepcional y perfecto… —Se acercó de forma amenazante a Ratboy Genius— Te daré una oportunidad para demostrarme que tienes potencial, pero solo una… Al mínimo error te largas y busco a alguien con más capacidad ¿Capish?—.

—Acepto, su alteza— Respondió Ratboy Genius inclinándose levemente hacia al rey. 

—Bien, entonces ordeno que me sigas— Ordenó Little King John mientras comenzaba a dar sus primeros pasos .

—Los acompaño— Dijo Sneezy .

—Gracias, Sneezy pero creo que lo mejor para ambos es hacerlo a solas… Después de todo solo es una charla formal y diplomática de negocios, nada mínimamente personal — Respondió Little King John sin mirar a Sneezy y siguió con su camino.

Ratboy Genius volteó a ver a Sneezy y Old Froggy, ambos con la mano dieron señas de que le siguiera y continuara su camino, este asintió y casi corriendo siguió a Little King John.

Pasando un tiempo Sneezy tomó paso a su dirección. 

—Sneezy ¿Qué estás haciendo?— Preguntó Old Froggy susurrando pero evidentemente alterado.

—Conozco a John, esto no saldrá nada bien si no estoy para supervisarlos, al menos de forma discreta— Contestó Sneezy aún caminando cautelosamente a dónde se dirigía Ratboy y Little King John.

— Voy contigo ¡Ribbit!— Respondió Old Froggy para proceder a hacerle compañía a Sneezy.

Continuará… 

Chapter Text

La tensión era grande, Ratboy Genius a pesar de estar determinado a comenzar dar el primer paso para tener una relación más amistosa, sentía que Little King John emanaba un aura que lo preocupaba y mantenía alerta. 

Little King John y Ratboy Genius se  dirigieron a una pequeña habitación, más pequeña que las demás áreas y habitaciones del palacio. Al abrir la puerta y ambos entrar, Ratboy Genius quedó impresionado a ver lo bonito que era este cuarto para ser solo un lugar que sobraba en el palacio.

Tenía una gran ventana la cuál daba una bella luz natural, una mesa considerablemente grande, una silla normal, un lindo sillón, una pequeña mesa de estar y dos cajas sobre la mesa grande; una de las cajas era pequeña mientras que la otra era grande en el largo, Ratboy Genius quedó con la boca abierta.

—¿Qué lugar es este, su majestad?— Preguntó Ratboy Genius aún anonadado.

—¿Este lugar? Bueno, en un principio un lugar que sobró al construir este palacio —Contestó mientras cerraba la puerta detrás suya— Pero ahora tu lugar de trabajo.

Ratboy Genius sintió un leve escalofrío correr por su espalda al escuchar eso, volteó lentamente hacia atrás para ver a Little King John, el cuál tranquilamente y sin hacer contacto visual con él, parecía estar buscando algo de su túnica y lo encontró.

—¡Ajá! —Expresó en señal de triunfo, para luego proceder a sacar un cuaderno, el cuál a simple vista se observó que estaba lleno de pequeñas notas con pequeñas hojas de colores pegadas que sobresalían de las páginas, Ratboy Genius no lo sabía pero era su diario, el cuál cargaba no solo para hacer anotaciones de su día a día cuando llegaba la noche, si no que también la usaba para hacer notas importantes a lo largo del día, un ejemplo sería bocetar algunos pequeños dibujos de lo que se atravesaba por su mente y así relajarse cuando no tenía su piano a la mano.

Little King John comenzó a hojear el cuaderno, mientras Ratboy Genius de forma no discreta intentaba ver el contenido del cuaderno, su curiosidad era poderosa, pero cuando Little King John lo vio de reojo y se dio cuenta de sus intenciones de inmediato y muy molesto se dio una vuelta de más de noventa grados para evitar que la rata amarilla siguiera fisgoneando. Little King John arrancó una hoja de papel y cerró raídamente su cuaderno y visiblemente emocionado miró a Ratboy Ganius.

—Bien, Ratboy Genius, lo que te voy a dar es algo tan genial que me da toda la razón del mundo para ser estricto contigo y solo pedir perfección de parte de tu trabajo—. 

Un leve escalofrió recorrió por su espalda, empezó a sentir el peso de la gran responsabilidad que cargaba en sus hombros. Como si se tratara del pétalo de una flor, Little King John le dio con delicadeza aquella hoja; al tenerla en sus manos y extenderla frente a sus ojos, Ratboy se sorprendió lo que vieron sus ojos. 

Era un plano de su vestuario, muy bien diseñado y cuidadosamente detallado. También tenía en una pequeña esquina un garabato chistoso del propio Little King John, Ratboy Genius río un poco por eso, pero no tardó en captar su atención de nuevo en lo que importaba. 

Mientras Ratboy Genius seguía mirando meticulosamente y con asombro aquella hoja de papel, Little King John retomó la compostura y volvió a tomar su actitud rígida y apática con Ratboy. 

—Como puedes ver, me adelanté un poco con el trabajo. Claramente no hay nadie con mejor criterio de que es lo que me queda mejor que yo mismo; es por ello que te pido que ni si te ocurra arruinarlo—. 

—¡Cla- Claro! ¡Haré un trabajo excepcional! — Exclamó, aún con los nervios encima pero aún con ello permaneciendo determinado y emocionado por su objetivo. 

Little King John con su perspicacia se dio cuenta de que Ratboy Genius poco a poco temía de la inmensidad de la situación en la que se metió, así que sonrió malévolamente y con una ceja levantada habló del tema que seguro haría que la rata amarilla se diera marcha atrás.

—Interesante, pero bueno, ahora hablemos del tema que seguro más te compete—.

—¿A qué te refieres? —.

—Tu paga, Ratboy Genius. Esto no es una fiesta de té o una visita inoportuna, esto es un encargo de negocios, lo que significa que tú me haces el pedido y a cambio yo te doy una paga. Así que dime ¿Cuánto de pago vas a querer? O también es opcional decirme ¿Qué es lo que vas a querer que te de cómo pago? —.

Ratboy Genius dejaba su mirada de un lado a otro, estaba nervioso, no porque no sabía que responder si no porque sabía que lo que quería como paga haría que automáticamente su plan se viniera abajo. Little King John gozaba ver como al pobre se le acababan las opciones, sabía que Ratboy Genius era alguien noble y altruista, que llegó con intenciones despreocupadas, pero él era también un monarca de negocios; después de todo era capitalista, con sus negocios de jabón y papas kanishes era obvio que también conocía las reglas de mano de obra y paga.

Ratboy Genius no entendía que Little King John tenía una mente fuera de sentimentalismos en su mayor parte, buscaba productividad y resultados. Si este no pedía una paga dentro de lo que John consideraba útil, insistiría hasta que Ratboy no pudiera con la presión y este por mantener sus principios en alto renunciaría al proyecto.

Mientras tranquilamente el rey esperaba la respuesta de Ratboy, al otro lado de la habitación estaba Sneezy, con la cabeza pegada a la puerta, la tensión le inquietaba demasiado, sabía las intenciones de John pero quería quedarse en silencio un poco más antes de intervenir y ver como acababa eso, hasta donde sea indispensable su intervención; por otro lado Old Froggie también le seguía, aunque era por intenciones más de querer enterarse de todo por simple morbo y conocer el espectáculo completo.

—Si se le puede llamar paga, me gustaría no tu amistad, si no una relación amigable y fuera de tensiones contigo, Little King John— Contestó Ratboy rompiendo el silencio tenso de la atmósfera.

Little King John río disimuladamente un poco —¿Es un chiste, verdad? Ya dime en serio, ¿Qué pides?—.

—Eso, Little King John, yo lo único que quiero es que al ayudarte con este proyecto podamos llegar a un acuerdo pacífico y sin tensiones— Respondió con una sonrisa amable.

—¿Quieres que te sea honesto? Eso es una paga que no te aseguro darte, te postulaste para un trato de negocios Ratboy Genius. Si quieres que te dé una paga entonces que sea una paga que esté dispuesto y posibilitado a darte, si no es así entonces no hay trato; no quiero meterme en problemas después, nada me asegura que después no estés reclamando tu paga— Little King John contestó fríamente, mirando a Ratboy con sus ojos juzgadores que penetraban su ser como filosas cuchillas.

—¿Harás algo al respecto? —Preguntó Old Froggie ya preocupado por la situación que poco a poco se ponía más drástica.

—Solo espera un poco más— Respondió Sneezy, sabía que tal vez y solo tal vez podía haber un giro en los acontecimientos si Ratboy sabía mover sus fichas de ajedrez correctamente.

Ratboy Genius sabía que estaba en el terreno de Little King John, un terreno que automáticamente lo desfavorecía si no sabía adaptarse rápidamente a él. Pensó en sus opciones y realmente no tenía muchas. Quería pasar un buen rato no solo para poner aprueba las habilidades que había adquirido gracias a su novia, si no que también quería arreglar las cosas con el rey al ayudarlo con un proyecto tan importante y al menos quedar en buenos términos, no lo forzaría a una amistad porque para ello sería mucho más complicado, pero sí algo, aunque sea pacífico y amigable.

Pero claramente Little King John no estaba dejando las cosas a su favor, era hostil y quería tener una excusa para sacarlo del juego lo más pronto posible dando como blanco a sus principios de amabilidad y no esperar algo a cambio, nada que ver con la visión productiva y en busca de crecimiento por recompensas de Little King John. Así que después de tomar en cuenta sus opciones, Ratboy Genius supo que pedir como una paga.

—Bien, en ese caso, me gustaría que mi paga sea una honorable cantidad de… Jabones, de los que vendes— Expresó con una sonrisa y mirada segura.

—¿En serio? —Respondieron incrédulos Little King John y Sneezy de forma simultánea.

—Claro y… Unos regalos para mis amigos, Baby y también para mí, seguro que al ser un rey podrás conseguirme ciertas cosas especificas— Contestó y reafirmó una vez más la rata amarilla.

“Tienes que aceptar cuando fuiste derrotado…Si”

Esa frase junto a una voz masculina y grave salieron de la parte más escondida de la mente de Little King John, no tenía ni idea de dónde su mente pudo haberla escuchado, pero no era momento de pensar en ello. Miró fijamente a Ratboy Genius y dio un gran suspiro.

—Está bien, es un pago justo que te puedo ofrecer por tu mano de obra, es un hecho—.

Sneezy sin duda quedó sin palabras, por como Ratboy con astucia logró girar a su favor un juego que John había dado por ganado; por otro lado, Old Froggie parecía muy entusiasmado al ver la victoria de Ratboy y fue reprendido varias veces por Sneezy para que no hiciera ruidos que los pudiera delatar. 

Little King John sacó un bolígrafo de su túnica junto a un papel, dejó el documento en la mesa y firmó sin problema este, después se lo pasó a Ratboy,  junto con el bolígrafo —Lee el contrato y después firma en el espacio vacío, con eso ya podrás empezar a trabajar para mí—.

Ratboy Genius se acercó tímidamente al documento, luego lo tomó con nervios y lo leyó con detenimiento y atención, porque sabía que John para estas cosas podía ser algo sucio y tramposo. Aunque para su sorpresa no era nada del otro mundo, solo un acuerdo normal de negocios sin nada que lo alertase realmente.

Esto sin duda lo dejó confundido, tomó la pluma y aún extrañado miró a Little King John, este claramente se percató de que su contrato no era lo que estaba esperando.

—¿Qué? ¿Qué se te hace tan impresionante?—.

—Na-Nada, nada, es solo que…—.

—¿El contrato? Pues no creas que te estaba esperando específicamente a ti y que lo escribí teniendo en mente “uy, voy a crear un contrato sumamente abusivo y explotador para quien sea que haga mi traje”, para nada ¿Pues quién crees que soy o qué?— Contestó Little King John de forma rezongona y claramente indignado, sabía el porque de la actitud de Ratboy Genius y eso ya le tenía arto.

Ratboy Genius aún consternado firmó el documento, Little King John lo tomó arrebatándoselo de la vista rápidamente y lo volvió a guardar en su túnica.

—¿Cuántas cosas tienes guardadas ahí adentro? No sabía que tenías bolsas—.

—¿Has visto películas de agentes secretos? Me gusta la idea de tener lo necesario guardado en una prenda tan elegante e importante como lo es mi túnica, así que a parte de agregarle la capa también pedí como extra unos bolsillos interiores. Supongo que tengo lo indispensable— Contestó Little King John con una sonrisa forzada.

Con esa respuesta, tanto Old Froggy como Sneezy estuvieron más tranquilos ya que la respuesta de John reflejaba que las aguas estaban calmadas de su parte; Old Froggy ya había tenido mucho chisme por ese día y Sneezy sin duda ya estaba tranquilo con la aparente paz que habría entre ellos. Sneezy invitó a Old Froggy a pasar el rato y este accedió, alejándose de la puerta sin saber que esto no había acabado como ambos creyeron.

—¿Quién te hizo la túnica y esas modificaciones? —Preguntó Ratboy Genius mientras señalaba la prenda.

—Mi fiel compañero de aventuras— Contestó secamente Little King John.

—¿Sneezy?—.

A Little King John se le hacía difícil pronunciar el nombre de Sneezy enfrente de Ratboy y se le hacía aún más difícil y hasta horroroso escuchar que él pronunciara el nombre, sabía que él le había puesto lo que resultó ser un mísero nombre clave. Ya había hablado con Sneezy acerca del tema, pero aún le dolía porque representaba una mentira de la cuál confío durante su época más difícil.

Eso, junto a sus extraños problemas internos hacían que se sintiera aún más vacío y solitario. Sneezy el náufrago que realmente no existió, solo era una fachada para el agente Buck Dodger; el agente que con esta fachada le mintió y ocultó acerca de todo y siendo cómplice de su archienemigo y el que de una forma u otra lo metió en un problema aún mayor en la que este no quería estar metido y mucho menos de la cuál el fuera culpable o tuviera algo que ver. De solo pensar en ellos dos acordando el nombre solo hacia que su pecho doliera, incluso le ocasionaba una extraña sensación que él creía que era lo más cercano a la sensación de las náuseas (ya que las ratas son incapaces de vomitar). En este tipo de ocasiones ni siquiera era capaz de referirse a Sneezy con ese nombre ni con su nombre real y solo con podía hacerlo con títulos que  le hacían referencia.

Habían acordado que él solo conoció a Sneezy y que se quedaría con eso y con todo lo que conllevaba; ambos estaban felices con eso hasta que llegó Ratboy y le recordó que eso solo era una dulce mentira en la que quería seguir creyendo.

—Si, él fue el que me hizo la túnica y después él mismo fue el que le agregó la capa y los bolsillos extra en su interior; la capa fue para un comercial y los bolsillos por lo prácticos que son—.

—Jeje, me da curiosidad saber cómo lo hizo si ni siquiera tiene dedos para tomar las cosas — Contestó Ratboy, mientras reía un poco intentando imaginar a Sneezy ideando una forma de como lo hizo.

—Supongo que alguien extra le echó la mano con eso, una persona al azar del reino o un amigo que no conozco, quién sabe ya que con él nada es seguro —.

Ratboy Genius sintió ese último comentario muy referente a la verdad que los tres y sobretodo él y el extraterrestre sabían, eso volvió a poner el ambiente incómodo y tenso, con cierto dolor sordo pero visible de parte de Little King John.

—Aún así, con ayuda o sin ayuda le agradezco de corazón el gesto y aprecio ésta prenda como uno de mis tesoros más preciados… Me gusta pensar que es algo así como mi ascenso a la grandeza que ahora poseo—Guardó una pausa al darse cuenta que fue bastante transparente con su sentir más de lo debido— Es por ello que te pido que tengas sumo cuidado con ella, ya que como te percataste en el diseño de mi traje también mi túnica está involucrada —.

—Claro, Little King John. Tendré cuidado con eso— Contestó resignado y arrepentido, como si de esa forma estuviera pidiendo disculpas por todo en lo que lo metió.

Ambos guardaron un incómodo silencio por unos segundos, era como si ninguno supiera realmente si estaban dispuestos a seguir con esto. —Bien, ahora te voy a mostrar otra cosa—Expresó Little King John al pasar a lado de Ratboy Genius sin hacer contacto visual. Little King John tomó la caja más grande y la destapó, dejando ver varias telas de diferentes texturas que Ratboy usaría. —Bien, con esto vas a trabajar, si necesitas más yo personalmente  pediré que te traigan las cosas necesarias extra—.

Ratboy Genius miró con sorpresa todo y antes de que pudiera decir algo fue interrumpido de inmediato —Si quieres, puedes comenzar con las partes sencillas, luego me puedes hacer medidas y todo eso, para que vayas acostumbrándote a trabajar para mí —.

Ratboy asintió tímidamente con la cabeza, tomó de nuevo el diseño que hizo Little King John —¿Te parece si inicio colocando esto en su túnica? — Preguntó mientras señalaba la tela que cubriría el cuello de Little King John, además de agregar un broche de oro en este.

—Ok, las cosas que necesitas están ahí y… En un momento te doy mi túnica…—.

Ratboy Genius y Little King John procedieron hacer las cosas muy profesionales, por así decirlo. Después de sentarse por un momento y vigilar a Ratboy en silencio y con una mirada intimidante, Little King John pensó que ya era suficiente “vigilancia”, el trabajo estaba por así decirlo en buenas manos. Antes de que si quiera se levantara para irse, Ratboy Genius rompió sus planes con una conversación.

—Así que ¿Nunca habías sido coronado antes? — Preguntó Ratboy Genius mientras seguía con su trabajo.

Little King John lo observó un poco más calmado, pero de igual forma con la guardia en alto —No. Ni siquiera en mi primer reino—.

—Entonces… ¿Cómo es que te volviste rey? —.

Little King John estuvo a punto de contestar esa pregunta como si fuera obvio, pero pensó detenidamente y analizó su respuesta… —Yo… No lo sé…—.

—¿Qué quieres decir? — Ratboy estaba desconcertado.

—¡Si! ¡No tengo mucha idea! ¡¿ok?! — Alzó la voz como de costumbre— … Solo que… Es que… Siempre fue un hecho—.

—¿A qué te refieres? —

—Si… Siempre he tenido la corona en la cabeza ¿Sabes? Siempre he tenido sirvientes a mi servicio, los mejores lujos, cuidados y siempre mis súbitos tuvieron en claro que era yo el rey… Al menos en mi primer reino, es como si… Es como si las cosas hubieran sido así todo el tiempo y siempre—.

Esto no tenía sentido, Ratboy miró confundido a Little King John y dejó su concentración del trabajo a un lado por un momento y la puso en Little King John — Respóndeme algo, ¿Cuándo tomaste el trono? Te conocí ya siendo el rey y tenías mí misma edad—.

—A los once años, no exactamente recién cumplidos, pero sí, a esa edad—Contestó Little King John. — ¿Qué insinúas? —.

—Es que, bueno… Los reyes normalmente toman el trono cuando su antecesor ya no está disponible para hacerlo y técnicamente tomaste el cargo cuando eras un niño… Ahora que lo pienso, eso explica el hecho porque estabas tan encaprichado con Baby— Ratboy Genius miró como Little King John estaba igual de desconcertado, ambos se daban cuenta que la información en esta historia estaba incompleta— Little King John… ¿Cuál es tu recuerdo más antiguo? —.

Little King John se recargó en el sillón como si nada, estaba confiado hasta que después de pensarlo un poco sobre este recuerdo, un escalofrío recorrió su espalda— Mi recuerdo más antiguo es… Yo despertando en una mañana, era un pequeño… A fuera de mi habitación estaba mi corona, en frente de mis pies en la entrada, me la coloqué con mucho cuidado ya que se me calló unas dos veces y… Cuando empecé a pasear por el palacio, como si… Lo conociera y al mismo tiempo no, me topé con un sirviente que se arrodilló ante mí y me dijo que me buscaba para decirme que el desayuno estaba listo… Eso es todo—.

—¿Nada más? ¿No hay recuerdos un poco más anteriores? En tu época como príncipe o… Tu familia, todo miembro de la realeza forma parte de una gran e importante familia—Dijo Ratboy, insistiendo en que eso no podía ser todo; estaba confundido y pedía más respuestas, esto estaba mal, muy mal, esto era inquietante y hasta un poco aterrador.

Little King John intentó recordar algo más, pero cuando lo intentaba sentía un agudo dolor de cabeza y mucha confusión, como si no tuviera permitido ir más allá o solo eso estaba a su capacidad mental. Al ver que sus intentos eran en vano, sudó fríamente y miró a Ratboy aún más asustado que él, había algo extraño e inquietante en su normalidad que resultaba que no lo era tanto como él creía— Yo… Amm… C-Creo que…— Tartamudeaba o se trataba cada vez que intentaba decir algo— No, eso es todo—.

Ambos se miraron inquietos, detenidamente, algo estaba mal en todo esto. Ratboy se sentía aterrado por lo que sea que le estuviera sucediendo a Little King John, mientras que este estaba inquieto porque Ratboy tenía razón, debe de haber más pasado ahí ¿Por qué solo eso?.

Aunque tal vez… Si de pasado se trataba podía haber algo más.

—Bueno, ese es mi recuerdo más antiguo, sin embargo, si de algo más puedo hablar es de un sentimiento… ¿Cómo se llama? Es cuando algo te da un extraño sentimiento de tristeza mezclado con placer y alivio…  Por algo que está en tu pasado, por algo que ya no está aquí— Little King John no recordaba la palabra, estaba intentando ponerla en palabras, ponerla en todo lo que sentía con esas visiones o sensaciones.

—Hablas de ¿La nostalgia? —.

La palabra iluminó el corazón de Little King John—¡Si! ¡Eso! ¡La nostalgia! —Respondió mientras señalaba a Ratboy Genius emocionado y con un gran gozo. Después de ello respiró, se calmó y volvió a ponerse en situación —Bueno, si algo puedo agregar es que… Últimamente ese sentimiento ha estado muy presente día a día conmigo… Pero ahora que hablamos de mi pasado, me doy cuenta que en realidad ya ha estado conmigo—.

Ratboy se levantó y le extendió la túnica ya modificada, con aquellos toques de alrededor del cuello y con el broche de oro—Te escucho, Little King John— Le dijo con una voz amigable y amable

.

Little King John tomó la túnica lentamente, nada que ver en como su lenguaje corporal estaba funcionando a ese momento —Ok… Siéntate, creo que esto te va a interesar…—.

Ratboy se sentó, revisó que era lo siguiente más fácil en el diseño del traje de Little King John, lo siguiente era ese pañuelo que siempre usaban la gente de la nobleza y realeza. No había mucho que hacer y coser, así que solo tomó la tela y le iba a dar las modificaciones necesarias; eso al menos le permitiría escuchar con atención al rey mientras hacía su trabajo.

—Bien… Bueno… En la actualidad, el momento más pasado que he sentido en ese sentimiento… Creo que fue cuando conocí a Baby— En eso fijó su mirada detenidamente en Ratboy para estar alerta a cualquier juicio que este hiciera, pero cumplió con lo que dijo, solo escucharía. —Fue… Fue ese día en el que yo más recuerdo que sentí eso… Estaba paseando tranquilamente por los alrededores de mi reino, pasé por un bello valle lleno de flores que yo consideraba solo de mi propiedad, estaba siendo acompañado por un guardia y por…Una consejera si es que le puedo llamar así. Vimos una figura desde lo lejos y en mi mentalidad de ese momento pensé “¡Nadie puede tomar lo que es mío!”, así que nos aproximamos para confrontar y echar a esa persona. Cuando estuvimos a unos metros le ordené que se fuera y dejara lo que era de mi propiedad… En eso ella se volteó y…— Little King John guardó un momento de pausa, su mirada se posó hacia el techo de la habitación.

—¿Y…?—.

—Y cuando ella volteó y la vi, observé su dulzura y como cargaba aquellas flores que estaba recolectando … Sentí como si algo hubiera vuelto a mí, una linda sensación de que algo que se fue hace mucho tiempo había regresado conmigo… Algo familiar porque sentí ya haber visto esa imagen antes en algún lugar y me causó… Todo lo que significa nostalgia en general… En ese momento no comprendía ese sentir hasta ahora—.

Ratboy Genius Lo miró con una ceja levantada y con un tono más frío y neutral, contestó —¿Por qué no la querías dejar ir?—.

Little King John sintió un terrible escalofrío recorrer su espalda, miró a Ratboy Genius con terror. Era momento de confrontarse a sus fantasmas internos una vez más. Se incorporó y con la voz más seria y normal que pudo hacer, contestó — Cuando hablé con ella conectamos al instante, me calló muy bien y le ofrecí a dar una vuelta conmigo por el reino, ella aceptó y le enseñé cada rincón; cuando llegó el momento, ella me dijo que tenía que marcharse y yo… Al ser un niño que creía que podría tenerlo todo, no quise perder lo que yo consideraba mi tesoro, mi algo que por fin había recuperado y no quería que se fuera. En mi inocencia de niño lo confundí con enamoramiento y bueno, lo demás ya te lo sabes—.

Ratboy Genius suspiró pesadamente, miró a los a Little King John a los ojos y vio cierto dolor y pena, se estaba arrepintiendo de algo pero al mismo tiempo se notaba que estaba conteniendo algo. —Oye, Little King John… Esto va con una gema, cierto?— Preguntó señalando el pañuelo.

Little King John asintió y de inmediato se levantó de su asiento, caminó hasta la mesa y tomó la caja más pequeña —Olvidé decirte sobre la caja pequeña —Saca de la pequeña caja lo que parece ser un broche con un rubí —Quiero que mi pañuelo lo lleve—.

Ratboy Genius lo tomó —¿De dónde lo sacaste? Es hermoso —Preguntó mientras miraba con asombro la gema.

—No lo sé, cuando me fui de mi antiguo reino, tuve la sensación de que tenía que llevarme esto, ¿Por qué? No lo sé, solo sé que es importante—.

Ratboy Genius siguió inspeccionando el broche con extrañeza, Little King John no parecía ser de esas personas que hacen algo por ningún propósito. Era bonito, sí, pero debía tener otra razón —Está bien, revisa tu túnica mientras coloco esto—.

Little King John asintió y se colocó la túnica, la inspeccionó con cuidado cada detalle un pequeño rato y con todo el dolor de su ego, era justo como la quería— Me alegra saber que eres alguien, competente. Lo suficiente para servirme, eso me gusta —.

Ratboy Genius le dio su pañuelo real ya con el broche con la gema incrustada y con una mirada calmada y una sonrisa expresó —Espero que también esto sea de su nivel, majestad —.

Little King John lo tomó y lo colocó alrededor de su cuello, igualmente, con todo el dolor de su ego y rencor, tuvo que admitir la calidad del trabajo.

—Vaya, Ratboy Genius, has superado bastante mis expectativas. Felicidades, espero que sigas esforzándote, no creas que tienes tu trabajo ya cubierto. Aún no, no hasta que tenga mi traje completo y esté en mi coronación.—En eso lo miró dándole una sonrisa algo neutra, pero que sin duda era un gran paso para Ratboy Genius.

En eso, unos golpes desesperados tocaron las puertas y alertaron a ambas ratas, Little King John las abrió y resultó ser Old Froggy, el cuál estaba no asustado, pero si nervioso y sumamente inquieto.

—¡Wow! ¡Amigo, ¿qué ocurre?!— Preguntó Little King John confundido y preocupado por el estado de su amigo.

—¡Little King John! ¡Necesitamos tu ayuda! ¡Un ser extraño pide tu presencia!— Contestó mientras su mirada constantemente a desviaba del lugar de donde vino con insistencia y no podía hacer un contacto visual constante.

—¿Un extranjero con malas intenciones? Por favor, sabes que esos solo dan risa cuando intentan oponerse ante mi autoridad— Contestó con osadía y bastante arrogante.

—No es eso, Little King John… Esa cosa… Es diferente — Contestó con pavor.

—¿A qué te refieres con “cosa diferente”? — Comenzó a preocuparse un poco, no era lo que estaba acostumbrado con lo que significa “un intruso”—¿Cómo llegó esa cosa aquí? —.

—No lo sé, estaba con Sneezy en la plaza principal hasta que de repente, en el centro del área donde estábamos, salió una entidad encapuchada que exigía tu presencia con una voz distorsionada. Sneezy y yo pedimos que se mostrara y cuando se quitó la capucha; resultó ser una horrible criatura de más o menos dos metros y un poco más o incluso tres metros, con dientes afilados y enormes, delgado hasta los huesos, una mirada penetrante con ojos brillosos de color violeta, una armadura incompleta y un pelo color gris plata desordenado—.

Little King John se desconcertó con la descripción de la entidad.

—Mira, tú sabes que somos personas que prefieren la paz, no queríamos confrontaciones, así que vine a llamarte para que le des lo que sea que quiera y así se largue… No vaya ser que hay más de él en algún lugar—.

Ratboy Genius estaba desconcertado y hasta asustado, pero al ver como Little King John se acomodó la corona, su túnica y su nuevo pañuelo del cuello con una gran actitud estoica le recordó que ambos habían enfrentado a cosas peores; eso lo calmó y le dio la seguridad de que Little King John mantendría todo bajo control.

—Bien, llévame con eso… A ver qué es lo que quiere y espero que no me esté haciendo perder el tiempo —.

Old Froggy asintió y con rapidez ambos se retiraron del lugar, Ratboy Genius por otro lado no solo podía quedarse ahí y corrió detrás de ellos, ambos tenían un paso muy largo.

Así es como Little King John llegó a la plaza principal, dónde todos sus súbitos susurraban y miraban con terror al ser que estaba en el centro. Todos lo estaban esperando y al ver su presencia unos sintieron alivio y otros más miedo aún. En frente, a unos quince metros estaba  Sneezy en posición de guardia, por si cualquier cosa salía mal, el podría estar listo para defender o atacar.

Little King John se posó a su lado y miró con tranquilidad y detenidamente a la criatura, él no estaba en posición de pelea, de hecho se encontraba de brazos cruzados esperando su presencia.

—¡Saludos! ¡Majestad! — Comenzó la criatura y se inclinó levemente, con un saludo amistoso y con una actitud relajada — Es un gran gusto tenerlo aquí — Su voz era entre grave y aguda, como la de un adolescente, pero sumamente irritante por la distorsión que le acompañaba.

—Hola, creo que ya sabes quién soy, ¿No?— Preguntó con la misma actitud estoica, mirándolo fijamente.

—¡Claro! ¡Eres el magnífico Little King John! ¡Y vaya que el título te hace justicia! Eres pequeño e injustamente eres un rey —Contestó de forma burlesca y divertida. —Como sea, oye, necesito que vengas conmigo, no tengo todo el día y no quiero estar rogándote— Todos lo miraron incrédulos por el descaro total de la petición de este extraño, incluso Little King John frunció el ceño, no porque estuviera ofendido si no por el tipo de petición y despreocupación de este tipo.

—¿Y cómo por qué? Oye, no puedes aparecer así nada más y pedirme algo como eso así nada más— Respondió Little King John.

—¡Oh cierto! ¿Dónde quedaron mis modales? Mi nombre es EnderYoung—Se inclino levemente ante Little King John mientras hablaba— Mira, no nos importa tu reino, tus amigos ni nada de eso, solo te queremos a ti—Luego se dirigió a todos los demás espectadores— La cosa es así: necesito que den su completa e inmediata rendición y entreguen a su gobernante, háganlo por las buenas por favor o lo haremos difícil ¡Para TODOS! Y estoy seguro que no solo yo quiero evitarse esa terrible situación—.

Little King John ya molesto camino amenazante al ente, cuando quedó a unos pasos en frente de la entidad, estiró su cuello para estar así cara a cara con él.

—Mira, EnderYoung. No sé lo que quieres ni lo que buscas con mi entrega y rendición, pero no me interesa— Le dijo de forma amenazante mientras que EnderYoung solo lo miraba con seguridad y calma con sus ojos brillantes— Así si quieres salir con eso, lleva tu presencia a dónde sea que hayas venido y ¡Déjanos en paz! ¡Me has hecho perder mi tiempo!— Contestó con sus característicos gritos.

EnderYoung lo siguió mirando con calma, sin ninguna reacción y totalmente inmutado. Dio un gran suspiro de cansancio y luego de unos segundos que se sintieron como largos minutos, contestó —¿Terminaste? —.

Esa reacción tan tranquila consternó a Little King John, nadie había reaccionado así a sus gritos o si quiera a ver que estaba enojado, por lo menos no exactamente tan tranquilamente.

—¿Sabes? Hace más o menos unos ocho años tuve un pequeño problema con dos ratas en donde yo vivo y a cada una les di un éstate quieto cuando se pusieron demasiado incontrolables— Dijo mientras ahora caminaba con lentitud hacia Little King John, haciendo que su cuello poco a poco retrocediera y se encogiera a su medida original —A una, la más grande;  con estos dientes le arranqué la cara, hizo un desastre de porquería en el piso e incluso manchó mi hermosa armadura, pero no tuvo oportunidad de sentirlo tanto porque después le arranqué una pequeña pelotita del pecho, si sabes a lo que me refiero— Río un poco después de dar tan macabro chiste— A la más chica, la más bonita de hecho, después de ver qué hice con su compañero chilló y chilló rogando para que no le hiciera daño; pero no me importó y con mis manos le abrí el estómago sacándole sus entrañas y la dejé agonizando por un rato. 

La multitud quedó estupefacta ante aquella anécdota macabra y contada por aquel ser que no solo era un descarado, si no que ya rayaba claramente en la antipatía y psicopatía. Era un hecho que este ser era más que solo un intruso común.

En eso, EnderYoung tomó abruptamente el brazo        derecho de Little King John al percatarse que intentó atacarlo con un golpe, lo cuál hizo más tensa y horrorosa la escena— Ahora, como te das cuenta, para mí solo eres una plaga más de la cuál me puedo encargar, así que piensa por un momento en tu gente y deja de hacerme perder el tiempo con formalidades—.

Cuando ambos quedaron frente a frente, Little King John por primera vez conoció un miedo cercano a la muerte al ver sus ojos púrpura brillantes que penetraban todo su ser, mientras este abría levemente su boca con esos grandes y afilados dientes, la escena era aún más horrible al ver que también su boca emanaba un brillo dentro de su boca, como si tuviera llamas ardiendo dentro de él.

Pero en eso, repentinamente EnderYoung fue golpeado en la cara violentamente directo al lado lateral de su rostro por Sneezy, quién le dio una fuerte patada para salvar a Little King John y sacarlo de sus garras, dejándolo totalmente en el suelo y adolorido.

—¡Oh maldita sea! ¡Ahg! —Gritaba y se quejaba horriblemente la criatura mientras sobaba el área lastimada, concretamente el punto dónde su mandíbula estaba unida a su cráneo —¡¿Qué diablos te pasa?! ¡¿Querías separarlo o romperlo?!—.

—¡John!, ¿Estás bien? ¡Vámonos!— Dijo Sneezy mientras que usaba su cola para jalar a Little King John del brazo. Pero este no hizo caso, aún estaba procesando el pavor que vivió— ¡Por favor John! ¡Vámonos!—.

En eso la criatura aún sobándose, se levantó no enojado, pero si consternado— Oye, créeme había formas menos dolorosas de defender a tu majestad de juguete, pero créeme que no vale lo suficiente para golpearme así—.

En el momento que dejó de calmar el dolor del golpe, por fin pudo enfocar su atención en el agresor y pasó algo que nadie, ni siquiera el propio Sneezy estaban esperando.

—¡Owwww! ¿Así que fuiste tú el pequeño chico malo que me golpeó?— Preguntó con mucha ternura a Sneezy, así mismo sus ojos pasaron del intimidante brillo purpura a grandes y con un brillo más claro.

—¿Qué?— Preguntó Little King John incrédulo.

En eso, EnderYoung se apareció a lado de ambos repentinamente y tomó a Sneezy y lo levantó —¡Que lindo Creeper doméstico tienes acá! ¿Cómo te llamas pequeño?— .

—¡Ah suéltame criatura horrorosa! —Gritaba Sneezy mientras se retorcía para deshacerse del agarre de EnderYoung.

—¡Oye! ¡Suéltalo!—Exigió Little King John pero antes de que pudiera hacer algo, EnderYoung le dio una patada en el estomago que terminó por sacarle el aire y dejarlo por un momento en el piso.

—¡Cállese!—Dijo EnderYoung en forma de regaño. 

La confrontación pasó de tensa a una de naturaleza inexplicable, a estás alturas ya la gente no sabía si tomarse enserio al intruso y a la situación en general.

—Nunca había visto un Creeper como tú, ¿Qué clase de raza eres? ¡Eres como una mezcla entre un Creeper, una iguana y un perro salchicha! ¡Eres maravillosamente adorable!— Expresó EnderYoung mientras miraba de arriba abajo a Sneezy.

—¡Suéltame o ya verás lo que haré! —.

—Si ya sé, vas a explotar o me volverás a dar una patada voladora, pero ahora te tengo en mis manos y si no quieres morir, no explotarás— EnderYoung cargó a Sneezy en su costado izquierdo.

—¡¿De quién es el Creeper?! — Preguntó a la multitud.

—En primera no es un Creeper doméstico y en segunda, Sneezy no es de nadie, es uno más, pero si es mi compañero y por lo tanto ¡Déjalo en paz!—Dijo Little King John recién levantado y bastante enojado, pero aún recuperando el aire.

—Nah, un tipo como tú no tiene buenos gustos— Empujó a Little King John y calló al suelo fácilmente.—Ahora sí, ¡¿Quién es el dueño del Creeper de raza tan exótica?!— Levantó a Sneezy para exponerlo.

—Y dale con eso— Renegó Sneezy entre dientes, esto de que lo confundieran con un Creeper era desagradable, ni sabía que era eso pero al parecer el simple hecho de que lo comparasen con algo ya lo hacía enojar.

Nadie abogó por el pobre Sneezy, no porque no quisieran ayudarlo, si no porque eran tan cómica e irreverente la situación que ya más parecía una broma de mal gusto o algo por el estilo. Ni siquiera Old Froggy o Ratboy Genius tenían idea de cómo actuar.

—¡Oye, tú! ¡Sí, tú! ¡El amarillo! —Gritó EnderYoung señalando a Ratboy Genius y enfrente de los ojos de Little King John se teletransportó a lado de Ratboy Genius, esto le inquietó y sorprendió bastante, al igual que a todos al ver a tal cosa tan cerca de ellos. — Oye, se ve que tú tienes buen gusto, ¿Tú eres el dueño, no?—.

—Yo, estem…—Respondió Ratboy Genius pensando en como actuar.

—¡No! ¡Sneezy no es de él ni de nadie! ¡Ahora bájalo  y lárgate!—Señaló Little King John recién levantado y un poco recuperado de sus golpes, pero EnderYoung le hizo caso omiso a su furia histérica. Sneezy ante esto solo le hizo la seña de que cerrara la boca y siguió retorciéndose e intentando liberarse del agarre.

EnderYoung se dirigió amistosamente a Ratboy Genius—Escucha, mis compañeros y yo no queremos atacar e invadir, no somos tan básicos y baratos para hacer eso. Solo queremos que se rindan y entreguen a ese idiota con la corona; no creo que sea un problema, se nota que ninguno de ustedes le tiene mucha estima para sufrir su ausencia; además nos conviene a todos, nosotros nos ahorramos trabajo y ustedes problemas—.

Todos observaron a Little King John, que si bien ya estaba de pie, las palabras de EnderYoung le preocuparon. Era la hora de la verdad, la verdad de si la gente le apreciaba o seguía siendo aquel rey que nadie realmente apreciaba como él creía.

—Y ya que me gustó esto, también quiero que me dejen llevarme a este Creeper como recuerdito. No es obligatorio en sí, pero no seas malo, me gustó y está bien bonito ¡Es más! ¡Lo voy a nombrar Pepe! Un excelente nombre ¿no?—.

—Y dale con los nombres bien chafas y raros— Expresó Sneezy entre dientes con molestia y resignación .

—¿Entonces qué dices?— Preguntó con una gran sonrisa macabra, por lo menos así se veía por sus grandes dientes y su mirada fija.

Ratboy Genius pensó que hacer o que decir, puso su mirada en Sneezy que aún no se rendía en soltarse y luego volteó a ver a Little King John, quién esperaba su respuesta también.

—Para empezar, Sneezy no es ningún Creeper doméstico… Sea lo que sea eso realmente; en segunda no entregaremos a Little King John, él si ha luchado y hecho de todo para llegar hasta aquí, salvó mucha gente en el proceso y les ha dado un hogar donde pueden estar tranquilos… Como para que lo traicionemos y lo entreguemos a ti, no fíjate que no— Respondió Ratboy Genius mientras señalaba a EnderYoung con el dedo, sumamente determinado a defender al rey. La multitud también miró a EnderYoung con desafío y dispuestos a sacarlo a patadas si no se largaba.

En eso Sneezy por fin logró liberarse, dándole un fuerte mordisco al brazo de EnderYoung. Este dio un grito desgarrador que sin duda te lastima los oídos y Sneezy huyó rápidamente de estar a su lado.

—¡Aaaah! ¡Oigan su Creeper muerde bien feo!—Comenzó a sobarse el abrazo, dónde Sneezy lo mordió mientras seguía quejándose — ¡Espero que le hayan puesto todas sus vacunas!, no por mí, a mí no me hace nada lo que sea que tenga su Creeper, pero a los demás si les afectaría ¿Saben?—.

Sneezy corrió de EnderYoung y se reunió con Little King John a toda velocidad.

—¡Sneezy! ¡¿Estás bien?!— Preguntó Little King John mientras veía si Sneezy estaba herido o algo.

—No, no, estoy completamente bien, a lo mucho me quejaría del horrible grito que soltó pero eso creo que también lo sentiste— Respondió Sneezy.

—¡Ahg! ¡Es suficiente!— EnderYoung se volvió a teletransportar, está vez de vuelta al centro del escenario, a unos diez metros de dónde estaban Little King John y Sneezy — Les dije quería dejarles las cosas más fáciles para todos, pero no me dejan alternativa.

EnderYoung metió dos de sus dedos a su boca y dio un gran chiflido. Nada pasó por unos momentos, todo estaba en silencio total…

De repente, uno, dos, tres, cuatro y más entes de su tipo de aparecieron alrededor y si EnderYoung era alto, ellos a comparación eran enormes, como de siete metros; todos compartían la cualidad de ser el color de la oscuridad, delgados hasta los huesos, dientes enormes y mirada penetrante con el color púrpura característico. La única diferencia es que ellos parecían no actuar tan conscientes o tan coherentes como su compañero mas chico.

—¡Jaja! Encantadores ¿No? No sean tímidos, ¡Mírenlos a los ojos, verán que será como ver a un gran amigo! —Dijo entre risas y como burla sarcástica.

Ratboy Genius entró en aquella curiosidad de típico personaje de película de terror, sabe que no debe voltear a verlos, pero la curiosidad y estupidez le ganaron. Miró a uno fijamente y este al darse cuenta, se descontroló; el ser pegó un gran grito y se acercó a Ratboy Genius de forma intimidante, luego como si fuera un efecto dominó todos los acompañantes de EnderYoung fueron vistos a los ojos de alguna u otra forma y de igual forma comenzaron el caos de persecución, ataque e intimidación. Todos comenzaron a correr y Ratboy Genius y Old Froggy también fueron a refugiarse.

EnderYoung sonrió macabramente y apareció atrás del rey y de su compañero. —Entonces ¿Qué dice, majestad? —.

Little King John volteó a su dirección, mientras Sneezy se posa a en defensa de cualquier ataque.

—O te rindes y vienes conmigo y salvas a tu gente… ¿O seguirás siendo aquel rey egoísta que verá por su propio bien y huiras? Que yo sepa, un gobernante siempre verá por el bien de su gente—.

Sneezy volteó a ver a Little King John, vió como el ego que creyó inquebrantable era destruida poco a poco por esa cosa. —¡Déjanos tú y los tuyos en paz! — Gritó ya en desesperación por hacer algo, a pesar de saber que era en vano.

—A ti no te diré nada, eres muy bonito como para acabar aquí. ¡Serás mi Creeper doméstico, mi trofeo y recuerdito por esta gran hazaña, mi señora dragona estará orgullosa de mi!— Expresó mientras saltaba y aplaudía felizmente.

“Señora dragona”

Se repitió a si mismo Little King John en su mente, esa última frase retumbaba las paredes de su cabeza una y otra vez. Miró a EnderYoung con furia y determinación, tomó a Sneezy de la cola con la voz sería y casi como un susurro dijo —Vámonos—.

Little King John arrastró a Sneezy con él y luego corrió hacia donde logró ver qué se dirigieron Old Froggy y Ratboy Genius.

EnderYoung miró entre carcajadas como se iban, después uno de sus compañeros habló con él. 

Sus sonidos eran incomprensibles, eran como un susurro distorsionado y con eco, no obstante EnderYoung los entendía a la perfección.

—¡Tranquilo! solo estoy haciendo la misión más interesante, además sabes que esto realmente es rápido porque no tiene a ningún lugar a dónde ir ¡Estamos rodeados por agua! Si nosotros no podemos atravesar por ahí él menos, así que solo diviértete y has tiempo ¿Ok?—.

El ser que le acompañaba parece que le daba reclamos y objeciones a su plan, movía sus manos de un lado a otro exaltado y daba gritos de histeria sumamente horribles.

—Si si, ¡pero oye! ¡Por algo soy el rey de la diversión! En cuanto nuestra Señora Dragona se entere, verás que hasta se le hará adorable el método que elegí, como siempre— Respondió tranquilo y después con un gran entusiasmo circulando por su cuerpo proclamó— ¡Contaremos cinco minutos para causar desastre, romper y patear! Y luego… Iremos a cazar ratas. 

En cuanto EnderYoung dio esa proclamación, el ser a su lado dio lo que parecía ser una risa y desapareció a unirse a sus demás compañeros. 

—EnderYoung, eres un genio— Se dijo así mismo con orgullo mientras se daba una palmadita en el hombro derecho.— Ahora, me pregunto dónde estará escondido esa rata rastrera y el adorable Creeper doméstico.

Continuará...

Dibujito extra de EnderYoung y el Creeper doméstico

Chapter Text

Little King John y Sneezy se encontraban corriendo, yendo más o menos a dónde parece que Little King John vió a Old Froggy y a Ratboy Genius huir.

Pero casi a cada final de un pasillo, se encontraban con esas bestias. La respiración de ambos era agitada y sus sentidos estaban alerta todo el tiempo hasta que se toparon con un callejón sin salida, y si regreso, ya que justo en una de las esquinas estaban una de esas cosas.

Little King John volteó de un lado a otro, vieron que una de las casas estaba con la ventana rota, era de altura justa para caber ahí (techo con 2 bloques de altura respecto del suelo ). No tenían mucho de dónde elegir realmente, así que entraron por la ventana rota y como lo había pensado Little King John, el techo justo le quedaba casi tocando su cabeza.

Ambos se agacharon y se arrastraron hasta a una esquina de la casa.

—¡John! ¡¿Qué demonios fue eso?! —Preguntó Sneezy histérico pero guardando la voz, lo suficiente para que no fueran gritos.

—¡No lo sé! ¡Estoy igual de sorprendido que tú!— Respondió con la misma actitud y tono.

—¡¿Seguro?! ¡Esas cosas no quieren eliminarte por nada!—.

—¡Si! He visto en esta tierra de todo tipo de criaturas, creepers salvajes, zombies, esqueletos y otras cosas. Pero jamás algo como eso— Explicó Little King John.

Escucharon unos ruidos bruscos que al parecer provenían de la mesa que se encontraba cerca. El telón de la mesa era lago casi llegando al suelo, y era lo suficientemente largo para que EnderYoung, pudiera salir de sorpresa ahí, al parecer es una familia grande la que habita esta casa.

Sneezy y Little King John se miraron mutuamente, tras unas cuántas señas acordaron un plan.

John se acercó un poco con cautela, estiró su brazo hasta donde estaba la mesa mientras que Sneezy se paró en posición de defensa por si había que defenderse de lo que sea que estuviera ahí.

La tensión era grande, del miedo y la incógnita se sentía en la atmósfera. A estás alturas, al ver que esas cosas tenían la capacidad de teletransportarse ya nada era seguro realmente.

Pero no, resulta que solo eran Ratboy Genius y Old Froggy quienes temblando de miedo, movían un poco la mesa, los cuatro se miraron fijamente, sorprendidos y aliviados al mismo tiempo. Sneezy y Little King John se fueron con ellos, se sentaron para hacerles compañía

—Asi que estaban escondidos aquí — Empezó Sneezy.

Ambos asintieron.

—¿Por qué quieren tu cabeza? —Preguntó Ratboy a Little King John.

—No lo sé… Nunca los he visto — Respondió con una voz seca y cortante.

—¿Hay algo que no estemos enterados, John? —Preguntó Old Froggy.

—No… He vivido aquí desde siempre… Supongo… He visto todo tipo de criaturas en esta tierra, pero la mayoría están muertas o sorpresivamente lograron adaptarse a las aguas, pero una criatura como esas, no—.

—Sé que tienes algunos problemas con el tema de la memoria, ¡Pero vamos! no te están buscando por nada— Respondió Ratboy Genius, intentando no ser tan descuidado en sus palabras pero insistiendo en que al menos debe recordar algo relacionado a ellos. —Tal vez antes, antes de los límites de tu memoria actual hiciste algo o de alguna forma te involucraste con ellos—.

Little King John miró a Ratboy Genius con el ceño fruncido, sus ojos mostraban enojo al sentirse ofendido. Si, cometió un error cuando era mas joven, pero no por ello, cada cosa negativa que pase es culpa de él.

—Espera, ¿tienes problemas de memoria? O ¿A que se refiere?— Preguntó Sneezy preocupado y sorprendido.

Little King John al ver que Sneezy estaba preocupado por él, se puso las manos en la cara con frustración, más problemas se le venían encima y ahora tendría que explicarle a Sneezy que al parecer algo en su cabeza no estaba tan normal del todo como creía; ¡Pero no era momento de eso!

Se talló la cara mientras estaba quejándose entre dientes —Escucha, querido Sneezy, no es momento de explicar esas cosas ahora —Bajó sus manos y respiró un poco para guardar la calma—Solo diré rápidamente que mis recuerdos son anormalmente poco antiguos a los que en teoría deberían ser, eso es todo.

Eso había hecho en Sneezy más preguntas que respuestas, pero antes de que pudiera reclamar más información, justo cuando abrió la boca para decir algo, John se lo impidió poniéndole el dedo encima de sus labios.

—¿Y ahora? ¿Alguno de ustedes tiene un plan en mente? —Preguntó Little King John.

Ratboy Genius y Old Froggy negaron con la cabeza al mismo tiempo.

Little King John se frustró, quería gritar para desahogar su furia, pero si no quería que los descubrieran así que solo tendría que guardarlo por ahora. De forma literal y metafórica se tuvo que tragar su furia.

Sneezy pensó con detenimiento, de repente sus ojos se iluminaron y una gran sonrisa se formó en su rostro.

—¡Ya sé cómo podemos sacarlos de aquí!—Expresó Sneezy con un poco de voz alta. De inmediato Old Froggy y Ratboy Genius hicieron “Shhh” para que bajara la voz.

Little King John vio a Sneezy con una mirada brillosa llena de esperanza —¿En serio?—.

—Si… No es mucho, pero creo …CREO… Que Caveman nos puede ayudar en algo… Después de todo, él nos mencionó que el primer Galactic Super Hero, debe tener experiencia en el enfrentamiento de enemigos, puede ayudarnos aunque esté algo oxidado en ese aspecto—.

A Ratboy Genius y Old Froggy se les vió bastante consternados. Old Froggy al enterarse de que el tipo que le dio la flauta

Little King John alzó una ceja —¿Tú crees que eso no ayude?—.

—Bueno, si logré al menos imponerme ante ese tal… EnderYoung cuando él te tenía en sus manos, tal vez con Caveman podamos algo hacer más … No tenemos muchas opciones realmente —.

Little King John pensó detenidamente. Era cierto, realmente no había mucho que hacer si quería seguir vivo y al mismo tiempo mantener a su gente a salvo.

—Estás seguro que podrán hacer algo? —.

—Si… Tal vez… Ambos fuimos galatic super heroes, en el espacio hay muchas compleciones y grandes adversarios, aunque no lo creas, además puedo romper obsidiana solo con un golpe; mientras que Caveman si bien ya tiene siglos retirado y está algo oxidado, seguramente tiene mucho que ofrecer—.

—Bien.. Creo que ya con eso tenemos algo… Ahora solo hay que pensar en un plan—.

No había muchas opciones funcionales, loa cuatro dieron planes que fueron descartados uno a uno, por lo menos hasta que Little King John se hartó y por así decirlo olvidó que EnderYouing casi lo mata.

—¡Ay ya! ¡Estoy harto! escuchen, si ellos me quieren a mí entonces lo haré es que yo mismo entraré al palacio, tomar un vagón e irme bajo tierra hasta donde él está, mientras que ustedes quédense aquí, donde están a salvo y Sneezy, tú los cuidarás mientras yo me encargo— Gritó con los dedos de los manos doblados de tal forma que parecía garras, con las orejas hacia abajo y un poco histérico.

Sneezy se alertó al verlo así, pero más por lo que dijo— ¡John, no seas tonto! ¡estarás desprotegido!, si alguna de esas cosas te ve ellos- — Exclamó Sneezy, pero fue callado por Little King John.

—¡Entonces que sea como deba de ser!…— Exclamó Little King John, igual de exaltado pero con más conciencia de lo que estaba diciendo que la vez anterior.

—¿Qué? — Preguntaron incrédulos Old Froggie y Ratboy genius.

Sneezy solo lo miró sin entender porque estaba con esa idea en la cabeza, lo miró con angustia, algo andaba mal… Muy mal.

Little King John suspiró con pesadez, bajó la cabeza y cuando estaba más calmado, volvió hablar con la voz pesada y llena de vergüenza. —Ya he traicionado a las vidas que estuvieron en mis manos una vez por salvar a la mía… —Se colocó las manos en forma de puño en el pecho—No lo haré de nuevo…— Pero cuando se dio cuenta de lo que acaba de revelar, hizo una expresión de dolor, cerrando los dientes y uno de sus ojos con fuerza mientras había un sonido con la boca del mismo dolor interno mismo.

—¿De qué estás hablando, John? — Preguntó Sneezy, inquietado por la expresión de Little King John.

—Oh no… Esto no es bueno— Expresó Old Froggy con angustia.

El lugar se volvió en completo silencio, los tres se miraban unos a otros. Solo se escuchaba de fondo a las criaturas de siete metros y sus gritos desgarradores y horrendos. La rata amarilla y el extraterrestre se miraban con confusión, sin entender de que estaba hablando Little King John o a lo que se refería Old Froggie.

Little King John habló aún con la cabeza baja de vergüenza, apenas pudo formular con lo que dijo a continuación— Cuándo comenzó todo, solo tenía 15 años de edad, pero eso no me justificó ser el tirano berrinchudo que fui…— Se dirigió a Ratboy—De hecho, así como me conociste solo fue para peor con el tiempo … Y mi gente estaba cansada. —Little King John volvió a bajar la cabeza—Antes de la inundación, hubo una serie de acontecimientos que hizo a mi pueblo levantarse contra mí con el propósito de acabar con mi mandato… Así que bajo al liderazgo de… A la que puedo llamar mi consejera… A la cuál despedí por ser una molestia para mis deseos y ordenes, junto a toda mi gente exigieron mi abdicación en forma de una revolución—.

Todos seguían en silencio, con una mirada de preocupación e incredulidad por parte de dos individuos.

Ratboy Genius en el tiempo que estuvo en el reino de Little King John conoció a su gente un poco y por lo que pudo ver su gente era amable y pacífica, de solo imaginar a esa gente furiosa con rey ya era demasiado.

 Old Froggie no se mostró sorprendido, conocía esta desgarradora historia, pero su neutralidad natural ante casi todo no le hizo decir nada, solo dejó su mirada al suelo y apegó lo más que pudo su cola a su cuerpo.

Sneezy era el más preocupado, por sus propias acciones sabía que guardar sucesos del pasado a un amigo nunca era una buena señal. Él lo hizo con su identidad y pasado ¿Es acaso que este juego de secretos ha sido parte de ellos desde el principio?

—¿Cómo fue eso? — Preguntó Ratboy Genius.

—Como cualquier otra revolución, gente enfurecida con cualquier cosa puntiaguda en la mano, manifestaciones, desastre en las calles, destrucción de cualquier cosa que tenga mi rostro y guardias intentando mantener un poco de orden para mi propio bienestar—.

—… ¿Qué sucedió con ellos?... Cuando te encontré estabas solo— Preguntó Sneezy, con los ojos bien abiertos y fijos a Little King John reflejando inquietud ante todo ese relato.

Little King John sabía que su situación Sneezy se complicaría de nuevo, estaba temeroso de esto, habría muchas cosas que explicarle después. Ambos prometieron no más secretos, lo prometieron mientras se miraban a los ojos y dándose un gran abrazo que sellaba todo.

 Secretos del pasado, acciones de decisiones que no fueron correctas. No solo se dejó ver que se rompió una promesa y que Sneezy lo desconocía más de lo que creía, si no que también era alguien mas complicado de lo que creyó en un principio y posiblemente… Le tome desprecio por su terrible decisión.

Little King John tomó aire, lo retuvo por unos segundos y lo sacó por boca lentamente. Apenas pudo razonar y ordenar las palabras que debía decir. Levantó su rostro, por fin dio la cara y miró dirigiéndose a Sneezy sobretodo, mientras a través de su mirada pedía perdón.

***

La tormenta era fuerte, la temperatura era baja y la lluvia era furiosa y cruel, mientras llenaba edificios e incluso montañas enteras de sus aguas.

Un Little King John más joven se encontraba dentro de su palacio, estaba acabando de escribir sus últimas notas de su diario, notas tristes y melancólicas. Cuando terminó dejó la pluma encima del cuaderno, volteó a ver una ventana que mostraba como su palacio estaba bajo metros de agua; miró con angustia por la ventana a su reino, o bueno, de lo que quedaba, no solo en términos que se refiere a la inundación si no en términos de su anterior gloria y estabilidad social. Monumentos dedicados a él y a la corona destruidos, armas reales y caseras tiradas en la profundidad del agua, rejas del palacio que casi fueron desmanteladas y restos de carteles con escritos de la gente pidiendo su renuncia.

Vestía con ropas menos ostentosas de las que portaba últimamente para ese entonces. Solo llevaba una camiseta blanca, con un chaleco formal de color morado, más unos shorts verdes; por consejo de los ministros que le quedaban, vestía así mientras la revolución estaba vigente para no empeorar el enojo de las masas. Era tan horrible la situación que accedió dejar su ropa real de la mejor calidad para que al menos eso no siguiera enfureciendo al pueblo.

Cuando escuchó el llamado de rana de Old Froggy, supo que era el momento. Tomó una mochila y varias bolsas que terminó guardando ahí, en ellas estaban los objetos que podía rescatar para ese entonces, antes de que su palacio fuera totalmente consumido por las aguas. Metió su diario en una bolsa más, la cual amarró con más cuidado para evitar a cualquier costo que se mojara; hizo el mismo procedimiento con una capucha morada que utilizaría afuera mientras está debajo de la tormenta.

En la mochila había varias cosas, pero las que nos conciernen en este momento era una pequeña caja con el broche de rubí rojo que ahora está ahora en su pañuelo, una medalla de oro con su escudo real, una reina de pieza de ajedrez y un hermoso pedazo de tela color rosa pastel suave al tacto. Little King John no sabía el porque necesitó guardar los dos últimos, pero se sentía fatal con la idea de quedar sin aquella reina y trapo.

Con su diario ya a salvo y con las cosas que más necesita (o por lo menos las que pudo salvar), salió de su palacio que ya estaba más de la mitad de su altura consumido por las aguas. Con la ayuda de Old Froggy, este le ayudó a tomar un recorrido desde debajo del agua hasta su yate real. Aquel yate lo usaba en sus vacaciones de verano, pero ahora era su salvación.

Empapado subió a este, abrió su mochila y de ella sacó la bolsa que contenía su capucha, la cuál se la colocó sobre la cabeza para que después esta cubriera su cuerpo de la cruel lluvia. Little King John volteó a ver con profundo dolor como su más preciada posesión y amado hogar estaba siendo consumido por las aguas. Él sintió esa perdida más que solo del lado material, pues pese tener todo lo que cubría sus necesidades e incluso algunas comodidades dentro de su yate, Little King John sintió como si hubiera perdido lo último que tenía. No desde el lado material en donde todos sus objetos de alto valor y la grandeza económica de la propiedad, si no desde el lado más personal, cálido y ahora, nostálgico.

—¿Tienes todo contigo? — Preguntó Old Froggy con una voz seria, pero con una clara intención de referirse que Little King John estaba dejando algo muy importante atrás.

Little King John no respondió nada por un momento, solo dejó un silencio que era igual que frio que la atmosfera del clima.

—No… No he olvidado nada—.

—Estarás solo, puede que incluso para siempre— Respondió Old Froggy.

—Esto será temporal… Estoy casi seguro y si no es así, yo mismo reconstruiré todo desde cero—.

—No hay reino sin rey y no hay rey si no hay súbitos a los cuales gobernar, John— Respondió fríamente Old Froggy. —Queda a tu conciencia lo que sea que decidas hacer, Little King John—.

Little King John asintió lentamente con la cabeza —Gracias por traerme hasta aquí… Espero verte pronto—.

Old Froggy no se atrevió a contestar, solo le dio una última mirada que trataba ser neutra, pero con una clara aura de decepción; después de eso, volvió al agua y desapareció entre sus profundidades.

Little King John sacudió la cabeza erráticamente de un lado a otro, se metió al yate y cerró la compuerta de entrada al jalar de una palanca para sellarla; subió rápidamente al centro de control de vehículo, tomó el volante y comenzó a conducirlo sin saber exactamente a donde ir ahora. Pero mientras atravesaban los pensamientos de que sería de él, una flecha golpeó una parte de la cabina, esto llamó la atención de Little King John, tomó unos binoculares y salió de la cabina al área libre del yate para ver hacia la dirección de donde vio la flecha.

Sobre una montaña, que apenas estaba a la mitad de ser consumida, estaban sus súbitos o bueno, los que lograron ponerse a salvó ahí. La que portaba el arco que lanzó la flecha era la líder de la revolución, Robesnin, una gata peli negra con un lunar blanco en la barbilla.

Ella lo veía fijamente y él a ella. Little King John logró ver su rostro de desesperación y pánico, se alcanzó a ver qué estaba gritando con todas sus fuerzas mientras el agua de la lluvia se deslizaba por su pelaje. Sabía que ella le estaba pidiendo ayuda, le estaba pidiendo piedad por su gente y estaba gritando que no quería terminar así.

Little King John miró con gran shock aquel escenario; su enemiga de feroz carácter con un gran espíritu de la valentía y la independencia ahora suplicaba piedad para ella y sus compatriotas. Little King John, siendo en ese entonces un adolescente atrapado en su propia visión de la realidad, no miró lo que verdaderamente rodeaba todo el asunto del levantamiento y solo miraba en ella una loca lava cerebros que junto a otros traicioneros estaban desquitando su rencor por ser despedidos; definitivamente no dejaría que su verdugo y sus simpatizantes entraran con él , y cuando se refiere a simpatizantes es todo el pueblo que apoyó la revolución.

Así que le dio una última mirada con la que decía al asunto ‘jaque mate’, se volteó fríamente y caminó hacia la cabina, con la certeza de que su enemiga estaba gritando por su misericordia desde dónde estaba parada.

Tomó el timón de su yate y siguió manejando a lo desconocido… Después bajó a la planta de su yate para escribir en su diario con la confianza y seguridad de que podría salir adelante después de esto. Él era Little King John después de todo.

Pasaron semanas y la culpa comenzó a pesarle cada vez más en la espalda, dejó de cuidar su aspecto físico como antes, tenía horribles episodios de insomnio, a veces incluso deliraba con ver con el rabillo del ojo como Robesnin lo observaba desde las esquinas más oscuras de su yate, aún con sus ropas mojadas y su rostro lleno de cólera.

 Su llama de esperanza y sus ojos se apagaban poco a poco al ritmo de como luego los fuertes vientos de las tormentas rompían su ropa. Estar solo por tanto tiempo en un vehículo tan grande, con la conciencia que poco a poco le atormentaba le hizo ver lo pequeño y solo que era, que su corona no valía nada sin gente que la reconociera y sobre todo darse cuenta de que un miedo que desconocía… El miedo a la soledad.

El mismo miedo que su yo de 11 años sintió cuando se colocó por primera vez su corona y paseó por los enormes y solitarios pasillos del palacio, pero ahora ese miedo multiplicado diez veces.

Habría caído en la depresión, en la locura o en algo peor, de no ser por un día en el cual solo había un radiante sol en lugar de una tempestad, al subir a la cabina de nuevo para ver si había señales de tierra firme … Logró localizar a un náufrago que estaba parado en un pequeño pedazo de tierra y con sus auriculares, pudo ver qué era una criatura verde. El destino le extendió la mano y por fin le dio una nueva oportunidad de hacer las cosas correctamente.

***

Cuando terminó su anécdota estaba esperando cualquier reacción negativa, sabia que el espíritu positivo de Ratboy Genius iba a cambiar a partir de que ahora sabe que no solo secuestró a su novia y que hizo un acto aún peor e injustificable; mientas que con Sneezy sabía que este ya no solo tendría que darle explicaciones por haber roto su promesa, si no que también por haber hecho un acto tan atroz.

El momento fue incómodo, Ratboy Genius no quitaba su expresión de impacto, sus ojos estaban abiertos y con una angustia latente; Old Froggy solo tenía una mirada neutral y sin ninguna emoción realmente; y Sneezy era el que menos tenía idea de que hacer o decir en ese momento, su expresión era de preocupación, impacto, un enojo que demanda explicaciones y claramente mucha angustia también.

—Asi que… ¿En teoría, cuando te

encontré no debiste estar solo?— Contestó Sneezy.
—… No… Nunca debí estar solo, pero como les dije, me tardé en darme cuenta del error que cometí— Respondió Little King John, sus orejas estaban decaídas.

—¿Qué fue lo que sucedió con ellos? —Preguntó Ratboy Genius, en busca de algo que lo tranquilizara de alguna manera.

—Te lo dejo a tu imaginación— Contesto Little King John.

Eso dejaba todo en un horrible e incómodo silencio, cada quién en su mente logró llegar a la misma conclusión y todos, pero sobre todo Sneezy miraban en otra a escala a John. El agonizante y triste silencio fue interrumpido al sonar la voz de EnderYoung fuera de las paredes de la casa.

—¡Amigos, amigos! ¡El receso terminó! —Se escuchaba la voz muy animada y emocionada mientras que por fuera este se encontraba saltando emocionado y entusiasmado. —Es momento de ponernos a trabajar, así que ¡Comencemos con la cacería de ratas! ¡Traerlo de preferencia vivo para que así nuestra querida señora dragona pueda mordisquearlo como le plazca! —.
Se escucharon gritos y lo que parecían ser risas desgarradoras y distorsionadas. Los cuatro retrocedieron más a la parte atrás de la mesa.

Little King John sabía que era momento de actuar y al menos redimirse, no podrá deshacer lo que les hizo a todos y mucho menos traerlos de regreso, pero al menos enmendaría su error al no repetirlo y de ser necesario, sacrificarse por las vidas que tiene ahora  en sus manos.

Little King John estiró su cabeza fuera del mantel para asomarse fuera de la ventana de forma sigilosa para ver si algún enderman estaba afuera. Por suerte no había ninguno, así que regresó su cuello a su estado original.

—Bien, es momento de poner manos a la obra — Dijo seriamente.
Todos se expresaron con un “¡¿Eh?!” cuando Little King John dijo eso, pero cuando estaba a punto de salir, entendieron  lo que estaba a punto de hacer.

Little King John fue detenido por un jalón en el brazo qué le impidió salir.

—No irás a una misión suicida —Dijo Sneezy con una mirada fría y determinada, mientras sostenía con su cola el brazo de Little King John con firmeza.

—Tengo que hacerlo por el bien de todos— Contestó Little King John con una voz firme y decidida. —De todas maneras si salgo vivo o no, dará el mismo resultado —.

—¡No! ¡Te quiero vivo aquí y ahora!—Respondió Sneezy con fuerza y decisión —Incluso si tu plan es lo único que nos queda, no te dejaré ir así— En sus fuerza y tono de voz había resistencia y firmeza, pero en sus ojos solo se veía el reflejo de la súplica y la agonía de la preocupación.

— Créeme que a mí tampoco me emociona la idea de morir de lo que parece ser una forma brutal y grotesca por esa cosa, Sneezy, pero-—.

—¡Pero nada! Te he visto crecer como persona, te he acompañado en todas tus locuras y he podido ver en lo que te has convertido actualmente ¡Como para que vayas y acabes con eso de un momento a otro!—.

Sneezy lo sostenía con fuerza con la cola, lo miraba con desesperación, sus pupilas temblaban y sus ojos estaban húmedos y el terror se asomaba por toda su cara.
Little King John justo cuando estaba a punto de acceder, otro grito desgarrador se escuchó no muy lejos de ellos,  lo que le hizo tomar determinación y retroceder en cualquier opción que lo mantenga a salvo.

Así que jaló su brazo bruscamente del agarre, se levantó y se retiró tan pronto como le fue posible del lugar en el que estaban escondidos, a pesar de las suplicas de Sneezy y la insistencia de Ratboy Genius y Old Froggy de detenerse. 

Cuando salió, cerró la puerta con la mayor cautela posible, miró de lado a lado con los nervios de punta, los ojos bien abiertos y con las manos mojadas de sudor. Pensó y pensó mucho que hacer a continuación para pasar desapercibido ante las horribles criaturas. Analizó fríamente sus opciones porque sí, estaba dispuesto a sacrificarse de ser necesario, pero trataría de no llegar a ese punto.

En su análisis, se dio cuenta que las criaturas solo atacaron cuando Ratboy Genius no resistió la tentación y miró a uno a los ojos y desde ahí se desencadenó un desastroso efecto dominó, pero todo tuvo como acción desencadenante mirar a esas criaturas a los ojos, como maliciosamente EnderYoung alentó hacer.

No se le ocurrió mejor cosa que ponerse una cubeta en la cabeza que estaba tirada, se sentía humillado, pero es que tampoco tenía muchas después de todo y si bien no tenía con que cubrir el resto de su cuerpo, dejó que las cosas siguieran y dejando al aire su suerte.

Caminó lo más cuidadoso posible  por las calles, guiando su orientación al suelo y dejando ver algunos detalles de las calles y el panorama. Cuando no estaba muy lejos del palacio, choca con algo, y desde el suelo ve lo que parece ser las piernas de la horrenda criatura de color negro. 
Traga saliva y se queda lo más quieto posible al escuchar como la criatura hizo algunos sonidos de alerta.
Por fuera, el Enderman miraba de un lado a otro, luego bajó la mirada a la cosa que chocó con su perna. Pero no lo tomó como amenaza al creer que era solo un mundano objeto que chocó con él gracias al caos, no podía detectarlo como una amenaza si no era una criatura que lo mirace a los ojos o lo atacase con la suficiente fuerza. Así que solo le ruje en muestra de su irritación y molestia, luego se fué.

Little King John escucha ese horrible rugido y como se va con lo que parece ser, refunfuños y cuando queda completamente solo, se aguanta las ganas de pegar un grito de pánico, respirando profundamente e inflando su pecho para tratar de apaciguar este grito.

Llegó al palacio con los hombros levantados y el cuello encogido hasta el punto de casi no tener esa parte del cuerpo. La puerta estaba en frente de él finalmente, parece que nadie había irrumpido al edificio, pero sabiendo que esas cosas se teletransportaban no le daba la tranquilidad que busca. Entró con cautela, se quitó la cubeta de la cabeza y al parecer todo estaba en orden, a comparación del desastre que había afuera.

Miró todo a su alrededor con una expresión agobiante, aún tenía el pecho reteniendo su desesperación y con un dolor horriblemente molesto en el estómago.

Antes de hacer cualquier cosa, su voluntad se nubló y dejando detrás cualquier medida de preservar a su integridad corrió por todo el palacio y subió unas escaleras a su habitación. Abrió la puerta, la cerró de golpe con seguro como si de ser que un Enderman le estuviera acechando le pudiera servir de algo.Y ya por fin, rodeado de su espacio seguro y con toda la desesperación, miedo e impotencia contenidos… Deja su rostro caer en la orilla de su cama, para llorar y gritar de impotencia.

Él solo quería seguir con sus planes de coronación todo su reino que tanto tardó en construir se desmoronaba ante sus ojos, sus trapos mugrientos que jamás debían ser mostrados ahora se asomaban ante la promesa fracturada con su amado mejor amigo, su integridad y la de los ciudadanos de los cuales ganó su confianza y amor estaba en peligro.

Nunca entendió la frase de estar entre la espada y la pared hasta ahora.

Su corazón dolía en su pecho y su estómago dolía más.
Quería pedir ayuda, pero no había fuerza milagrosa que realmente lo pudiera auxiliar en ese momento.

Sus lágrimas de impotencia mojaron las sábanas de su cama como las lluvias a las que se enfrentó y sus gritos ahogados en la cama desgarraban su alma.

En un acto errático y como otra forma de sacar todo lo que llevaba adentro, se levanta y da golpes a uno de sus muebles. Los golpes no ejercían mucha fuerza en un inicio pero poco se intensifican hasta que pega un sollozo acompañado de un golpe, esa muestra de dolor fue tan intenso que opacó el sonido de las cosas que cayeron al suelo.

Pero para su calma encontrar eso era lo que a su alma se le debía de dar… Al menos su pecho ya no apretaba tanto y su dolor de estómago se apaciguó. Pegó su frente sobre el mueble resignando y respirando hondo para poder pensar más claramente en lo que tenía que proceder hacer, después de todo, al menos había logrado llegar en una sola pieza a su habitación a pesar de las circunstancias.

Lo primero que tenía en mente hacer era levantar lo que su berrinche había tirado del mueble, así que eso mismo se dispuso hacer; sin embargo cuando vio lo que tiró, se detuvo de hacer cualquier movimiento.

En el piso estaban tirados lo era su medalla con su escudo real, la bonita reina de ajedrez decorada de diamantes y el suave pedazo de tela, entre otras cosas que no le importaban en ese momento; las tomó con cuidado y se acostó en su cama para contemplarlas mientras también acariciaba el rubí que tenía su pañuelo. Volvió a sentir ese vacío en su corazón cuando trataba de recordar porque esas cosas le reconfortaban tanto, no sabía de donde las había obtenido al igual que todo de él y cuando trataba de hacerlo, un agudo dolor en su cabeza se presentaba. 

La medalla de oro brillaba al reflejo del sol mientras orgullosamente mostraba su símbolo real le daba la sensación de que algo marcó en su vida, su reina negra de ajedrez con preciosos diamantes incrustados le daba la sensación de que le compartió momentos de diversión y aprendizaje, el pedazo de tela era algo que le daba confort y consuelo al tacto; por último su rubí le transmitía calor y la promesa de que el brillo volvería a su vida.
Si bien, tenía que ver porque no podía desbloquear más allá de lo que le daban esas cosas, al menos le transmitían lo suficiente para levantarse nuevamente… Como lo hicieron en su momento más deficiente.

No era momento de rendirse, ya había llegado demasiado lejos y sobre todo había gente que lo quería y necesitaba y él tenía gente por la cual luchar y salir adelante. Sobre todo por su amigo que a pesar de todo, como él mismo le había dicho… Ya había visto mucho de él como para dejar ir todo lo que han construido juntos hasta ahora.  

Se levantó determinado a seguir con su plan. Guardó su pieza de ajedrez y su medalla en sus bolsillos secretos, tomó el suave pedazo de tela rosa y lo amarró alrededor de su brazo izquierdo y se acomodó de mejor forma su pañuelo con el rubí; preparó una mochila con suministros que tenía en su habitación por si otra inundación se asomaba y con algo de ropa a lo que procedió a pararse frente de la puerta de su habitación… Dispuesto a ser el gran rey que debe ganarse el derecho de serlo una vez más.

Continuará…