Chapter Text
―¡¿Quién carajos es Juenin Kai?!
Beomgyu miró con desconcierto la última inscripción del formulario:
Nombre: Huening Kai | Clase: 1b | Participación: canto - pista "Sk8er Boi" de Avril Lavigne.
Acababa de ser vilmente robado y saboteado.
...
La escuela en la que Beomgyu estudiaba llevaría a cabo un concurso de talentos en las próximas semanas.
Esta idea emocionó mucho a los estudiantes, quienes estaban ansiosos de demostrar sus variados talentos. Beomgyu y sus dos amigos, Taehyun y Soobin, no eran la excepción, puesto que el evento sería la oportunidad perfecta para exhibir lo increíble que era Thursday's Child, la banda de rock que los tres habían formado. Además, no sólo mostrarían lo habilidosos que eran, sino que tendrían la oportunidad de obtener el premio monetario que estaba destinado al primer lugar del concurso.
Dada la importancia del acontecimiento, los miembros de Thursday's Child acordaron que la ocasión ameritaba sacar sus mejores armas, lo cual se traducía como interpretar su número estrella: "Sk8er Boi" de Avril Lavigne. Dicho cover los había hecho merecedores de premios y reconocimiento en anteriores concursos y presentaciones, por lo que tenían total confianza en que esa canción les otorgaría el galardón de nuevo.
Una vez que la decisión fue tomada, Beomgyu no esperó ni un segundo más para inscribir a su banda al concurso. Estaba ilusionado, pensando en que por fin podrían darle mantenimiento a la vieja batería de Soobin y hacer confeccionar chaquetas a juego con el logo de la banda con el dinero del premio.
Al menos, eso era lo que tenía planeado hasta que observó cómo cierto desgraciado, ratero, usurpador y ladrón había tenido la audacia de escoger justo esa canción. Su canción.
―¿Así que nos la ganaron? Quién lo diría ―comentó Taehyun bostezando y levantándose con pereza del sofá.
―Tendremos que escoger alguna otra canción de nuestro repertorio... ¡Ay! ―agregó Soobin, antes de ser interrumpido por el peso de Taehyun sobre su espalda.
―¡¿Y?! ¿Eso es todo? ―cuestionó Beomgyu, quien no podía creer la indiferencia con la que estaban tomando el asunto―. ¿No vamos a pelear?
―¿Pelear con quién?
―¡Con el tal Juenin Kai por robarnos Sk8er Boi!
―Tal vez si nosotros hubiéramos escogido la canción antes, pero él se inscribió primero, ¿o no?
―¡Sí, pero podemos exigirle que escoja otra!
―Beomgyu, no hagas berrinche...
―¡Sí, pero es nuestra canción!
―Escogemos otra canción y asunto solucionado.
―¡Pero-!
―Suficientes "peros". Soy el líder y se hace lo que yo digo.
Los dos menores se quedaron en silencio después de escuchar la severidad de esas palabras. Soobin pocas veces sacaba la carta de tener el liderazgo para imponer dictámenes sobre la banda. Solo lo hacía en situaciones como esa, en las que alguno de los otros dos colmaban su paciencia o estaban a punto de discutir por la ausencia de unanimidad en sus decisiones.
El aludido lo miró con desdén y se fue por su parte a un lado de la sala. Notó que Taehyun estaba hablando con Soobin, probablemente haciendo que se tranquilizara luego de explotar por la terquedad de Beomgyu.
Luego de un rato, notó que Soobin estaba de mejor humor, por lo que estaba dispuesto a contraargumentar, pero cuando vio que el líder se había puesto a coquetear con Taehyun aprovechando la excusa de que necesitaban nuevas opciones para interpretar en el festival, supo que no tenía oportunidad. Podía lidiar con un Soobin malhumorado, pero no interrumpir una escenita del par de tórtolos.
Resignado, también comenzó a buscar alguna otra canción que pudieran presentar. Viendo lo desagradablemente melosos que eran sus compañeros el uno con el otro, decidió que la canción sería una que no tuviese nada que ver con el amor. Si al menos no le cumplían ese capricho, dejaría a Thursday's Child sin guitarrista sin pena alguna.
Tal vez ni siquiera debía esperar a que rechazaran la canción que quería. Tal vez debería irse de una vez para que lo valoraran como el fundamental miembro de la banda que era...
Se regañó a sí mismo por pensar tonterías. Todo ese desastre era culpa de Junin Kai.
No conocía quién era, pero ya lo consideraba su enemigo. Y como el enemigo que era, eso no se quedaría así.
┊🩰🛹🎸┊
El día del concurso llegó y Beomgyu todavía no había tenido el disgusto de conocer a Juenin Kai.
Creyó que Taehyun lo conocería al ser ambos de primer año, pero estaban en clases distintas, por lo que no. Preguntó a algunos conocidos suyos por el chico apellidado "Junin, Juenin, algo así", pero tampoco tenían idea. Parecía que era un fantasma o bot que alguien había creado solo para sabotear e impedir que la banda presentara su número estrella.
Aunque así lo deseara, para desgracia suya el tal Kai sí existía y era un estudiante de la escuela. Lamentaba no haberlo encontrado antes para reclamarle por ser un ratero y exigirle que se retirara del concurso o al menos cambiara de pista. Soobin y Taehyun seguían insistiendo en que solo era berrinche suyo, pero no. Era cuestión de orgullo y dignidad.
Él estaba dispuesto a defender su posición como intérprete predilecto de Sk8er Boi y de su amada Avril Lavigne.
Aunque, debía admitir que muy en el fondo le causaba intriga el tal Kai. ¿Qué tal si estaba juzgando sin motivo aparente y el chico ese resultaba ser bueno? ¿Y sí era el mismísimo punk de la canción? ¿Y si era el hijo no reconocido de Avril Lavigne y, por lo tanto, el verdadero predilecto? Como decía una de sus canciones favoritas, bien podría ser un Loser o un Lover.
Mientras pensaba en que estaba a un par de horas de descubrirlo, llegó al camerino que la escuela había designado para los chicos inscritos al concurso. Cuando ingresó, notó que estaba casi vacío puesto que todavía faltaba un par de horas para que el evento comenzara. Se aplaudió por su idea de llegar antes y así alistarse con tranquilidad teniendo todo el espacio para él solo.
Dio un vistazo y la única alma ahí presente era el de un chico hecho bola en uno de los sillones de la habitación. Tenía puesta una capucha que cubría casi la totalidad de su rostro a excepción de su nariz. Estaba concentrado jugando quién sabe qué en su celular. Al verlo así, Beomgyu ignoró saludarlo porque de todos modos no estaba prestándole atención a pesar de que acababa de entrar.
Pasó de largo y se dirigió a uno de los tocadores para comenzar a arreglar su cabello negro y largo, así como a maquillarse un poco. Justo cuando había terminado y guardaba sus pertenencias, otro muchacho ingresó a los camerinos. Al cruzar miradas, hicieron una reverencia por mera educación. Beomgyu estaba dispuesto a retirarse tras haber acabado con lo suyo; sin embargo, algo lo detuvo.
―¡Huening Kai!
―Oh. ¿Yeonjun?
¿Qué? ¿Cómo que Kai? ¿El jorobado con capucha de antes era el famoso Junin Kai?
La extraña pronunciación de su apellido lo hizo dudar sobre si el sujeto era o no su objetivo, así que pretendió seguir retocándose el maquillaje para escuchar un poco más.
―¿Ya estás listo? ―le preguntó el chico que recién había ingresado.
―Eh... sí.
―Entonces, ¿a dónde?
―"¿A dónde?"
―¿A dónde tan mal vestido?
Beomgyu no pudo evitar soltar una risa ante el comentario, ganándose una fugaz mirada de molestia de parte de ambos sujetos por la indiscreción que no pudo camuflar.
―¡Pero si es mi mejor sudadera!―reclamó el chico de capucha, haciendo un puchero. Beomgyu por fin fue capaz de escuchar su voz con claridad. Volvió a reír por lo infantil que sonaba, ganándose otra mirada por parte de los otros.
―Lo siento, no quise decir que te vistes feo. Tu sudadera es muy linda ―aclaró el otro, aparentemente ablandado por el lloriqueo de Kai―. Es solo que hoy es la presentación y deberías estar más acorde a la ocasión. ¿No deberías estar vestido como un punk de los 2000? ¿Con tu gorra y skater incluidos? ¿O al menos un look más rockero?
"Bingo. Es mi Kai". Su némesis, quería decir.
―Mhmmm...
―Agh... Mira tu cabello. Quedó todo aplastado por la capucha.
Beomgyu, quien estaba presenciando todo "disimuladamente" a través del espejo en el que estaba "maquillándose", confirmó la declaración del tal Yeonjun. Como Kai estaba de espalda, no podía ver su rostro, pero sí el nido de pájaros que era su cabello rubio. Otra risa, seguida de otra mirada de enfado por parte de Yeonjun.
―Mi cabello es difícil de moldear. ¿No es mejor cubrirlo y ya?
―Nada de eso, Huening. Tu cabello es muy bonito y si lo arreglamos quedará muy bien. Además... ―Yeonjun escaneó de arriba a abajo a Kai, analizando por un momento―. Tus jeans me gustan. Te quedan bien y resaltan tu trasero, ¿pero qué opinas de cambiar tu sudadera por una camiseta manga cero?
―No traje más ropa.
―Pero yo sí ―declaró con una sonrisa―. ¿Crees que no te conozco?
―Yeonjun...
―Kai... Confía en mí, ¿sí? Eres un chico muy hermoso, tienes un cuerpo muy bonito y, sobretodo, eres muy talentoso. Ya hablamos de eso, ¿no es así? ¿Qué tal si presumes de todo ello al menos alguna vez?
―Está bien...
―¡Perfecto! Mira, tengo estas dos. Una es negra y la otra celeste bebé. Creo que esta te quedaría muy bien.
―Mmm ―Kai miró la opción dubitativo―. No creo que sea buena idea...
―¡Tonterías! A ver, alza los brazos... ―Sin esperar respuesta por parte de Kai, Yeonjun le sacó la sudadera, dejando la parte superior de su cuerpo expuesto mientras seguía con los brazos extendidos―. Oh...
―¿Qué?
―¿No te depilaste las axilas?
―¿No? ¿Por qué lo haría?
―Mmm sí, supongo que un poco de vello no le hace daño a nadie.
Con eso, Beomgyu soltó la enésima risa del día. Una más y probablemente Yeonjun lo echaría a patadas por entrometido.
Antes de que eso sucediera, decidió irse, mucho más calmado y confiado que nunca.
El tal Kai no era más que un perdedor cualquiera que al parecer ni siquiera tenía confianza en sí mismo. Por un momento había temido que realmente fuera su competencia, pero luego de observarlo, comprendió que no tenía nada que temer. En ese caso, no había necesidad alguna de confrontarlo. Todavía le tenía rabia por no haberse quedado con la canción que quería, pero con demostrarle que era mejor que él, sería suficiente.
┊🩰🛹🎸┊
Si acaso había alguien en esa escuela que no conociera a Thurday's Child, era imposible que se mantuviera del mismo modo luego de la gran presentación que habían hecho de "In my Blood", un cover de Shawn Mendez.
No por nada Beomgyu se sentía orgulloso del equipo que tenía. Por un lado, tenían a Taehyun, el vocalista principal con una de las voces más increíbles que había escuchado: dulce, potente y muy versátil. Por el otro, estaba Soobin, el líder y baterista de la banda. A pesar de que era el más sereno de todos, sabía hacer muy bien su trabajo y, además, también poseía habilidad vocal, sobre todo en falsete. Finalmente, él mismo, quien desempeñaba el rol de guitarrista. Si bien su voz grave no tenía nada que envidiarle a las de sus compañeros, su pasión recaía en tocar su amada guitarra y componer. Para él era todo un placer interpretar para Taehyun y Soobin.
Así, su banda no solo presumía de talento, sino también de equilibrio y estabilidad. Todas esas cualidades se reflejaron en el escenario, recibiendo así un fuerte voto de aplausos por parte del público y reacciones muy satisfactorias del jurado. Estaba totalmente convencido de que podrían ganar ese premio.
―Y nuestro siguiente participante es Huening Kai de primer año, quien interpretará un cover de "Sk8er Boi" por Avril Lavigne. ¡Recibamoslo con aplausos!
Mientras Beomgyu terminaba de guardar sus instrumentos detrás del telón, sintió cómo alguien chocó su hombro con relativa fuerza.
―Lo siento mucho.
―No te preocu-
Beomgyu estaba a punto de decirle que no pasaba nada hasta que levantó la vista y vio que se trataba del famoso Kai. Lo más probable era que lo hubiese chocado debido a la oscuridad, así como la prisa de haber sido llamado al escenario, pero Beomgyu aprovechó el pequeño accidente para mirar al chico con soberbia. Todavía estaba resentido con él por lo del cover de Sk8er Boi y no confiaba en que alguien como él fuera digno de interpretar dicha canción, así que a pesar de la falta de palabras se aseguró de dejarle en claro que incluso si les había robado, no sería capaz de llegar a su nivel.
El otro parecía haber comprendido el mensaje, probablemente reconociéndolo como el espía de los camerinos de hace un rato. En respuesta solo volteó el rostro, avergonzado por ser visto de ese modo. De inmediato salió al escenario para su presentación.
Beomgyu se apresuró a bajar de la tarima para dirigirse donde estaba el público. No podía perderse la humillación de su rival.
Viéndolo desde ahí se percató de que el amigo de Kai había hecho un buen trabajo arreglándolo porque el sujeto que estaba parado en medio del escenario no se parecía en nada el ermitaño fracasado que había visto en los camerinos. En efecto, llevaba la playera manga cero color celeste, unos jeans negros rasgados, además de una bandana en el cabello que resaltaban muy bien con su cabello rubio.
Yeonjun tampoco había mentido en que Kai era muy atractivo. Era alto, con una buena complexión corporal a pesar de ser de primero y, además tenía un rostro muy bonito, cuyos rasgos eran muy particulares.
Beomgyu debía admitir que se quedó sorprendido por el repentino cambio, pero la sensación se desvaneció en el momento en que Kai sujetó mal el micrófono y lo hizo caer, provocando que este emitiera un ruido muy molesto que alteró al público y lo hizo bajar la cabeza por la vergüenza. Beomgyu también rió, pero no por la torpeza del chico, sino que al final tenía razón sobre él.
"Aunque la mona se vista de seda, mona se queda".
―Ya cállate. No hay ningún chiste.
Beomgyu volteó y se encontró con Yeonjun. Por supuesto, se reconocieron el uno al otro pero no dijeron nada. Beomgyu simplemente le dedicó una mueca por hablarle groseramente a pesar de que no era el único que estaba riendo. El otro chico reciprocó el gesto volteando los ojos.
De regreso en el escenario, Kai comprobó que el micrófono estuviera funcionando como era debido y se colocó en posición para comenzar.
Desde el momento en que la pista de fondo comenzó a sonar, Beomgyu supo que no debía esperar demasiado, pues no se comparaba a tocar con instrumentos en vivo como bien pudo hacer junto a su banda. Como esa presentación no le ofrecería mucho, se dedicaría a solo disfrutar la canción tarareándola (e, indirectamente, demostrar que él debía haberla interpretado).
"He was a..."
―He was a boy. She was a girl...
Beomgyu ni siquiera pudo terminar la primera frase de la canción porque el rubio que estaba en el escenario le robó las líneas y también el aliento.
Él no tenía expectativas respecto al talento y voz de Kai. Imaginó que sería la de cualquier adolescente promedio que a lo mucho cantaba en el karaoke con sus amigos. No obstante, lo que estaba escuchando en ese momento era demasiado distinto. No sabía cómo describirla. Era muy particular, era potente, era conmovedora y...
Era muy hermosa.
No se percató de que toda su atención estaba enfocada en Kai, viéndolo con la boca abierta, hasta que de repente sus ojos se encontraron y el rubio le dedicó la misma mirada de altivez que Beomgyu hace unos instantes, agregando, de paso, una sonrisa muy coqueta y un guiño.
Beomgyu debió haber pegado el grito al cielo por el ataque, pero tan solo se quedó contemplándolo, sin comprender del todo lo que estaba sintiendo en ese momento. Esa reacción parecía haber motivado a Kai, quien comenzó a tomar mucha más confianza en el escenario, moviéndose de un lado para otro, bailando, interactuando con el público, brillando como toda una estrella.
Beomgyu quería fingir que no lo estaba mirando, que no le impresionaba en lo más mínimo, pero su cuerpo no le permitió mentir. Sentía escalofríos cada que la voz de Kai llegaba a sus oídos, su piel se puso de gallina y su corazón latía de forma incontrolable. Había un montón de gente observando el espectáculo, pero juraba que los ojos de Kai no habían dejado de ver a los suyos ni por un segundo hasta el final de la canción.
Luego de tan impresionante espectáculo, el público ovacionó con emoción al "chico skater" como muchas chicas del público lo estaban nombrando en ese momento. En cambio, Beomgyu no lo hizo, ni un solo aplauso. Esta vez no fue por soberbia u orgullo, sino porque sus manos estaban ocupadas cubriendo su boca, sin ser capaz de asimilar lo que acababa de presenciar.
No le importó que Yeonjun lo mirara victorioso, sabiendo que lo había hecho tragarse sus palabras.
No le importó que Kai ya hubiese salido del escenario para dar paso a los demás concursantes.
No le importó lo exaltada que estaba la gente con la participación de cierto chico que hizo un increíble popurrí de danza.
No le importó que el concurso hubiese finalizado y que ni su banda ni Kai hubiesen ganado, sino el muchacho del baile
No le importó que ese muchacho resultó ser Yeonjun.
Su mente no dejaba de pensar en la voz y presencia de Huening Kai.
"Kai, Kai, Kai" es lo único que repetía.
Y no sabía por qué.
┊🩰🛹🎸┊
Soobin y Taehyun no tenían nada en contra de Kai, pero agradecieron desde el fondo de su corazón que él no fuera el ganador del concurso de talentos.
No por envidia o resentimiento, como en el caso de cierto guitarrista, sino porque sabían que Beomgyu no lo dejaría en paz si ese hubiera sido el caso. Por fortuna, quien se coronó victorioso fue Choi Yeonjun y, si bien estaban tristes por no haber obtenido el reconocimiento, al menos no tendrían que soportar las rabietas de Beomgyu.
―¡No lo encontré en su aula hoy! ¡Acaso Junin Kai es un infiltrado que en realidad no estudia en esta maldita escuela o qué?
Inocentemente, creyeron que ya no tendrían de qué preocuparse, pero ambos sujetos podrían jurar que habían escuchado a Beomgyu repetir el nombre de Kai cual mantra.
―¿Por qué sigues empeñado en buscar a Kai? ―cuestionó Soobin―. Él ni siquiera ganó el concurso.
―Así es, fue Choi Yeonjun, el del club de danza clásica ―agregó Taehyun―. Si hay alguien a quién debes tenerle rabia, es a él.
―¡Ah! ¡Choi Yeonjun!¿Club de danza? ¡Eso es! ―exclamó Beomgyu emocionado, ignorando la pregunta de Soobin―. ¡Taehyun, eres un genio!
―Eso lo sé, pero ¿qué tiene que ver?
―Él es amigo de Kai. Ya sé cómo localizarlo.
―Insisto, ¿por qué el afán con...?
―¡Me voy, me voy! ―le cortó, preparándose para salir―. Soobin, Taehyun, hoy la sala es toda suya. ¡Aprovechen para tener una cena romántica o lo que sea que hagan las parejas, pero nada de cosas raras que yo también me siento y duermo en ese sofá! ¡Nos vemos!
Sin dar paso a más cuestionamientos, Beomgyu abandonó la sala de música en la que usualmente practicaban.
Soobin y Taehyun se vieron el uno al otro, divertidos e intrigados por la situación. Conocían a Beomgyu como la palma de su mano, así que toda esa situación solo podría tener dos caminos: o lo agarraba a golpes o a besos. Ya verían cómo concluiría la situación, pues no había otra forma de explicar la obsesión de su amigo con ese pobre rubio.
―Bueno, Beomgyu dijo gózenlo ―comentó Soobin con una sonrisa―. ¿Por qué no apostamos lo que pasa con él?
―Acepto.
...
―¡Juenin Kai! ¡Eres tú! ¡Ahí estás!
―Su nombre es Huening Kai, idiota.
Yeonjun rodó los ojos con fastidio. Acaba de suceder justo lo que no quería que sucediera.
Había tenido suficiente con haber sido irrumpido en medio de su ensayo porque supuestamente un "amigo" suyo lo estaba buscando. Él no tenía a ningún Choi Beomgyu en su lista de amistades, mucho menos al imbécil que estaba parado frente a él preguntando por Kai, así que se negaba a brindarle información, pero ahora el susodicho se presentaba en bandeja de plata.
Sabiendo que no podría hacer nada para evitar ese extraño encuentro, regresó a la sala de ensayo con resignación.
―Y bien, ¿Beomgyu...?
―"¿Y bien?"
―¿Estabas buscándome...?
En cuanto se quedaron solos Kai, con toda razón, le cuestionó por qué lo estaba localizando. Ni siquiera sabía su nombre. Yeonjun se lo acababa de decir para advertirle que ni se le ocurriera hacer caso a cualquiera que fuese su plan macabro.
Fue ahí cuando Beomgyu se hizo la misma interrogante de Soobin.
Había buscado al chico hasta debajo de las piedras, pero ¿por qué?
No tenía nada pendiente con él. Fuera del robo de Sk8er Boi, ni él ni Kai habían ganado el premio, así que ya no tenía caso seguir con el resentimiento. Y por muchas ganas que hubiese tenido de darle una golpiza, con la diferencia de tamaño y contextura entre ambos, podía darse por muerto.
En realidad, Beomgyu debía aceptar que no era nada de eso. Simplemente tuvo la necesidad de buscar al chico, de volver a verlo, de escucharlo cantar otra vez...
"Escucharlo cantar..."
―¡Eso es! ―exclamó con emoción ante su última idea.
―¿Qué?
―¡Tú!
―¿Yo?
―Este sábado a las 7 de la noche. Necesito que vengas conmigo.
―¿Perdón?
―Mi banda y yo nos presentamos en el bar de mi amigo todos los sábados, pero ninguno podrá, así que necesito que tú los reemplaces.
Antes de arrepentirse, Beomgyu hizo la propuesta sin pensarlo demasiado. Era la excusa ideal para que Kai no creyera que era un idiota que iba persiguiendo a sus enemigos imaginarios. Ambos se reconocían por el concurso de talentos, así que no era extraño que lo buscara para un trabajo como ese.
Beomgyu observó expectante a Kai, quien seguramente estaría analizando la proposición. Notó que el gesto de sorpresa pasó a una de reflexión y finalmente a una sonrisa coqueta.
―Admito que me tomó por sorpresa. Es la primera vez que me invitan a una cita sin siquiera saber el nombre del interesado, pero acepto.
¿De qué estaba hablando ese chico?
―¿Qué cita? ¿Cita?
―El sábado a las 7 de la noche, ¿no? Dame tu número para que me pases la dirección y podamos quedar.
―¿Cita?
...
―No puedo creerlo... ―se quejaba un incrédulo Yeonjun―. ¿Realmente vas a salir con él? ¡Estaba hablando mierda de ti el día del concurso!
―Él me invitó.
―Tú te invitaste solo. Él solo te pidió ir al bar de su amigo a cubrir a los miembros de su banda.
―Pero no negó que fuera una cita.
―...
―...
―Aceptaste porque es guapo, ¿verdad?
―...
―...
―Sí.
El bufido de Yeonjun fue opacado por la carcajada de Kai.
...
―¿Y bien? ¿Ya fuiste a cobrar venganza con Kai por haberte robado Sk8er Boi?
―No realmente. Algo parecido...
―¿Qué?
―No cobré venganza, pero de algún modo terminé obteniendo una cita con él.
―Oh, bueno... ¡¿Cómo?!
―¡Lo sabía! ¡Taehyun, me debes 5000 wones!
―¿Cómo iba yo a saber que realmente le atraía el tal Kai?
―¿Que Kai me qué?
┊🩰🛹🎸┊
Considerando que las interacciones de Beomgyu con Kai fueron extrañas desde un comienzo y no llegaron a tener o una conversación decente antes de su "cita", no era novedad que el ambiente entre ambos fuera incómodo.
Beomgyu había citado a Kai en el lugar un par de horas antes para que así pudieran ensayar la canción planeada. No obstante, desde el primer instante en que estuvieron frente a frente se percataron de que apenas conocían el nombre del otro.
"¿En qué demonios estaba pensando?". Hasta el momento, lo único que tenían en común era que ambos se arrepintieron de dicha "cita"; Beomgyu, de proponerla; y Kai, de aceptarla.
Dado que lo suyo en realidad no era una cita y había un compromiso de por medio, ambos tuvieron que lidiar con lo insólito del ambiente. Se dedicaron a practicar de forma mecánica, sin hablar el uno con el otro más de lo necesario.
Beomgyu no pudo evitar pensar que estaba junto al mismo chico encapuchado y jorobado que se encontró en los camerinos. Supuso que su actitud era culpa de la inusual situación, pero al verlo, no había ni vestigios del increíble artista que lo cautivó en el concurso. No era que de repente el talento y buena voz de Kai hubiesen desaparecido, pero incluso si entonaba la canción al pie de la letra y alcanzaba las notas respectivas, no sintió nada. Era como escuchar a un robot, perfecto pero sin emoción.
"Este no es Huening Kai, es Juenin Kai". pensó, mordiéndose el labio para no dejar escapar una risa y empeorar el tenso ambiente.
...
Cayó la noche y el bar del amigo de Beomgyu le dio la bienvenida a la clientela, quienes estaban ansiosos por disfrutar unas cuantas bebidas y pasar un buen rato mientras escuchaban rock.
El dúo que Beomgyu y Kai conformaban tendría el honor de abrir el espectáculo y amenizar el lugar con música en vivo. Esa posición le correspondía a Thursday's Child, por lo que el público que los conocía estaba expectante de escuchar al nuevo acompañante del guitarrista de la banda.
Para la sorpresa de todos, el chico no decepcionó y cautivó a la audiencia con el cover de "Youngblood" que ambos interpretaron.
Beomgyu estaba de acuerdo con que la voz de Kai había sonado genial, mucho más viva que en los ensayos, por lo que agradeció su predisposición a dar un show de calidad. Era indudable que era del tipo que se transformaba al momento de estar en el escenario. Sin embargo, a pesar de haber estado objetivamente bien, Beomgyu no podía asegurar que hubiese disfrutado la experiencia.
―Estaba nervioso de equivocarme o de repente quedarme congelado, pero creo que ambos lo hicimos bien ―comentó Kai a modo de llenar el silencio que otra vez los rodeaba a pesar de la música de fondo.
―Sí, yo también lo creo ―respondió por inercia, rascándose la cabeza para disimular lo nervioso que le ponía la presencia de Kai.
―Pero entiendo los nervios...
―En fin, creo que es hora de que me...
―Oh. Lo siento ―dijeron ambos al unísono tras interrumpirse mutuamente.
―¿Qué decías? ―preguntó Beomgyu.
―Ah, solo que ya es hora de que regrese a casa, pero ¿qué decías tú?
―Eh... que entiendo lo de sentirse nervioso. Dentro de unos minutos voy a presentar una canción que yo compuse y estoy ansioso por ello ―dijo tímidamente, arrepintiéndose al instante por hablar de sobra.
―¿Compuesta por ti? Eso es genial. Espero que te vaya bien ―contestó, esbozando una ligera sonrisa.
―Gracias... Entiendo si ya debes irte. Agradezco tu ayuda hoy.
Sintió que sus palabras fueron muy vagas. Tal vez debía haber demostrado su agradecimiento de otro modo, como ofreciéndole dinero o algo así, pero supuso que el rubio no aceptaría. Además, incluso si él había manifestado que debía regresar a casa, no pudo evitar sentir que lo estaba echando del lugar indirectamente. Al final, supuso que era mejor dejarlo ir y no volver a molestarlo.
Luego de despedir a Kai, llegó el turno de Beomgyu de regresar al escenario.
Desde el instante en que puso un pie sobre la plataforma sintió que iba a desmayarse. Sus piernas y brazos temblaban, sus manos estaban sudorosas y su corazón latía a un ritmo acelerado. Usualmente, él no sentía nervios porque ya tenía experiencia tocando en ese y otros lugares. Además, confiaba en sus habilidades e incluso podía decir que tenía un público estable.
Sin embargo, esa ocasión era diferente. No tocaría ninguna canción de Nirvana, Green Day, Radiohead o 5 Seconds of Summer que le aseguraran la atención del público, sino algo original y compuesto por él. Tampoco contaba con el apoyo de sus miembros, dentro ni fuera del escenario. Justo esa vez, se encontraba solo. Aún así, decidió ser valiente y no retractarse de presentar a su preciada creación, para la cual había trabajado muchísimo.
―En esta ocasión, presentaré una canción compuesta por mí. Se llama "Maze in the Mirror". Espero que les guste.
Al mencionar el título desconocido, muchos regresaron su atención a lo que estaban haciendo antes de que Beomgyu hablara por el micrófono, mientras que otros optaron por seguir viéndolo, ya fuese por respeto o por fidelidad al trabajo del guitarrista.
Inesperadamente, entre ese reducido grupo de personas, se encontró con la presencia de cierto rubio, cuyos particulares ojos los miraban con expectación.
"¿No se había ido ya a casa?".
Supuso que Kai había comprendido la confusión de verlo todavía en el recinto, así que esbozó una sonrisa, transmitiendo su apoyo al joven artista.
Fue una acción muy simple, pero suficiente para que Beomgyu aclarara su mente y nuevamente el deseo de impresionar al público regresara a su corazón. No importaba si solo Kai estaba prestando atención. Él era su público y le ofrecería todo de sí en ese escenario.
Le correspondió la sonrisa discretamente, se acomodó y de inmediato comenzó a tocar su guitarra y a cantar.
Cerró los ojos por un instante al comienzo, rebobinando todas las experiencias y sentimientos que lo habían animado a expresarse en esos acordes. Una vez que se sintió inspirado, abrió los ojos, seguro de poder transmitir cada una de esas vivencias con su voz e instrumento.
Tal y como el día del concurso de talentos, Beomgyu y Kai no dejaron de hacer contacto visual el uno con el otro. La diferencia era que los papeles se habían invertido. Ahora era Beomgyu el artista en el escenario y Kai el público que lo observaba con admiración.
Se preguntó si acaso él se sentiría igual de fascinado al contemplarlo que cuando él lo escuchó por primera vez.
...
Los aplausos al final de la presentación demostraron que había logrado llegar a los corazones de su humilde audiencia. Y la alegría y orgullo que sentía en ese momento se intensificaron cuando Kai se aproximó con una gran sonrisa en el rostro.
―Eso fue increíble, Beomgyu ―felicitó―. Fue una presentación genial y una canción muy hermosa.
―Gracias... ―Quería agradecerle por los cumplidos, por haberse quedado a ver su espectáculo y por haberle brindado apoyo con su presencia y sonrisa, pero no pudo decir más que esas simples palabras. Aunque, a comparación de antes, estas se sentían más sinceras.
―De nada... ―dijo, rascándose el cuello y retornando a su yo tímido―. Fue un gusto haber tocado contigo y verte tocar también. Gracias por invitarme. Creo que ahora sí es hora de que me vaya...
―¡No! ¡Espera! ―Por un instante, se arrepintió de haberlo retenido súbitamente, pero tenía muchas ganas de pasar más tiempo con él y conocerlo. Tras toda la experiencia tenía constancia de que lo había juzgado y tratado mal antes de tiempo.
―¿Uh?
―¡Cita! La cita... ―No sabía que debía mencionar aquello que quizá Kai había dicho de broma, pero no podía desaprovechar la oportunidad―. No sería una buena cita si no comemos algo, ¿no crees?
―Mmm... ―Kai hizo un ademán de estar pensando antes de aceptar alegremente―. Tienes razón ―parecía como si hubiera estado esperando que Beomgyu le propusiera eso desde un inicio.
Tomaron asiento en una de las mesas del lugar y pidieron unos bocadillos y bebidas para acompañar.
Si bien el ambiente entre ambos se sentía menos tenso, no quitaba el hecho de que se sentían nerviosos con la presencia del otro. A ojos de Beomgyu, Kai era el más tímido de los dos, así que decidió tomar la iniciativa antes de que el gracioso momento de hace unos minutos se disipara por completo. Además, aunque Kai hubiese puesto las palabras en su boca, en teoría él lo había invitado a estar ahí.
―Oye, Kai... siento mi actitud de hace horas. No quería que fuera incómodo ―confesó, bebiendo un trago de la soda para disimular el nerviosismo.
―¡Ah! No, está bien ―respondió al instante, sorprendido por la repentina disculpa―. Lo cierto es que me cuesta congeniar con gente nueva. En realidad soy muy introvertido... Y el trato solo era cubrirte hoy porque los miembros de tu banda no podrían. Creo que yo asumí por demás.
―De hecho... eso fue solo una excusa ―Ya que habían comenzado a sincerarse, decidió contarle la verdad.
―¿Excusa?
―Sí. Es verdad que necesitaba que alguien cubriera a mis miembros. ¿Sabes? Hoy es el cumpleaños de nuestro baterista, Soobin, y el vocalista, Taehyun, es su novio, así que ha estado trabajando todos estos meses para poder llevarlo a cenar a un restaurante costoso o algo así...
―Eso es lindo ―respondió ante la emoción de Beomgyu al contar su anécdota.
―A lo que iba... ―rectificó―. Ellos realmente no podrían estar conmigo, pero aproveché eso para invitarte porque... ―"Kai te atrae" Ante la incertidumbre de la razón, ciertas palabras cruzaron por su cabeza inadvertidamente―. No lo sé, solo sentí ganas de conocerte o hablar contigo luego de verte cantar en el concurso de talentos.
―¿Lo dices en serio?
―Sí, este... ―Beomgyu se puso nervioso, temiendo que Kai malinterpretara sus intenciones.
―Y yo que creí que no te agradaba.
―¿Qué? ¿Por qué lo dices? ―respondió, con pánico.
―Tal vez solo fue impresión mía, pero esa vez me estabas mirando... ¿con molestia? ¿rabia? y mi amigo Yeonjun me dijo algunas cosas también.
―Sobre eso... ―Beomgyu quería que la tierra se lo tragara por la vergüenza―. Perdón por eso. Soy muy competitivo y... admito que tuve una idea equivocada de ti al comienzo.
No fue capaz de revelar más. No podría aguantar la humillación de confesar que le agarró manía solo porque escogió la canción que él quería interpretar, ni que había hablado pestes de él incluso antes de conocerlo.
―Mmm, sé que no doy la mejor impresión.
―¿No? ―cuestionó, sin estar seguro de si se referían a lo mismo.
―Solo... soy muy inseguro y algo ermitaño, creo ―rió, con un deje de bochorno―. Es algo en lo que he estado trabajando.
Beomgyu solo lo escuchó, asintiendo con la cabeza. Sentía que ya había dicho y hecho más que suficiente haciendo sentir mal a Kai.
―De hecho ―continuó el rubio―, la presentación en el concurso de talentos fue una prueba para salir de mi zona de confort, y lo de hoy también, pero fue más difícil para mí de lo que podrías imaginar.
―No lo parece, lucías como todo un experto esa vez. Y hoy también ―señaló, siguiéndole el hilo y sacándole una sonrisa.
―Es una larga historia.
―Mis padres me dieron permiso hasta las 11.
―Bueno, a mí hasta las 10, pero creo que es suficiente ―dijo, riendo ante las ocurrencias de Beomgyu, dispuesto a iniciar su relato―. No sé si Yeonjun te dijo algo esa vez, pero soy bailarín, bailarín de ballet clásico.
Beomgyu reaccionó con genuina sorpresa. En ningún momento habría imaginado que Kai también bailaba, mucho menos ballet clásico.
―No tenía idea... ¿Entonces en realidad eres el que practica ballet y no el punk?
Por un instante, Kai no logró comprender lo que Beomgyu estaba diciendo hasta que se dio cuenta de la referencia a la canción de Sk8er Boi.
―Supongo que un poco de ambos ―comentó, luego de reír por lo ocurrente que era Beomgyu―. El punto es que nuestra instructora es muy... ¿exigente? Y no es por presumir, pero Yeonjun y yo somos muy buenos bailarines, entonces ella nos sugirió que participáramos en el concurso de talentos para representar a la academia, aunque yo diría que casi nos obligó.
―¿Ibas a presentarte con Yeonjun?
―Así es. Nosotros accedimos y ella se ofreció a montar una coreografía a dúo para nosotros, pero cada vez se ponía más estricta, no nos dejaba dar sugerencias e incluso comenzó a tratarnos mal.
―Se escucha como el estereotipo de instructora de ballet clásico. Alta, delgada, vieja y malhumorada.
―Lo es ―Kai rió por el comentario antes de proseguir―. En cierto punto se hizo insoportable hasta que Yeonjun tuvo la valentía de ponerle un alto... En resumen, no llegamos a un acuerdo y renunciamos a participar en el concurso. Luego de esa mala experiencia no teníamos pensado presentar nada hasta que la instructora nos dijo que "estábamos cometiendo un grave error" y que "no éramos nada sin ella".
―Increíble... Como en las películas―Para ese punto, Beomgyu estaba comiendo sus papás fritas y su soda con mucho gusto mientras escuchaba el chisme.
―Así como escuchaste ―Kai le siguió la manía, también tomando un sorbo de su bebida―. Ese fue su error. Yeonjun se lo tomó muy a pecho y estaba determinado a demostrarle lo contrario. Al comienzo creí que ambos inventaríamos una coreografía nueva juntos, pero resulta que él quería hacer algo distinto y por cuenta propia. ¡En ese momento entré en pánico! Decidí no participar y solo apoyar a mi amigo, pero me convenció de también demostrarle a la vieja que podíamos hacer más que piruetas y chaines.
―Y entonces tú...
―¡Sí! Me animé a cantar, me inscribí al concurso y el resto ya lo sabes...
―¡En su cara, vieja amargada! ―soltó con emoción. Realmente estaba disfrutando el desenlace de la historia.
―No sabes lo feliz que estaba en cuanto anunciaron que Yeonjun fue el ganador. Recuerdo que él me había asegurado que cualquiera de los dos sería capaz de ganar.... Él es tan genial. Lo admiro muchísimo.
―Mhm ―refunfuñó Beomgyu. No sabía por qué le molestaba que Kai estuviese "Yeonjun esto, Yeonjun lo otro"―. En mi opinión, tú debiste haber sido el ganador del concurso.
―Con confirmarme que dejé al público totalmente enamorado, es suficiente para mí ―dijo burlón, enfatizando su discurso lo suficiente para dar a entender a quién se refería con público.
Beomgyu tomó otro trago de su bebida, tratando de disimular la vergüenza y que había expuesto lo mucho que le encantó la presentación de Kai.
―Pero hablando en serio ―continuó el menor―. Fue un reto para mí porque hace mucho que no cantaba en público. La música es algo que también me apasiona y está muy ligada a mi familia, pero por mi falta de confianza no pude explotarlo, así que me siento orgulloso de mí mismo por haber participado.
―Felicidades por ello.
―Gracias.
―¿Y qué pasó con la danza?
―Actualmente me estoy tomando un "descanso". Lo cierto es que me da vergüenza regresar a las clases luego de lo sucedido con la instructora. Aunque Yeonjun regresó literalmente al día siguiente y con la cabeza muy en alto ―comentó, riendo al imaginar la reacción de la profesora―. Ya quisiera yo tener esa seguridad.
"Y otra vez Yeonjun" pensó Beomgyu.
―Gracias a él es que he llegado a amar la danza y no quisiera dejarla de lado, pero creo que todavía no voy a regresar.
―Está bien, puedes ir a tu ritmo.
―Sí. Además, me gustaría enfocarme en la música por el momento.
―Me parece muy bien ―Beomgyu celebró inconscientemente. La música era lo suyo y Yeonjun no podría hacerle competencia en eso―. Y dígame, señor virtuoso, ¿así que sabe tocar la guitarra, el piano, el bajo, la batería y el triángulo?
―Y tengo una afinación perfecta...
Así, continuaron charlando y conociendo al otro. Las disculpas de Beomgyu y la sinceridad de Kai rompieron el hielo entre ambos, permitiéndoles disfrutar de la compañía del otro. Se sintieron tan cómodos el uno con el otro que la ocasión realmente terminó siendo muy similar a una cita.
―Oye, Kai.
―¿Sí?
―¿Te sabes la letra de "Wherever You Are" de One Ok...?
―La pregunta ofende. ¡Por supuesto que sí!
―¿Entonces, qué te parece si vamos y la interpretamos juntos? Tenía pensando hacerlo solo, pero no puedo dejar pasar la oportunidad de compartir el escenario con un genio musical otra vez.
―¿Ahora? ¿Sin ensayar?
―Recuerda, la zona de confort...
―¡Ah! Ya sé...
―Vamos, es solo para divertirnos.
―Acepto, pero con una condición.
―¿Cuál?
―Déjame tocar la guitarra.
―¡Woah! Esa es la actitud. Trato hecho.
Beomgyu esperaba que Kai no se hubiese percatado de que su pasión al cantar y tocar en esa presentación improvisada le tocaron el corazón, tanto que incluso llegó a lagrimear de la conmoción.
...
―Choi Beomgyu.
―¿Qué?
―Me estás diciendo... ¿Me estás diciendo que no solo tocaste para ese chico, sino que también le dejaste usar tu guitarra? ¡Tu guitarra!
―Sí, ¿qué tiene? Tú y Soobin estaban en lo suyo así que...
―No, es que tú no entiendes.
Soobin, quien era testigo de la tertulia, rió al comprender a lo que su novio se refería. Beomgyu era muy quisquilloso con las personas para quienes tocaba. Ellos eran de las pocas excepciones porque les tenía plena confianza y eran parte de la misma banda. Ni hablar de agarrar su guitarra. Ese instrumento era sagrado y ningún mortal tenía el honor de tocarla. Que hubiese dejado que Kai lo hiciera decía mucho.
―¿"No entiendo" qué?
―Beomgyu, hay algo que debes saber.
―¿Qué?
Taehyun y Soobin se vieron el uno al otro y hablaron al mismo tiempo.
―Te gusta Kai.
―¿Que Kai me qué?
┊🩰🛹🎸┊
El tomar un descanso del ballet fue la excusa perfecta, no solo para darle una segunda oportunidad al mundo de la música, sino también para hacerse cercano a Beomgyu.
Lo que comenzó como sesiones casuales para enseñarle a Beomgyu a tocar el piano y que a cambio él lo llevase al bar de su amigo a tocar y cantar juntos algunos fines de semana, se convirtió en una bonita amistad.
Aunque aseverar que ambos chicos solo eran amigos era erróneo, puesto que era muy evidente que se gustaban el uno al otro. Todos, desde el mismo Kai hasta Soobin, Taehyun y Yeonjun, los testigos directos, estaban al tanto de sus sentimientos. Todos, excepto Beomgyu.
En realidad, Beomgyu no desconocía el gran cambió de su relación con Kai. Simplemente le parecía insólito que hubiese pasado de buscar venganza contra él a que incluso se volviera su musa.
―¡Oye, Beomgyu! Te estamos hablando ―Taehyun llevaba mil intentos fallidos de llamar su atención.
―¡Shhh! ¿No ven que estamos ocupados?
―Ajá... ―bufó Soobin, contemplando como, efectivamente, Beomgyu estaba ocupado, recostando su cabeza sobre el regazo de Kai mientras escuchaban música con unos auriculares.
―¡Es trabajo! ¡Estamos buscando opciones para el próximo cover que interpretaremos!
―¿Ves lo que te dije? ¡Huening nos quitará el puesto en la banda! ¡Seremos reemplazados! ―reclamó Taehyun.
―No seas exagerado ―comentó Soobin.
―Yo que tú, no estaría tan tranquilo. Sabes que el genio musical no solo canta bien, sino que toca la batería, así que ve despidiéndote de tu trabajo.
―Digamos, pero el puesto de líder no me lo puede quitar.
Los presentes rieron ante el comentario, incluído Kai, quien sabía que solo lo hacían de broma y para molestar a Beomgyu por el trato preferencial que tenía con el menor. Les parecía gracioso que con los demás se comportara travieso, molesto y malcriado, pero con Kai, su faceta más madura salía a flote.
―¿Y cómo explicas el trato especial? ―continuó protestando mientras señalaban a los aludidos.
―No sé de qué hablas ―respondió Beomgyu con genuina confusión. Sin esperar respuesta, se acomodó nuevamente sobre los muslos de Kai, esta vez dándoles la espalda a los demás para ya no ser interrumpido en su momento "de trabajo". Kai solo los miró con una mirada tímida e hizo una pequeña reverencia a modo de disculpa.
―Vengan conmigo ustedes dos ―Yeonjun torció los ojos en fastidio y sujetó a Taehyun y Soobin del brazo para llevárselos―. Aquí estamos de sobra.
Incluso él que no soportaba a Beomgyu estaba harto de ver que ambos estaban prendados por el otro, pero por la ingenuidad del guitarrista todavía no tenían ningún avance formal.
Es que Beomgyu simplemente no había asimilado sus sentimientos.
...
―¡Ya la terminé! ¡Terminé la canción!
Soobin y Beomgyu dejaron de lado lo que estaban haciendo para prestarle atención a Beomgyu.
El chico llevaba un par de semanas componiendo diligentemente una canción nueva. Esa tarde, después de mucho esfuerzo, finalmente la había concluído.
―Suena bien ―opinó Soobin luego de que Beomgyu les hiciera escuchar un poco de la misma.
―Es más tranquila en comparación a otras canciones que has escrito―acotó Taehyun―. También es distinto a nuestro estilo, pero me gusta. ¿Cuándo comenzamos a ensayar para presentarla?
―¿Estás loco? Esta canción es para que Kai la interprete, no ustedes ―Beomgyu se escuchaba tan ofendido que parecía como si el menor lo hubiera dicho alguna falacia.
Sus compañeros de banda se miraron el uno al otro con preocupación. Por un instante, creyeron que la profecía que hizo Taehyun sobre que Kai les quitaría su lugar estaba cumpliéndose.
"Violeta"
"Tus ojos me miran, y los colores de las luces brillan sobre mí".
"Un mundo entero...
Se dibuja delante de tus ojos, siente la sinceridad
Abre el mundo que se esconde dentro de ti
Siente cómo eres
Muéstrame cómo eres ahora mismo"
"Eres mi Violeta".
―¡Aaah, por eso! ―exclamaron Soobin y Taehyun al unísono.
Sus dudas se disiparon y todo cobró sentido en cuanto le dieron un vistazo a la letra.
Podían estar tranquilos; Kai no iba a robarles el lugar.
Simplemente era Beomgyu estando enamorado de él.
―¿"Por eso" qué? ―cuestionó el aludido.
―Beomgyu, ¿realmente no te das cuenta? ―el vocalista principal hizo un último intento, pero el otro negó con la cabeza, sin comprender nada.
―Esta canción... ¿La letra no te dice algo? ―preguntó Soobin, recibiendo un gesto de confusión en respuesta. El baterista no podía creer que acabara de componer una canción inspirada en Kai y aún así no se percatara.
―No entiendo.
La pareja se miró mutuamente, soltando un suspiro al anticipar lo que venía.
―Beomgyu, hay algo que debes saber ―La escena se sentía como un deja vu.
―¿Qué?
―Estás enamorado de Kai.
―¿Que yo qué de Kai?
Si debían ser sinceros, no esperaban mucho de Beomgyu. Asumieron que negaría sus sentimientos al igual que en otras ocasiones y los acusaría de charlatanes e inventados. Sin embargo, en lugar de sus típicas protestas sobre que estaban hablando absurdeces, las facciones confundidas de Beomgyu se fueron transformando en desconcierto y posteriormente estupefacción. De repente, se llevó ambas manos a la boca antes de confesar.
―¡Estoy enamorado de Kai!
Soobin y Kai soltaron un resoplido de alivio, sin ser conscientes de que habían estado observando a Beomgyu mientras contenían la respiración.
―¡Al fin se dio cuenta! ―Era hilarante que su epifanía se hubiese manifestado en un momento como ese.
―Beomgyu, ¿a dónde vas?
―¡Debo ir por Kai!
―Woah, qué romántico ―dijo Soobin, viendo cómo su amigo abandonaba el lugar con prisa.
―En realidad, ya tenía acordado encontrarse con él. Solo se le estaba haciendo tarde.
―Callate el hocico, mi amor.
En cuanto a Kai, él estaba resignado a que Beomgyu jamás haría ningún movimiento para cambiar su relación a pesar de las señales sobre que sus sentimientos eran recíprocos. Por lo mismo, le tomó desprevenido que en cuanto concluyó su primer recital de ballet en mucho tiempo, lo primero que hiciera el otro fuera felicitarlo por su triunfante regreso a la danza y darle un beso en los labios.
Era cuestión de tiempo para que tal acto ocurriera, de hecho, ellos y el mundo entero sabían que habían tardado demasiado, pero la felicidad de que los sentimientos pudieran fluir con libertad al fin nadie se las podía quitar.
―¡Estoy muy orgulloso y enamorado de ti!
┊🩰🛹🎸┊