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Chapter Text

Pov Rudeus

¿Cuanto tiempo a pasado? ¿Hace cuanto fue que lo perdí todo? amigos, familia y a.... Silphy a Roxy y también a.... Eris. Ya no me queda nada, y todo por culpa de ese bastardo de Hitogami.

Durante mucho tiempo e buscado una forma de llegar hasta el, desperdicie toda mi vida buscándolo sin descanso, ya perdí la cuenta de a cuantos mate para encontrar aunque sea una pista de Hitogami, pero parecía que nadie sabía nada, aún me avergüenzo de pensar que Eris era su apóstol, pero estaba tan desesperado y la paranoia me consumía que simplemente no pensé con claridad y sus acciones no ayudaban.... pero eso no es una justificación para lo que le hize.....

Y entonces después de tanto tiempo, de tantos viajes y de tanta sangre derramada.... lo encontré, una pista de el en aquella vieja ruina de dragones. Parecía simple solo necesitaba matar a los cinco generales dragones y de esa forma poder entrar al mundo estéril en donde se encuentra Hitogami, parecía simple pero.... mi cuerpo ya abia envejecido demasiado me sería imposible enfrentarme a ellos en mi estado actual. Si tan solo ubiera encontrado esto durante mis cuarentas tal vez podría hacer algo. No es por presumir pero viajar tanto da sus frutos y me abia vuelto una de las personas más fuertes del mundo.

Tenía rango emperador en magia de agua, tierra, fuego y viento y podía lanzarnos en silencio, tambien después de cierta pelea con un espadachín desquiciado aprendí magia de gravedad, mi magia de perturbación también mejoro en todos esos años, ademas de que gracias a Perugius aprendí a hacer mis propios círculos de teletransportación tanto en estructuras como en pergaminos para dezplasarme por el mundo rápidamente, lamentablemente mi magia curativa no mejoro mucho con los años, la iglesia de Millis tenia cualquier magia curativa de rango superior al avanzado resguardado, y desde el incidente con el libro que robe junto a Zanoba y Cliff me abia vuelto su enemigo y no quería correr un riesgo innecesario, sin embargo conserve el hechizo de desintoxicación de nivel dios que robamos de ese lugar, no es que me gustará mucho usarlo ya que además de tardar demasiado en decir el conjuro lo que no era práctico..... era un recordatorio constante de que no pude salvar a Roxy...... como no pude salvar al resto..... aun haci seguía siendo útil para curar veneno o enfermedades que contraia por..... no creo que sea necesario decirlo.

Aun haci Perugius fue el que se encargo de que en ese momento todas mis esperanzas murieran, el me dijo que el último general dragón no aparecería hasta dentro de unas décadas, y yo sentía que mi cuerpo ya no estaba dando para más moriría pronto lo sabia bien.

Realmente no sé si me ubiera levantado de ese bajón si cierta persona no ubiera estado a mi lado:

No tenía nombre cuando lo encontré en unas viejas ruinas cerca de la capital del reino de Shirone, las explore para investigar más sobre Hitogami cuando mi odio por el creció después de la muerte de Eris, más en lugar de cualquier pista me encontré con una sala oculta que estaba completamente congelada por lo que pensé pudo aber sido por el hechizo "cero absoluto" o una versión muy fuerte de este ya que las ruinas se notaba que tenían sus años, y el hechizo no parecía aber perdido mucho su efecto, pensé que tal vez hubo un enfrentamiento aquí recientemente pero no parecía que nadie ubiera dencubierto o entrado a la sala en años (en caso de que quien la creo siguiera vivo).

Uso el hechizo "isla de calor" rodeando mi cuerpo con este para hacerme paso por la enorme abitacion congelada sin lastimarme en el proceso.

Lo que encontré, me sacó de la indiferencia que llevaba desde hace tiempo.

Un joven de calculo unos catorce años congelado por completo, en ese momento me sorprendí "quien usaría un hechizo de tal calibre solo para congelar a un niño" claro para estándares de este mundo el ya era casi un adulto pero aun haci el no parecía representar una amenaza. No parecía estar armado, y no lucía muy intimidante apesar de llevar una armadura de cuero ligera, lo único destacable era su cabello blanco.

Sentí rabia por quién sea que lo congelo, pero sabía que no abia nada que hacer ya sabía que era imposible que ese niño siguiera vivo. Aún haci quería sacarlo de las ruinas para por lo menos darle un entierro apropiado para por lo menos sentir que hice algo bueno en mucho tiempo....

Grande fue mi sorpresa que cuando active al máximo la "isla de calor" y se derritió todo el hielo. El abrió los ojos y como por arte de magia desapareció por completo y antes de que reaccionará intento golpearme por la espalda cuando volvió a aparecer.

Rápidamente use magia de gravedad para aplastarlo contra el suelo pero resistió a esta y desapareció otra vez, este apareció a unos pasos de mi.

-Así que ese mago cobarde se rindió y trajo a su compañero -Dijo -Por lo que parece tu eres más fuerte anciano, me sorprende pero después de que hace unos años pasó ese desastre de mana puede que todo sea posible.

.........

¿Mago cobarde? ¿Se refiere al que lo congelo aquí abajo? ¿Pero más importante.....

-¿Desastre de mana?- Parece que llame su atención.

-No me digas que se no escuchaste sobre eso anciano -Parecía algo incredulo -Hablo de esa enorme luz que nos envolvió hace unos.... ¿dos?.... ¿tres años?....

......

- No creo que pase nada por decírtelo -Se le notaba confiado - Fui transportado muy lejos de donde estamos ahora, al principio me asuste que me separaran de mi familia pero siempre había querido ser aventurero rápidamente me convertí en uno y gracias a mi talento me hice un pequeño nombre en unos años después de eso vine aquí debido a que.... -El para de inmediato su narración como si se ubiera dado cuenta de algo -No es importante, vine aquí y luego un mago cobarde uso un raro hechizo para congelarme, supongo que hacía tiempo mientras tú llegabas.

Dijo con calma como si estuviera confiado de que yo no saldría vivo de esta pelea, y viendo mi aspecto en general creo que ya sé porque se hace esa idea.

Más no me podía sacar sus palabras de la cabeza. El desastre de mana o cómo se le llamó el incidente de teletransportación fue hace más de cincuenta años.... eso solo puede significar una cosa.

- Niño... creo que estas confundido -El me miró mientras soltaba un pequeño "eh" -El desastre de mana fue hace más de cincuenta años.

No sé qué pasó por su cabeza en esa ocasión. Solo sé que algo dentro de él se rompió.

Recuerdo como él salió corriendo de las ruinas. Intenté seguirle el paso pero estos viejos huesos ya no daban para mucho, haci que rápidamente se me perdió de la vista.

Pensé que sería lo último que vería de él. Cuando pensaba tomar el círculo de teletransportación que estaba cerca me encontré de casualidad con el.

Estaba llorando sosteniendo sus piernas mientras repetía palabras como "por qué" o "que hice mal" incluso yo que pensé aber perdido mi humanidad hace mucho tiempo... sentí lastima por el ya que conocía muy bien ese sentimiento de perderlo todo, la diferencia es que yo lo tenia bien merecido.

Me acerqué a él y lo consolé.....

.......

Y antes de darme cuenta tenía un nuevo compañero de aventuras.

Bueno en verdad no fue tan fácil, después de que lo consolé y le di las mejores palabras de ánimo que pude reunir, él simplemente no se despegó de mí, como cuando alimentas a un perro callejero y él empieza a seguirte.

Faltaba bastante para llegar al círculo de teletransportación y si bien él no parecía tener problemas en buscar su propia comida seguía haciendo algo raro tener un niño (para mis estándares) acompañándome, aún así él parece de unos catorce años y si quedó congelado durante más de cincuenta años.... Tal vez hasta sea mayor que yo.

En serio no quería llevar un niño conmigo, pero en ese momento descubrí algo que lo cambió todo cuando mi curiosidad finalmente me ganó y decidí preguntarle el que lo llevo a esas ruinas.

-¿Las ruinas? - Parecía incredulo una vez más - Ah eso bueno.... un tal dios-humano o hombre-dios o incluso aveces se hacia llamar Hitogami el me dijo que fuera para encontrar algo que me ayudaría en mi aventura.

Todos mis pensamientos quedaron en blanco, casi recuerdo que estuve a punto de volver a usar magia de gravedad en él otra vez para preguntarle qué sabía pero... algo me detuvo y no fue nada menos que la comprensión de lo que paso. Ese bastardo de Hitogami cayó tan bajo que le quito toda su vida a un simple niño tal como me lo hizo a mi.

No recuerdo muy bien cómo pasaron las cosas, ya habrán pasado algunos varios años, pero después de que le explique todo solo recuerdo uno de los gritos más fuertes que he escuchado.

-¡¡¡¡HITOGAMI!!!!

Sentí como todo el aire se volvía muy espeso, ningún grito había tenido esta clase de poder así que dudaba que fuera magia vocal, tendría algo que ver con esa habilidad rara que usaba antes.

También le expliqué sobre como él también me había engañado sin entrar en detalles, y en ese momento él solo me dijo una cosa.

- Anciano ¡juramelo! - dijo con una enorme rabia pero estando al borde de las lagrimad - Jurame que lo mataremos... juntos.

Eso era algo que sin duda de cualquier otra persona rechazaría. Pero viéndolo me recordó tanto a cuando Hitogami me engañó por primera vez.... que no pude sino aceptar su ayuda.

Me dijo que se llamaba Bruilard (nombre extraño) y al principio pense era un niño bendito capaz de desaparecer y reaparecer o (o algo haci) pero el me dijo que esa fue una técnica que Hitogami le abia enseñado, y tambien dijo que Hitogami le abia dicho que era la técnica de un tal Randolph o algo haci que no estaba seguro.

Supongo que era un niño muy desconfiado como para haberle enseñado la técnica del mismísimo dios de la muerte para ganarse su confianza.

Resulta que en verdad su verdadero poder era el de manipular el oxígeno de diversas maneras, aunque no era muy útil ya que como máximo podía normalmente dejar sin oxígeno a alguien. Tan bien resultó ser un espadachín muy abil tanto como lo fue Paul cuando entrenaba conmigo en mi niñez, teniendo el rango avanzado en las tres artes de esgrima y por lo que parecia tenía una obsesión por el estilo de combate a cuatro patas del estilo del Dios del Norte. Decía que era muy genial.

Me recordaba bastante a Eris aveces tanto en actitud como en talento. Aunque al parecer lo dejé con un gran sentimiento de inferioridad cuando una horda de monstruos se nos acercó y yo simplemente los congele a todos con una "Nova de escarcha" sobrecargada de maná.

Así que al final terminó volviéndose un chico mucho más calmado, que como objetivo secundario de su viaje quería formar su propio estilo de esgrima para dejar un legado en el mundo (aunque creo que se rindió y no lo culpo).

Realmente mis aventuras por buscar como matar a Hitogami se volvieron aunque sea solo un poco placenteras cuando lo tenía a mi lado, él me admiraba mucho... a mí.... a una basura como yo.

........

Después de mucho tiempo el ya tenía dieciocho años. Se había vuelto un joven muy fuerte claro no desperdicie mi oportunidad de enseñarle magia, se sintió bien volver a enseñarle a alguien a usar magia me recordó a Julie cuando le enseñaba magia.

Claro, nunca logró aprender a hacer magia sin encantamientos, pero siempre era útil tener algunas cartas bajo la manga.

Se convirtió en un mago de rango avanzado en fuego, tierra y agua y gracias a su afinidad obtuvo el rango santo en magia de aire aunque al igual que yo tenía problemas con la magia curativa solo llegando al nivel intermedio.

Su habilidad de manipular el oxígeno también mejoro con el tiempo. Ahora era capaz de purificar el oxígeno que a diferencia de lo que parece lo volví a un arma letal ya que podía crear oxígeno 100% puro y respirarlo era casi una sentencia de muerte si no tenias magia de desintoxicación de un buen nivel, también podía sacar el oxígeno ya no solo de personas sino de objetos y algunos edificios que le enseñé que necesitaba oxígeno para mantenerse de pie fueron derrumbados cuando se les vio arrebatado todo el oxígeno de golpe, también podía generar áreas en donde él oxígeno no podía entrar matando más fácilmente, y muchas otras variantes de su bendición que lo hacían un guerrero muy variado y claro cabe mencionar que su habilidad con la espada también mejoro mucho.

En resumen abia creado un monstruo cuyo lema era "ustedes no conocen el verdadero potencial del oxígeno"

Sin duda un gran muchacho que siguió creciendo y teniendo aventuras a mi lado.

Aún recuerdo cuando salí a reunirme con alguien en solitario para obtener información y lo dejé solo en la posada. Solo para que cuando llegué a nuestro cuarto en el que nos estábamos quedando lo encontré con la la mirada paralizada mientras leía el diario que abia escrito.

Sinceramente pensé que este día llegaría, tarde o temprano él se enteraría de mi pasado y me abandonaría tal como lo hizo Eris hace tantos años.

Pero en lugar de eso él simplemente corrió llorando y me abrazó mientras me repetía una y otra vez "vamos a matarlo juntos"

Me sorprendí pero solo le devolvi el abrazo y decirle que así sería.

Pero parece que soy pésimo cumpliendo mis promesas no podemos llegar a Hitogami sin el tesoro del último general dragón y yo pronto moriré no abia duda sobre eso.

Pero de alguna forma él una vez más me sacó de ese pozo, y me dijo que deberíamos encontrar otra manera de intentar llegar hasta él.

Lamentablemente nunca lo encontramos pero ahora tenemos otro plan.

-Creo que el círculo está listo padre ya lo revise unas diez veces.

Vamos a viajar en el tiempo los dos juntos, yo arreglaré mi vida y el me acompañará.

Claro al principio este no era el plan, de hecho tenía pensado volver a el punto decisivo cuando Hitogami me convenció de liberar a esa rata que terminó matando a Roxy.

Pero aún recuerdo perfectamente las palabras que dijo.

-¡Dijimos que lo ariamos juntos padre no que se lo delegaríamos a otra persona aunque seas tú mismo! - dijo decidido -¡¡Mataremos a ese bastardo juntos!!

Y aquí me ves teniendo preparado un círculo para viajar en el tiempo.

-Cuántas veces te lo he dicho Bruilard -Dije cansado los años me están pasando mucha factura - No merezco que un jovencito como tu me llame pa...

-No acepto quejas -Nego con la cabeza.

Joven testarudo, aún recuerdo la primera vez que lo dijo cuando tenía catorce años, intenté quitarle la manía rápidamente pero no lo logré, es muy testarudo.

Realmente que él me acompañe complicó bastante todo, el tuvo que cuidar bastante de mi salud mientras nos hacíamos cargo del círculo de viaje en el tiempo. Ya enviar a una persona al pasado era una cosa, dos era otra muy diferente.

Y no sé cómo demonios él se las arregló para que su medicina me mantuviera con vida unos cuantos años más.

También descartamos el plan de que yo volviera a mi nacimiento, esos serían más años que tendríamos que retroceder y le agregaba complejidad y sobre todo gasto de mana, por lo que decidimos que volveríamos a cuando yo estaba en la capital del reino de Shirone justo después de todo lo que pasó con Pax dimos los cálculos y él ya debería llevar un mes encerrado en esa prisión de hielo.

-Recuerdas todo el plan.

-Si padre.

-Muy bien entonces.

Ambos nos posicionamos en el enorme círculo mágico, había construido una habitación entera con magia de tierra solo para esto, claro también la oculté para que ninguno de los apóstoles de Hitogami intentera interrumpirnos.

Ambos empezamos a vertir mana en el círculo, él no tenía tanto mana como yo ya que carecía de un factor del Laplace pero aún así su mana era lo suficientemente alto, tal vez para dos hechizos de rango emperador.

-Nos veremos del otro lado.

-Si padre.

La sensación se sentía algo familiar a cuando entrabas en un círculo de teletransportación pero mucho más intensa, más no dolía como pensé que sería.

Espero que todo salga bien.

.......

.......

.......

-¡Aahhh!

Me desperté con un fuerte grito que venía de nada más ni nada menos que de mí mismo.

.....

- ¿Acaso todo fue un sueño?, Bruilard debería estar preparando mi medicina ahora mismo -Pase mi mano por mi cabeza pensando en el extraño que fue el sueño.

Pero cuando retiré mi mano.... me di cuenta de que todo salio bien, lo abiamos conseguido después de años de investigación.

Ya no veía una mano vieja y arrugada de un anciano, sino la mano de la que parecía ser de un niño de unos doce años o un poco más. Y ahora que me daba cuenta ni siquiera estaba en mi vieja cama de la casa que compramos Bruilard y yo cuando empezamos nuestra investigación.

En cambio estaba en lo que parecía ser la habitación de una posada.

- ¿Rudeus? ¿que pasa? - Esa voz.

Me volteé, a mi lado en la cama contraria estaba Eris.... sana y salva y si todo salio bien de unos catorce años (no debería faltar mucho para su décimo quinto cumpleaños).

Ella me miraba cansada y somnolienta, mientras que yo solo podía sentir como se me salían las lágrimas. Repetía la palabra "Lo siento" una y otra vez en mi cabeza pensé que estaba preparado para esto, pero parecía que todas esas horas en las donde mentalicé que todos volverían a estar vivos no valieron para nada, simplemente verlos sanos y jóvenes me llenaba de felicidad.

Eris parecía sorprendida de verme llorar y se acercó hacia mí.

- ¿Que pasa Rudeus?-Me pregunto preocupada mientras parecía buscar razones para mis lágrimas- ¿Es porque nos despediremos de tu familia mañana?

¿Mi familia?.... Ah claro, cierto que mañana deberíamos despedirnos de Lilia y Aisha que serían enviadas a Millis junto a papá... también extrañe mucho a ese idiota.

Más las palabras de Eris solo me dejaban en claro de que todo habia funcionado.

Aprovechando lo cerca que estaba de mí, haci que abracé a Eris mientras lloraba. Yo no decía nada, las palabras simplemente no salían de mi boca mientras que ella parecía muy sobresaltada.

- ¡Rudeus! ¡¿que pasa?!

- T-te extrañe.... demasiado.

Fue lo único que pude decir mientras que todos los recuerdos de cómo Eris intentó sacarme de mi estado de depresión volvían a mi cabeza. Claro sus métodos no eran los mejores, pero ella lo intentaba porque me amaba..... Pero yo fui demasiado estúpido.

Estoy seguro de que si no fuera porque Bruilard me consoló de la mejor manera que pudo sobre ese tema ni siquiera me atrevería a tocarla por toda la culpa. Pero él mismo lo dijo: "Esta es una nueva oportunidad para enmendar las cosas no desperdicies esta segunda oportunidad sintiéndote culpable todo el tiempo padre"

Claro la culpa seguiría conmigo hasta el final de mis días. Nunca podré cambiar lo que hice pero.......

Ahora puedo arreglarlo.

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Rudeus pov

-Te extrañe.... demasiado.

-Eh... ¿Rudeus de que hablas?

Yo solo respondí aumentando la fuerza de mi abrazo, lo que solo sobresalto más a Eris.

Realmente si por mi fuera este abrazo debería durar para siempre, pero la vida ya me demostró que las cosas nunca salen a mi favor y que debo aceptar la realidad.

¿Cuál es mi realidad ahora?

-¡Auch!

Pues es un golpe por parte de Eris en el estómago (bastante fuerte e de mencionar)

-¡No me asustes haci idiota! -Gruñó bastante enfadada.

Supongo que se me olvidó por completo como era Eris despues de tantos años. No por nada su apodo en nuestro grupo "Dead end" era "El perro rabioso"

Aún a pesar de todo el dolor no puedo evitar seguir sonriendo mientras lloraba, debo parecer bastante raro ahora mismo.

Eris al ver que mi llanto no paraba se acercó pero manteniendo una pequeña distancia para evitar lo que acaba de pasar.

-Rudeus en serio ¿que te pasa? -Su voz, y aunque lo intentaba ocultar, sonaba bastante preocupada por mi.

Demonios, abiamos planeado actuar normalmente por ahora, tengo que reprimir mis emociones por ahora.

-Yo... yo solo... -Me seguía costando formar palabras y el dolor en el estómago no ayudaba, pero debo poner nuestro plan en marcha -Solo... tuve un muy mal sueño.

Eris parecía comprender, pero al igual que esa vez en la que me pelee con Paul en Millis, ella no sabía que hacer para hacerme sentir mejor.

-Rudeus yo....

-No necesitas disculparte yo ubiera echo algo parecido en tu situación -Hable en un intento de calmarla -Saldre un rato afuera a despejar mi mente, no tardare mucho.

Ella parecía reacia a dejarme ir, pero al final terminó aceptandolo. Supongo que pensó que eso sería lo mejor en este momento.

........

........

.......

Realmente si por mi fuera no me separaría de Eris hasta que yo mismo acepte finalmente que viajamos en el tiempo. Pero yo no estaría aquí en primer lugar si no fuera por el.

Cuando salí afuera me sorprendí, ya que no era tan tarde como pensé, deberían ser más o menos las 12:00PM.

Las calles eran exactamente como las recordaba de mi corta estadía aquí en mi juventud (cambio bastante mientras pasaban los años) por lo que no tarde en llegar a la salida y empezar a buscar.

- Ok.... ¿Por donde quedaban esas ruinas?

Después de unos minutos de orientación me decidí por una ruta.

-Espérame Bruilard.

______________

Bruilard pov

¿Que es realmente lo que te hace querer a alguien?

Realmente hay muchas respuestas, pero yo sinceramente creo que no hay una correcta.

Cuando conocí a mi padre después de que me descongelara de esa prisión que parecía eterna, realmente solamente pensé de que era otro enemigo al que derrotar, pensaba que con la habilidad que Hitogami me enseñó sería suficiente para vencerlo. Pero resultó que el lo contraresto con un hechizo que nunca abia visto antes y me obligó a retroceder.

Durante mis cortos años como aventurero todo abia sido bastante fácil, ningún monstruo espera que el enemigo desaparesca para unos segundos despues estar decapitado. Antes de lo de mi padre la única pelea que perdí fue contra ese mago cobarde.

Al principio el mago ni siquiera era mi enemigo, abia un raro monstruo en la sala al que acabe fácilmente con la habilidad que Hitogami llamo "Muerte silenciosa" pero antes de que me diera cuenta un mago abia terminado su encantamiento y me quedé congelado durante más de cincuenta años.

Cuando mi padre me lo dijo no quise creerlo y salí corriendo hacia la capital, pero incluso durante el camino todo me parecía diferente y cuando finalmente llegué me di cuenta de que.... abia perdido toda mi vida.

Sinceramente nunca me a gustado llorar, pero el golpe que me di ese día fue tan duro que no pude si no salir de la ciudad corriendo, no se cuanto corrí solo se que cuando me canse me apoye contra un árbol y me puse a llorar mientras me ponía en posición fetal.

Mi mente simplemente iba de un lado a lado intentando asimilarlo todo, y cuando lo hice el único sentimiento que sentí fue el de un profundo vacío.

¿Que me quedaba? Nunca tuve muchos seres queridos al nacer como un niño bendito por lo que no debería doler tanto.... ¿cierto?.... pero tan solo pensar de que abia estado congelado cincuenta años era demasiado.

Pensé que ya nada tenia sentido.

Pero sin embargo en ese momento él llegó, la persona a la que pensé en matar me estava consolando y dándome ánimos. Era tan surrealista pero en cada una de sus palabras sentí que el de verdad me entendía, que el sabía por lo que yo estaba pasando.

Desde ese día no quise despegarme de él en casi ningún momento.

Antes de que me diera cuenta en solo unos meses ya lo consideraba mi padre. Y hicimos tantos viajes mientras matabamos apóstoles o gente que se metía en nuestro camino. Nos volvimos un dúo temido mundialmente, ¿por qué? Bueno.... mi padre de abia ganado el título de "Dios mago" después de matar al Dios del Norte Kalman III, según el Hitogami manipulo a este último para intentar matarlo, yo por mi lado conseguí el título de "Dios bendito" después de vencer al Dios de la muerte una vez que intento matarme por criticar duramente su cocina cuando fui a su restaurante solo una vez ya que mi padre estava ocupado, mi padre quería morir cuando se dio cuenta de todo esto, mientras que yo por mi lado no sabía ni siquiera como lo vencí.

Y justo por eso eramos temidos, dos potencias mundiales uniendo fuerzas ¿acaso tu intentarias meterte con algo haci? Yo sin duda no lo haría (bueno tal vez mi yo joven si lo haría) nuestra fama sin embargo no es de destacar ya que siempre estábamos viajando.

Fueron en serio tantos viajes, que creo que no quedó rincón del mundo sin recorrer.

Excepto Millis, mi padre me dijo que era el peor lugar al que podíamos ir. Tampoco recorrimos mucho Asura, ya que mi padre abia sido el responsable de quemar gran parte de su capital en el pasado.

Pero luego de que leí su diario y me enteré lo que le hicieron a su primera esposa.... sinceramente ubiera preferido que solo quedarán cenizas de ese estúpido reino (creo que empecé a odiar a la realeza de Asura).

Y hablando del diario nunca llegue a entender porque mi padre tenia dos esposas, no soy creyente de Millis (maldito país de idiotas) por lo que no lo veo mal, pero nunca e sentido la necesidad de casarme, menos dos veces. Cuando le pregunté a mi padre el simplemente me dijo que amaba a ambas por igual, recuerdo que una sonrrisa tanto nostálgica como melancólica se formó en su rostro.

También recuerdo que el casi siempre intentaba (de manera poco disimulada) invitarme a dejarlo, y que de esa forma tuviera una vida y formará una familia. Pero yo nunca me he enamorado, nunca he amado a alguien, le dije esto a mi padre cuando volvió a insistirme con lo mismo y él me dijo que era porque nos la pasábamos viajando y que nunca conocía a nadie a profundidad, yo lo dudaba haci que el me propuso (mentira me obligó) a estar medio año en Sharia para ver como me iba en ese campo inexplorado, aunque yo le dije que si esto era un plan para dejarme tirado, yo mismo lo encontraría algún día y el me juro que volvería cuando pasara el tiempo.

El resultado......

Resulta que por lo que parece soy arromántico (termino raro que me enseñó mi padre) y que no siento amor romántico por nadie, y no crean que no lo intente, lo hice y aún haci me era imposible amar a alguien fuera del atractivo fisico. Me sentiría triste por esto pero mi padre hizo esto a mis diecisiete años, donde mi única prioridad era encontrar una manera de llegar a Hitogami.....

Después de eso mejor me sentre en mi entrenamiento y para cuando nuestro viaje nos llevó a esas ruinas, yo era un dios del estilo del dios del norte (valga la redundancia) y rey en las otras dos además de la magia que me enseñó mi padre, y mi habilidad de manipular el oxígeno que se acercaba a su cúspide, según mi padre yo ya era una de las personas más fuertes que abia conocido, y considerando lo mucho que viajo no es poco decir.

También aprendí más idiomas, al principio era super complicado pero después le agarre el truco. Al final sabía seis idiomas: Dios Humano, dios demonio, dios lucha, dios bestia, dios dragon y uno bastante raro que mi padre llamó "Japonés" nadie lo hablaba así que no sabía porque quería enseñármelo, él solo me dijo que era para que pudiéramos tener conversaciones privadas delante de la gente sin muchos problemas y yo lo acepte. Luego en una época en la donde él pensaba que moriría pronto, me dijo que era el idioma de su antiguo mundo, y que se había reencarnado en este, todo fue muy raro pero sinceramente no cambió la forma en la que lo trataba.

Pero cuando nos dimos cuenta de que no abia esperanzas para mi padre, y muy probablemente para mi tampoco (no podía vencer al último general dragón sin su ayuda) de alcanzar a ese bastardo pensé en rendirme.

Pero no fue haci, había odiado a ese idiota por tanto tiempo como para solo dejarlo así. Por lo que levante a mi padre y formulamos un nuevo plan.

Viajariamos en el tiempo. Luego de encontrar en unas viejas ruinas sobre un hechizo creado por el primer dios dragón que era capaz de esto. Compramos una pequeña casa y empezamos con la investigación.

Nos tomó años y mi padre se debilitaba con cada uno que pasaba, yo tenía que estar cada vez más pendiente de su salud, la magia que estudiábamos era increíblemente compleja era bastante difícil entenderla pero al final.... lo logramos.

Y actualmente, me encuentro atrapado de nuevo en esta prisión de hielo esperando que mi padre venga a liberarme, es bastante raro y estar aquí denuevo y mantener conciencia. Recuerdo que al principio bombeada oxígeno a mi cuerpo para mantenerme vivo, pero al parecer mi cuerpo empezó a hacerlo solo después de lo que parecieron unos días encerrado aquí.

Realmente espero que mi padre no se..... no el hielo ya se está derritiendo (eso fue rápido).

Parece que mi padre no se vino con rodeos y activo su "isla de calor" al máximo desde el primer segundo de entrar a esta sala.

Mi cuerpo volvió a sentir algo más que frío y abrí los ojos.

Delante de mi abia un niño de unos trece años, tenía pelo castaño y ojos verdes, llevaba una túnica de color gris algo desgastada y el mismo bastón que usaba mi padre "Aqua Heartia", la sala se encontraba actualmente iluminada por un espíritu de luz que seguramente mi padre invoco (esas cosas eran muy útiles).

-¿Lo recuerdas todo Bruilard? -Me pregunto, algo preocupado.

Por mi parte era difícil asimilar que este niño era mi padre, yo lo conocí cuando ya se encontraba en su vejez (Si padre 50 años es viejo). Pero eso da igual, el sigue siendo la persona que me salvo de esta prisión.

-Absolutamente todo padre -Dije con seguridad mientras el me daba una sonrisa aliviada -Es hora de poner todo en marcha.

-Lo se lo se -Vaya sigue pareciendo un anciano ahora mismo -Recuerdas todo el plan ¿verdad?

-Hasta el más mínimo detalle padre.

El solo suspiro (¿le sigue molestando?)

-En ese caso ya sabes que tienes que hacer.

Yo asentí.

-Lo se bien -En ese momento corrí a la salida pero no sin antes volver a hablarle -Nos vemos en dos o tres días padre.

Con eso corrí a la salida.

-Es hora de poner en marcha esto.

Salvaremos a todos los seres queridos de mi padre, y después mataremos a Hitogami.

___________

Rudeus pov

Ni viéndome con trece años deja de llamarme padre ese niño.

Realmente verlo como un niño una vez más es curioso, recuerdo que una vez se me pasó por la mente de que su cabello blanco se debía a que abia agotado todo su mana en alguna ocasión, pero el me dijo que era haci desde que nació, y considerando que tampoco era muy talentoso en la magia tiene sentido.

Pero bueno no es que importe, lo mejor será volver.

El camino devuelta a la ciudad fue bastante tranquilo, los monstruos de la zona morían de un simple "cañón de piedra" modificado, y los más duros con un "Electric" una variante más práctica del hechizo de rango Rey llamado "Lightning"

........

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Llegue a la habitación de nuestra posada unas horas después, ya estava amaneciendo. Cuando entre toda mi atención se centró en Eris que se encontraba profundamente dormida, no puedo resistir la tentación de acariciar su suave cabello rojo mientras ella sonrreia en sueños.....

Si tan solo no ubiera sido tan tonto.... tal vez pude aber tenido una buena vida junto con ella, dejar atrás el pasado, formar una nueva familia, tener hijos y aber envejecido a su lado.... si tan solo yo....

'Esta es una nueva oportunidad para enmendar las cosas, no la desperdicies sintiéndote culpable todo el tiempo padre'

Demonios, lo siento Bruilard, este idiota al que llamas padre no puede evitarlo.

-¿Te sientes mejor Rudeus? -Otra voz conocida me habló.

Volteé para encontrarme con Ruijerd.... ya sé me abia olvidado su rostro después de tantos años, la última vez que lo vi fue cuando dejó a Norn y Aisha en mi casa en Sharia hace ya decenas de años.

Realmente me alegro un poco de que no haya visto como le fue a mi vida en su ausencia, estoy seguro de que al igual que Zanith me abría abofetiado o algo peor sobre todo por lo de Eris. Pero ahora estava sentado en unas de las sillas de nuestra habitación mirándome claramente preocupado, supongo que Eris le habrá contado sobre mi mentira de tener una pesadilla, o el mismo nos habrá escuchado, siempre fue de los que dormian con un ojo abierto.

Por lo menos encontrarme con el no hace que mis cuerdas vocales se atoren.

-Si estoy mejor, no te tienes que preocuparte por mi Ruijerd -Hable con el mejor tono tranquilizador que pude -Fue todo un simple mal sueño.

Si.... me gustaría que lo haya sido.

El no parecía del todo convencido pero lo dejo pasar.

-Esta bien -dijo con un suspiro bastante pesado -Deberías dormir aunque sea un poco antes de la despedida -Finalizó.

Es cierto. Veré a Lilia y a Aisha de nuevo solo para verlas irse una vez más, y si todo sale como lo planeamos Ruijerd también se irá pronto y Eris también lo hará al poco tiempo. No tendré mucho tiempo haci que voy a aprovecharlo.

-Lo haré Ruijerd.

Y con eso empezó esta segunda oportunidad de vivir (bueno técnicamente tercera, pero en lo que a mi respecta la primera nunca ocurrió).

.......

.......

.......

La despedida fue tal como recordaba, tanto Lilia como Aisha se irían a Milis para reunirse con papá.

Al igual que antes Lilia me devolvió mi reliquia sagrada junto con el collar que Silphie.....

Que raro.... estoy llorando otra vez. 'Silphie.... Roxy..... esta ves no dejare que nada malo les pase, porque eso merecen' Prometi mientras me ponía el collar.

Al igual que en el pasado Lilia me tenía abrazado por la espalda y su pecho estaba presionado contra mi, pero esta vez no sentí nada, esos sentimientos desde ahora serian solo para las mujeres que amo.

-¿Aisha a sido grosera con usted? -Me hizo la misma pregunta de hace tantos años.

-En lo más mínimo -Negue con la cabeza -Es una de las mejores niñas que e conocido jamás -Y no exagero.

Parecía que todo iba a mantenerse como en el pasado, tal como lo habíamos planeado Bruilard y yo, pero no conté con que Lilia notara rápidamente mis lagrimas.

-Maestro Rudeus ¿esta bien? -Se le notaba bastante preocupada. Parece que soy experto en eso.

Me pregunto qué diría Bruilard si me viera ahora mismo, conociéndolo solo me abrazaría mientras me dice que todo va a estar bien.

-S-si so-solo -Me limpie las lágrimas con la manga mientras intentaba retener el llanto -Las recuperé después de tanto tiempo.... solo para tener que dejarla ir una vez más -Técnicamente no estoy mintiendo.

Lilia solo me apretó más fuerte en su abrazo.

-No se preocupe maestro Rudeus -Dijo con un perfecto tono tranquilizador que dejaba en vergüenza el mio -Nos volveremos a ver muy pronto.

Oh Lilia, tienes razón, esta vez lograré salvar a todos y todos viviremos pacíficamente en Sharia en la misma mansión que compre para mi boda con Silphie. Ese es mi sueño, mi utopía, mi objetivo, aunque en este punto me vastaria que todos estuvieran bien.

Nunca me di cuenta cuando dejé de pensar siquiera en seguir buscando a Hitogami, solo quiero tener de vuelta a la familia que el me quito.

Mi conversación con Lilia terminó, ahora tocaba Aisha.

Sinceramente todo fue bastante similar a como pasó en el pasado, hasta me atrevería a decir igual. La única diferencia es que al igual que con Eris, la abracé como si tuviera miedo de que desapareciera, lo que la asusto un poco.

Pero al final tuvimos la misma despedida en donde me llamo "hermano" por primera vez.

Al final yo, Eris y Ruijerd seguimos nuestro camino de volver a Roa.

..........

..........

.........

Haci pasaron los tres días más felices de mi vida en años, volver a ver a Eris y a Ruijerd practicar mientras viajábamos juntos era algo que extrañaba muchísimo.

Volver a hablar con Eris era de las cosas que más me alegraban incluso con el tema de conversación más común, aun que admito que aveces preguntaba cosas tontas solo para poder hablar más con ella. Aveces no podía evitar volver a llorar de vez en cuando, aunque ahora solo eran unas cuantas lágrimas..... Bruilard sin duda a este punto se burlaria de mi.

Haci pasaron sin que me diera cuenta dos días, la hora finalmente abia llegado.

Actualmente me encontraba junto con Eris en un bosque intentando cazar algo de carne a petición de ella, un conejo o lo que sea, aunque en verdad era solo por diversión ya que teníamos provisiones para el viaje.

En ese momento nos encontramos con un lobo de tres ojos, esta era una de las pocas bestias mágicas que avitan en Shirone, era de unos dos metros de altura en sus cuatro patas, con un pelaje gris oscuro que era casi negro. Este pelaje es denso y áspero, con una capa adicional que lo protege tanto del frío como de los ataques ligeros.

Lo que lo distingue de otros lobos mágicos es su tercer ojo. Este ojo extra está ubicado en el centro de su frente y brilla con una luz rojiza o dorada, dependiendo de su nivel de poder, en este caso la luz era roja. El tercer ojo le otorga habilidades como una visión mejorada que le permite detectar presencias invisibles o camufladas, y anticipar los movimientos de sus presas.

Sus colmillos son largos y afilados, diseñados para desgarrar tanto carne como armaduras ligeras. Además, su mandíbula tiene una fuerza impresionante. Las garras del lobo son lo suficientemente afiladas como para cortar árboles pequeños de un solo golpe, y sus patas son increíblemente ágiles, permitiéndole moverse con gran velocidad y destreza incluso en terrenos difíciles.

El lobo nos miraba con sus tres ojos de manera amenazante mientras nos gruña.

Tanto Eris como yo nos sorprendimos al verlo, pero Eris no tardo en emocionarse.

-Ya veras Rudeus -Dijo determinada -Te mostraré el resultado de mi entrenami.....

Eris ni siquiera pudo terminar su frase cuando el cuerpo del lobo callo al suelo decapitado, la sangre brotaba sin cesar del lugar en donde debería estar su cabeza, Eris se sorprendió bastante, yo por mi parte no estaba tan sorprendido, ya que además de saber quién era el responsable lo había visto con el ojo de predicción.

Por más de que el tercer ojo del lobo lo dejara ver a personas camufladas, era algo muy distinto a una persona que viene invisible a una enorme velocidad hacia ti. Aunque incluso si lo hubiera notado dudo que lo hubiera podido esquivar a esa velocidad.

-¿Están bien? -Se escuchó una voz que un tono bastante amigable.

Me volteé a ver, y efectivamente era Bruilard el que estaba parado frente a nosotros mientras guardaba su espada. Venía con la misma armadura de cuero ligera que usaba en su juventud.

Mas, parece que Bruilard no lo notaba por la distancia, pero yo podía sentir perfectamente la sed de sangre de Eris.

Bueno Bruilard lo dejo en tus manos.

_____________

Eris pov

Rudeus a estado raro después del día en donde salvamos a su familia de ese príncipe, al principio pense que era por ese sueño que tuvo, yo también e tenido malos sueños pero.... el de Rudeus parecía que lo hizo olvidarse de hasta donde está parado. Preguntaba cosas como "¿adonde vamos?" "¿El clima de este lugar siempre fue haci?" y otras cosas tontas.

También creo que el no lo noto pero lo e visto llorar de vez en cuando. En serio me preocupa y me duele no poder hacer nada por el (¿por qué soy tan mala en esto?).

Así que justo hoy había decidido intentar levantarme el ánimo de la misma manera que yo me lo levantaba a mí, encontrar algún oponente fuerte y derrotarlo, claro él nunca accedería eso ya que nunca quiere correr riesgos innecesarios así que lo disfracé como una misión de cazeria.

Y cuando por fin creí que había encontrado una forma perfecta cuando vi a ese lobo de tres ojos, biene este imbécil de pelo blanco y lo mata de un solo golpe, quitandome a "mi" presa y sobre todo mi posibilidad de animar a Rudeus.

Supongo que no hacen falta explicaciones de porqué lo ataque. Si el me quita a mi presa es justo que el ahora lo sea.

Rápidamente me abalancé contra él e intenté cortarlo con mi espada, el abrió los ojos sorprendido y bloqueo a duras penas debido a que tuvo que volver a desenvainar su espada.

-¿Ni un gracias por la ayuda? -Pregunto algo incredulo.

-¡¡No la necesitaba!! -Le grite molesta a lo que el se veía sorprendido.

Volví a intentar un corte, pero él volvió a bloquearlo y hizo un saltó bastante largo hacia atrás para ganar distancia, se puso en guardia inmediatamente cuando sus pies tocaron el suelo.

Me quedaba claro que era muy fuerte, no solo porque había decapitado al lobo de tres ojos sino porque también lo hizo a una velocidad sorprendente tanto que no pude verlo, no me cabe duda que podría vencer a todos todos los monstruos de esta región al igual que yo. Ambos nos miramos directamente sin romper ni un segundo el contacto visual.

.........

Intente abalanzarme contra él otra vez y él hizo lo mismo, pero en el camino ambos caímos al suelo debido a que de la nada el piso que estaba debajo de nosotros se había vuelto hielo.

-¡Es suficiente! -Grito Rudeus levantando la voz por primera vez en mucho tiempo.

Yo intentaba levantarme y podía ver que el otro chico intentaba lo mismo, al final ambos lo conseguimos cayéndonos más de una vez en el proceso por el suelo resbaladizo.

-Un hechizo sin encantamiento, y este nivel de control.... ¿Rudeus? -El idiota hablo sonando bastante incredulo.

Rudeus también parecía bastante incredulo, hasta que entre cerró los ojos y empezó a analizar al muchacho.

-Habilidad sin igual, cabello blanco..... ¿Bruilard? -Su voz también sonó incrédula.

Ambos caminaron el uno al otro, sin despegar la mirada... ¡¡y de la nada se abrazaron!!

-Te extrañe tanto -Dijo Rudeus.

-Yo también Rudeus.

¿Que?

¿¿Que??

¿¡Que!?

-¿¡¡Que esta pasando!!? -grite mientras ellos seguían abrazandoce.

Chapter Text

Eris pov

-¿¡¡Que esta pasando!!?

El grito parece que logró que ambos volvieran a la realidad.

-Solo estoy feliz de volver a ver a mi hermano -Dijo el chico de cabello blanco con una sonrisa.

¿Hermano? Rudeus nunca mencionó que tuviera un hermano, solo dos hermanas.

-¿Hermano? pero....

-No es de sangre Eris -Dijo Rudeus Interrumpiendome -Es un viejo amigo mio -Me dio una enorme sonrrisa.

Ese idiota.... ese idiota de pelo blanco hizo mi trabajo de animar a Rudeus.

-Creo que deberías presentarte -Le dijo al idiota de pelo blanco dándole unas palmadas en la espalda.

El simplemente camino hacia mí y se presentó formalmente.

-Soy Bruilard un viejo amigo de Rudeus es un gusto -El me extendió la mano de manera amistosa, más yo no sabía si aceptar o no.

Por un lado ánimo a Rudeus... pero por otro me quito mi oportunidad de hacerlo.

Así que decidí simplemente cruzarme de brazos y hacer como si él no estuviera aquí.

-Eris -Dijo Rudeus algo desilusionado.

-No te preocupes Rudeus -Se dirigió hacia Rudeus bajando la mano- Entiendo por lo que e visto que no debe estar muy feliz de que yo haya matado a ese lobo.

Maldita sea, ¿que hago ahora?

-¿Y como te a ido la vida Rudeus? No estamos un poco lejos de Buena -Eso último lo dijo de una manera que no logre comprender.

-Si bueno.....

-No me digas que... -Se le veía algo asustado.

-Si....

-....Pensé que no abia llegado a Buena -Se le notaba algo frustrado y empezó a apretar sus manos.

-Si, pero ¿Bruilard? Tu eres de allí como no sabías.

Esto hizo que Bruilard se sobresaltara un poco.

-Bueno yo.... me dirigia a Roa para visitarte -Le dijo a Rudeus con una sonrisa -Pero cuando estaba por llegar una enorme luz me envolvió y terminé en las afueras de este reino -Concluyó.

Haci que el también fue una víctima del incidente de teletransportación.

-¿Y tu familia?

El suspiro de forma pesada.

-Eh mandado cartas al continente central pero no me responden -En ese momento parece que se dio cuenta de algo -Si lo que dices es cierto y se teletransportaron al igual que tu y yo.... tal vez ya estén muertos.

El ambiente se sentía bastante frío.

-Lo siento -Rudeus bajo mucho el tono de su voz.

-No tienes porque disculparte Rudeus.

Decía eso pero se le veía una expresión complicada en su rostro, haci que el ya lo acepto eh.

-Y a ti.... ¿como te a ido?

Rudeus se empezó a rascar la nuca.

-Valla.... por donde empiezo.....

__________________

Narrador

La siguiente media hora avanzo mientras Rudeus le contaba a Bruilard  sus aventuras por el continente demoníaco.

Obviamente Bruilard ya conocía esta historia al derecho y al revés, era de las que solía pedirle a su padre que le contará cuando estava aburrido (o estaban vagando en el desierto), más su actuación le pedía que actuará sorprendido en ciertas partes.

Su papel era el de alguien que conocía el talento de Rudeus, pero que nunca imagino cosas como: volverse amigo de un superd, atravesar todo el continente demoníaco, derrotar a un santo del norte con la ayuda de la vestía sagrada, entre otras cosas.

Bruilard y Rudeus eran excelentes actores, más de una vez tuvieron que actuar para salirce con la suya.

Bruilard recuerda las múltiples ocasiones que tuvieron que hacerse pasar por un anciano enfermo y su nieto preocupado, hasta el mismo le sorprendía la mucha piedad que se les mostraba a las personas mayores que les costaba respirar (todo gracias a su manipulación que lo hacía no sólo creible si no real).

Pero mientras ellos hablaban abian ignorado algo.

Ruijerd llevaba más de cuarenta minutos esperando a Eris y Rudeus, Eris le abia comentado sobre su plan de encontrar un oponente fuerte para derrotarlo y de esa manera animar a Rudeus. Ruijerd sabía de que eso muy probablemente no funcionaria, pero no perdía nada por intentarlo, dudaba seriamente de que hubiera algo en este continente que fuera más peligroso de lo que se encontraba en el continente de demoníaco, y sabía perfectamente de que daba igual intentar insistirle a Eris de que el los acompañara, sabía que no lo iba a dejar hacer eso.

Pero ciertamente la tardanza de Eris y Rudeus lo estaba empezando a preocupar, por lo que prefirió adentrarse al bosque dejando atrás el pequeño campamento, incluso si esto le hacía ganarse el disgusto de Eris por algún tiempo, él había prometido llevarlos a los dos a salvo a su tierra natal y tenía pensado cumplir esa promesa.

No tarde mucho en encontrarlos, pero se sorprendió al ver una a una tercera persona.

Tenía cabello blanco, ojos grises, venía con una armadura de cuero bastante ligera y en su sinturon llevaba una espada.

Esta persona parecía estar hablando con Rudeus, mientras tanto Eris solo escuchaba su conversación, sintiendo de que no tenía derecho a interponerse entre Rudeus y su amigo.

-Y ese es básicamente el resumen -Rudeus concluyó.

-Vaya... sabia que uno de los príncipes no tenía la mejor de las reputaciónes -Se le notaba sorprendido -Pero no pensé que le hiciera algo haci a tu familia y a la de los guardias.

-Si -Confirmo -Si no fuera por Zanoba ubiera sido mucho más complicado.

Bruilard puso una pose pensativa mientras se llevaba una de sus manos a su barbilla.

-Ahora que lo dices... Zanoba es un niño bendito ¿no?

Rudeus parecía que recién recordaba ese detalle.

-Ah cierto -Chasqueo sus dedos -Es un niño bendito como tu Bruilard.

Esto despertó el interés tanto de Ruijerd y de Eris.

-¿Has mejorado con eso?

-Bastante -Dio una sonrisa amistosa.

Ruijerd en este punto decidió de una vez acercarse a los dos, ver el como tanto Rudeus como el otro chico que aparentemente se llamaba Bruilard hablar con tanta naturalidad le indicó de que el no era un peligro.

-Nacen muy pocos niños benditos -Dijo Ruijerd acercandoce a Rudeus -Me sorprende que ya conocieras a uno Rudeus.

En ese momento Rudeus debió su atención a Ruijerd comprendiendo rápidamente su error.

-Oh lo siento Ruijerd ¿hicimos que te preocuparas?

-No tienes porque disculparte me basta con que tu y Eris estén bien.

Bruilard veía esta escena mirando de forma analítica a Ruijerd, parecía sin duda un guerrero muy fuerte tal como le dijo su padre.

-Tu debes ser Ruijerd -Hablo para llamar la atención de Ruijerd -Con esto ya conozco a todo Dead End eh -Mormuro para si mismo.

-Supongo que Rudeus te lo comento.

-Si lo hizo hace unos cuantos minutos -En ese momento Bruilard extiende su mano hacia Ruijerd -Mi nombre es Bruilard soy un niño bendito y viejo amigo de Rudeus.

Ruijerd acepto el apretón -Ruijerd Superdia soy un superd y también soy amigo de Rudeus.

Bruilard abrió un poco los ojos.

-Vaya Rudeus no mentía de verdad eres un superd -Dijo con una sonrisa -Es impresionante.

Rudeus sonrió internamente al ver como Bruilard y Ruijerd se llevaban bien. Más rápidamente cambió de orientación, debía seguir con el siguiente paso.

-Y... ¿Bruilard? -Bruilard voltio a ver a Rudeus -¿Que planeas hacer ahora?

El ambiente cambio a uno más sombrío, y la expresión de Bruilard se tornó complicada.

-Sé que dijiste que el incidente de teletransportación afectó a Buena -Se notaba el dolor en sus palabras -Pero todavía necesito volver a casa debo verlo con mis propios ojos y después de eso veré qué hacer -Se notaba un tono algo desesperanzado.

Ruijerd sintió compasión por Bruilard, incluso Eris lo sintió, ya que ella podía comprender el como Bruilard se sentia.

Desde la incertidumbre de no saber como se verá el lugar en donde creciste, hasta la amarga comprensión de saber que nada será como recuerdas.

Si bien este sentimiento era falso es un sentimiento que Bruilard sintió hace tiempo.

Rudeus lo sabía, en un punto de su viaje Rudeus le pregunto a Bruilard si no quería volver al lugar en donde creció el accedió con algo de dificultad.

Era un pequeño pueblo en la región de Fittoa, estaba más alejado de Roa de lo que estaba Buena pero eso no la salvo.

Cuando llegaron al pueblo obviamente ya estaba reconstruido ya que el incidente fue hace demasiados años, pero nada era como Bruilard recordaba eran caminos fiferentes, gente diferente y... su familia por obvias razones ya no estaba, Bruilard ese día le comentó Rudeus que nunca conoció a su padre, solo conocía a su madre y a su hermano dos años mayor que él, Bruilard estuvo decaído durante bastante tiempo después de eso, Rudeus tuvo que compartir su experiencia de cuando él volvió a Buena después del incidente para demostrarle que lo comprendía, y de esa manera apoyarse mutuamente, un recuerdo amargo pero apreciado tanto por Bruilard como Rudeus.

-Oye Bruilard -Rudeus hablo.

-¿Si?

-Nosotros vamos de camino a Roa.... me preguntaba si.... ¿quisieras venir con nosotros?

Bruilard abrió los ojos, esto si bien también era actuado, la emoción de viajar con el viejo grupo de su padre emocionó de sobremanera a Bruilard .

-Yo.... ¿pero?... -Se noto duda en sus palabras -¿Que hay del resto?

Una pregunta que se dirigía obviamente a Eris y Ruijerd.

-Por mi no hay problema.

Ruijerd fue el primero en hablar.

-Sería irresponsable de mi parte dejar a un niño solo -Asintió ante sus propias palabras.

Bruilard iba a replicar sobre lo que le digan niño, pero practicamente Ruijerd era más viejo que él con sus dos vidas juntas.

Eris por su lado estaba en duda, no le caia bien Bruilard pero.... Rudeus había mejorado su ánimo al estar cerca de él, así que tal vez él era la clave para animarlo. Además de que al igual que ella y Rudeus el abia sufrido por algo que no controlaba.

Pero obviamente ella no iba a demostrar esto.

-Mph... lo que sea solo asegúrate de no ser un estorbo -Dijo mientras seguía de brazos cruzados.

Bruilard sonrío genuinamente por ser parte del viejo grupo de su padre, y las próximas palabras solo lo emocionaron más.

-Muy bien Bruilard -Rudeus le sonrió -Oficialmente eres parte de Dead End.

Su sonrisa solo creció.

-Será un placer ser parte de su equipo.

Después de todo esto todos volvieron al campamento debido a que ya estaba anocheciendo, y Bruilard pasó a la primera noche con el grupo al que había admirado durante tantos años.
_____________

Bruilard pov

Haci que este era el antiguo grupo de mi padre.

Sinceramente es tal como me lo imaginaba, bastaba con ver a Ruijerd para saber que era muy fuerte pero...

Cuando conocí a Eris sinceramente no pensé que sería tan impulsiva, cualquiera con dos dedos de frente se pensaría dos veces atacar a alguien que pudo matar a un lobo de tres ojos de un solo corte de su espada, sin contar mi velocidad.

Aunque actualmente soy mucho más débil que antes, pero tampoco tanto como creí, sigo siendo capaz de hacer la "espada larga de la luz" del estilo del Dios de la espada por lo que soy un santo en ese aspecto, el estilo del Dios del agua esta en la misma situación pero con el "escudo acuático", en el caso del dios del norte para mi sorpresa y con la práctica que hice en los días lejos de mi padre debería ser un rey ya casi un emperador considerando que casi logro usar la "espada de escarcha" pero sigo muy lejos de mi rango anterior de Dios del norte. Mis abilidades de manipular el oxígeno siguen casi igual, y en esta segunda oportunidad debería llegar incluso más lejos con la suficiente imaginación, lamentablemente la presión que ejerce en mi cuerpo mis tecnicas más poderosas de manipulación como "Mundo muerto" o "Mundo puro" es demasiada como para usarlo más de una vez al día (maldito cuerpo de catorce años).

Mi padre la tuvo más fácil en esto sin duda, sus hechizos no tuvieron que aber sufrido casi nada.... sin duda ahora mismo el es más fuerte que yo y no me necesitara mucho... me esforzaré por volver a serlo útil lo más pronto posible, a él y a su equipo.

Pero volviendo al tema... padre es un mentiroso, recuerdo que en el tiempo que estuvimos juntos solo soltaba alagos de sus seres queridos siempre que salia el tema, en especial de cuatro.

El primero era su padre Paul, siempre dijo de lo valiente que era y de lo mucho que amaba a su familia... casi siempre murmuraba para si mismo que el se equivoco en salvarle la vida pensando que yo no lo escuchaba (tengo buen oído por si no lo has notado padre), también me decía de que el si era digno de ser llamado padre.... la segunda era su primera esposa Silphie, siempre me decía que ella lo amaba incondicionalmente incluso cuando dijo que quería tomar una segunda esposa, y al igual que con las siguientes siempre decía que era la mujer más hermosa del mundo (claro padre después de que una noche muy borracho me dijiste que la confundiste con un chico dos veces claro) hasta el día de hoy no superó el cómo murió (en serio jódance nobles de Asura), la tercera era su segunda esposa Roxy, dijo que fue su maestra de magia, era de la que con más respeto hablaba, dijo que ella lo ayudó a superar uno de sus mayores traumas y como nunca se imagino que terminaría casado con una diosa como ella, pero al igual que todo lo bueno en la vida de mi padre fue arruinado por Hitogami...... la última era Eris, decía que era fuerte, leal, talentosa y hermosa, dijo que poco después de su muerte él me encontró.... tal vez por eso nunca me dijo que era tan impulsiva y irascible, nunca hubiera esperado un ataque sorpresa por parte de ella si no hubiera sido por lo que leí en el diario.

En conclusión padre, sé que no estás escuchando esto porque a diferencia de ti yo no murmuro. ¿Pero qué otras cosas ocultas sobre tus seres queridos? ¿tu padre acaso tiene algo que lo haga malo? O quizás haya algo en el resto... siempre decías que tu segunda esposa era de las mejoras magas ¿acaso eso es cierto? Después de todo, Eris es bastante diferente en actitud a como la describiste.

Bueno de que sirve todo esto, no es como que pueda decirte algo de esto, seguramente me regañarias por más de media hora.

¿Como lo se?

......

¿Por qué es lo que estás haciendo ahora?

-Y es por eso que debes tenerle respeto a Eris entiendes Bruilard -Concluyó su sermón.

Después de la primera noche con Dead End Rudeus me presentó formalmente, dijo tal como dictaminaba el discurso que nosotros habíamos preparado que me había conocido en Buena y que eramos buenos amigos desde que Rudeus era un niño, también esta vez por mi parte descubrieron el funcionamiento de mi bendición que era la manipulación del oxígeno. Aunque no di muchos detalles debido a que eso podría alargar innecesariamente la conversación, además  podría haceme el genial más adelante diciendo que cuando dije que podia manipular el oxígeno yo me referia a qué puedo hacer casi cualquier cosa con él (no exagero).

Después de eso bajo la excusa de una charla privada entre amigos, nos alejamos del grupo le comenté lo impulsiva que fue Eris a Rudeus, y aquí me ven siendo sermoneado por más de media hora, se verá joven pero sigue siendo el mismo anciano por dentro.

Pero la verdadera razón de todo esto era el muy probablemente evento más decisivo en nuestro viaje al pasado.

¿Que hacer con Orsted?

Mi padre y yo buscamos al dios dragón por mucho tiempo, más nunca lo encontramos, los rumores de en dónde se había visto a este no se esparcían tan rápido como para que pudieramos llegar a tiempo era algo bastante frustrante para mi padre y yo tenía que aguantarme eso, se le pasaba con unas cuantas copas de su cerveza favorita y... una noche desestresante (yo tan bien lo hacía de vez en cuando la verdad).

Habíamos pensado en múltiples escenarios, evitar la pelea fue uno pero rápidamente se descartó debido a que no habría otra probabilidad de hablar con Orsted después, ¿pero cómo le hablaríamos?, adelantarnos al grupo no era una muy buena idea y incluso si funcionaba si ellos al notar nuestra desaparición llegaban y sufrían el efecto de la maldición que comentó mi padre que poseía Orsted muy probablemente todo el plan se vendría abajo.

Hablarle delante de todos desencadenaría revelar nuestra condición, y no es que ninguno de los dos tenga planeado revelar ese tipo de información en mucho tiempo.

No había casi ninguna trayectoria que funcionará, en el momento en el que mencionáramos el mínimo abismo de que conocíamos a Hitogami él nos atacaría sin pensarlo (yo aria lo mismo) y si bien tal vez podríamos repelerlo segun lo que mi padre me comentó de que él no se tomaba muy en serio las peleas contra los apóstoles (nosotros tampoco lo hacíamos la verdad) con lo que me describí a mi padre era más que suficiente para saber de que no teníamos probabilidades de vencerlo.

Claro nuestro objetivo no era vencerlo simplemente queríamos estar de su lado, era el único que sabía lo suficiente sobre Hitogami según lo poco que abia hablado en su pelea con mi padre, pero el problema seguía siendo el mismo....

Cual fue nuestra conclusión.

Dejar que la pelea siguiera su curso natural Ruijerd muy probablemente terminaría noqueado, Eris vencida de un golpe, y cuando llegara nuestro turno apelar a la única persona que podría escucharnos en esa habitación.....

Nanahoshi la amiga de mi padre, claro Orsted no nos daría mucha ventana hací que había que crearla, pero en el momento en el que la crearamos era simple nos pondríamos a hablar en japonés sobre lo que estaba ocurriendo y conversaríamos tácticas de cómo podríamos salir vivos de esta Nanahoshi al escuchar esto debería tener por lo menos una probabilidad de poder detener la pelea al decirle a Orsted de que nosotros muy probablemente también fuimos teletransportados a este mundo, y hacer que nos escuche de ahí en adelante. Lo de comentarle que somos viajeros en el tiempo estará según que tan agresivo siga siendo con nosotros.

Sí muestra demasiados ostilidad lo mejor será decirle que uno de los consejos de Hitogami casi nos mata y que estábamos buscando una manera de llegar hasta él para vengarnos, de esa manera deberíamos tener alguna ventana está claro que una alianza no puede ser unilateral así que que si todo salía bien muy probablemente Orsted nos pedirá algunas cosas, pero será en ese momento en donde entre la carta trampa de "es que verás tenemos familiares perdidos y necesitamos encontrarlos y todo eso" le pediremos que nos dé tiempo y de esa manera lograremos tener una alianza que se formalizará en unos años, y en esos años ocurrirán los eventos que aunque mi padre sigue dudando deben ocurrir (tendras a tus esposas devuelta padre), sé que no parece el mejor plan pero fue el único que se nos ocurrió es imposible vencer a Orsted o encontrar una ventana de conversación lo suficientemente grande como para comentarle toda lo que tenemos que comentarle.

Y si todo esto falla tiro mundo muerto y sálvese quien pueda.

-Lo de Orsted será pronto Bruilard -El me miró directamente-¿Estás preparado?

-Incluso si esto nos mata estaré feliz de haberlo intentado padre.

-Recuerda llamarme Rudeus o si quieres hermano delante del resto por favor -Dijo algo agotado.

-Entendido pa-hermano.

Aún así no es que estemos a unos dos días de ese momento crucial, así que por ahora será divertido pasar el tiempo con Dead End.

Chapter Text

Narrador

[Años atras]

El campo de batalla se encontraba desolado, múltiples cuerpos de bandidos esparcidos por el suelo, obsolutamente todos con el rostro de color azul debido a la falta de oxígeno.

-Tu "mundo muerto" sin duda se a vuelto mucho más poderoso.

Rudeus en ese momento de cincuenta y cinco años comentó mirando a un Bruilard de veinte años que ni siquiera mostraba un ápice de cansancio y su apariencia apenas abia cambiado por el paso de los años.

-Recuerdo que cuando lo hacías antes la tensión te dejaba bastante mal.

-Gran parte de eso se fue a los dieciseis padre.

Rudeus negó ante la palabra "padre", el no era merecedor de ser llamado haci después de defraudar a su familia y a sus amigos.

-Si lo se pero eliminabas el oxígeno en una escala mucho menor.

-En eso tienes razón.

Concluyó Bruilard mientras el junto a Rudeus se alejaban del campo de combate.

-Es una nueva victoria para los "Asesinos Mundiales" -Dijo Bruilard con una sonrrisa y un tono de emoción que tenia un aire infantil que no se le despegaba.

Rudeus negó ante este apodo para su dúo. Después de que Bruilard venciera al Dios de la muerte hace un año, la gente empezó a llamar a su dúo los "Asesinos Mundiales" con forma de aclarar que dos de las siete personas más fuertes del mundo lo conformaban.

-Ya te dije que no nos llamamos haci.

-¿Qué? -Eso corto su emoción -¡¿Pero padre?! ¡Absolutamente todos nos llaman haci!

-No me importa.

-Vamos.... ¡suena genial!

Rudeus solo pudo suspirar, ahora era muy conocido el cómo el Dios mago y el Dios bendito formaban equipo. Aunque muchos no creían que Bruilard fuera en verdad alguien merecedor de un título haci por ser tan joven.

Lo que llevo a Bruilard a destruir la casa de quien le dijo eso usando su "corte fantasma" una habilidad en donde comprime el oxígeno con una forma de corte, luego lo libera a una enorme velocidad generando un golpe rápido y casi invisible.

Lo que también les llevo a una mala fama, bastantes les tenían un enorme miedo, Rudeus también obtuvo la fama de que él era quien contenía el Dios bendito, diciendo que si no fuera por él este último estaría destruyendo pueblos a su paso.

Lo que aveces parecía cierto para Rudeus cuando tenía que salvar a las tiendas de dulces de la ira de Bruilard cuando le daban un dulce que no le gustaba. Su supuesto hijo era un maldito obsesivo con los dulces hasta que cumplió diecinueve años, edad a la que esto desapareció casi como si nunca ubiera existido (Rudeus sigue sin saber porqué).

Realmente la vida de Rudeus abia dejado de ser monótona desde que Bruilard se unió a sus aventuras, era muy difícil que su vida fuera monótona si este supuesto Dios bendito se la pasaba metido en problemas.

Como cuando una de las pocas veces en las que Rudeus se atrevió a ir a Millis solo para que Bruilard se enamorara del pastel de frutas de este lugar, casi terminan siendo perseguidos por la iglesia una vez más cuando Bruilard llamó demasiado la atención por querer más de este pastel.

Bueno decir casi es ser optimistas, debido a que tuvieron que arremeter contra múltiples soldados y volverse enemigos de Millis otra vez lo que ocasióno que les mandaran muchos soldados. Y valla que la gente de Millis era terca, primero fueron diez soldados, luego cien soldados, después mil soldados y ya para el último Rudeus tuvo que usar magia de rango Rey para que los dejaran en paz por un tiempo.

Fue un tremendo alivio para Rudeus  ver como esa etapa se iba de Bruilard....

Y nació el asesino frío y sin alma que era actualmente, pero con sus momentos divertidos como el que está teniendo ahora.

A diferencia de Rudeus a Bruilard le encantaba el título de "Asesinos Mundiales" decía que era demasiado genial y que se lo merecían después de haber trabajado tanto matando apóstoles. Peo para Rudeus simplemente le parecía algo que les hacía llamar demasiado la atención. Además de que ser reconocido como asesinos no les daba una muy buena imagen que digamos.

Ya bastaba con la reputación que tenía el Dios bendito por su etapa en donde cumplía favores a cambio de dulces de muy buena calidad acabando con la competencia de muchas.... pero muchas.... tiendas de dulces, o robando monedas de oro manipulando el oxígeno para que éstas llegaron a él normalmente robándoselas a algún pobre mercader que había perdido la vista de su dinero siendo usadas para pagar los dulces.

La frase "El Dios bendito te debe un favor, pide lo que quieras" se volvía tanto codiciada como temida por algunos.

Después de todo esas etapas de obsesivo de dulces finalmente había preferido priorizar su entrenamiento trabajar técnicas como: mundo muerto, mundo puro, corte fantasma, cadena fantasma, una de las más recientes prisión eterna, o incluso intentar caminar por el aire solidificando el oxígeno que estaba debajo de sus pies.

Solidificar el oxígeno era algo que al principio le parecía imposible a Rudeus, pero por lo que parecía tal como Bruilard siempre decía él no veía el verdadero potencial que tenía este elemento de la tabla periódica. Según Bruilard lo único que el tenia que hacer era imaginar al oxígeno como algo tangible, Rudeus supuso que inconscientemente obligaba a los átomos de oxígeno a juntarse, y de esa manera formando una superficie sólida.

-Ya te dije que eso nos hace llamar demasiado la atención.

-¿¡Cuanta gente con cabello blanco conoces!? ¿¡¡Y cuantas de estas acompañan a su padre a todos lados!!? -Sus preguntas más que preguntas parecían acusaciones -¡Me reconocerán de todas formas!

Rudeus solo agarro la capucha de Bruilard y se la puso, ocultando su cabello.

-Listo -Aparto sus brazos de la capucha.

-Mhp -Soltó frustrado.

Rudeus sabía que esto no servía de mucho, pero por lo menos se calmaria un rato.

Bastantes rumores corrían sobre la relación que tenían Rudeus y Bruilard. Al principio todo el mundo pensó que era su discípulo, pero fue descartado al ver como Bruilard era en su mayoría un espadachín, pero se corrió la voz de que Bruilard llamaba padre a Rudeus a lo que muchos se preguntaron una sola cosa...

¿Quien era su madre?

Por lo menos en Sharia la gente sabia sobre las tragedias que asotaron a los Greyrat, entre ellas las muertes de las esposas de Rudeus Greyrat como de gran parte de sus seres queridos y de su única hija.

Algunos llegaron a pensar que podría ser hijo de Silphie debido al cabello blanco, pero fue descartado, el joven no tenía rasgos de ser mitad elfo y sus ojos eran de color gris a diferencias de los ojos rojos de Silphie. Esas características también lo alejaban de ser hijo de su segunda esposa Roxy.

Por lo que bastantes decidieron pensar que era un hijo ilegítimo, o un hijo adoptivo.

Esto no molestaba a Bruilard, cualquier cosa, que lo hiciera sentir más cerca de su padre lo hacía feliz.

-Matemos al apóstol de Hitogami y vallamos por una cerveza -Concluyó Bruilard después de su momento de frustración.

-Si vuelves a tomar de más nos van a.....

Antes de que Rudeus terminará su frase un cuchillo salió volando hacia su rostro, Bruilard casi por puro instinto solidifico el oxígeno para proteger a su padre. El cuchillo no logro atravesar la defensa.

Después de Bloquear el proyectil con éxito Bruilard lanzaría un "corte fantasma" de inmediato.

"PUM"

La mayoría de los árboles salieron volando, el corte se detuvo al poco tiempo debido a que Bruilard no lo abia cargado.

-¿Esta muerto Bruilard?

-No -Negó con la cabeza -Sigo sintiendo su respiración.

El apóstol se abia salvado de puro milagro, pero no tendría tanta suerte. Mientras pensaba en que abia sido lo que abia detenido su ataque sorpresa empezó a sentir una enorme presión en el aire. Este intento seguir moviéndose mientras todavía se ocultaba, pero sintió como una enorme presión lo envolvió casi como si estuviera en medio de dos paredes que iban cerrándose de apoco.

El apóstol trato de liberarse pero ya era tarde, lo único que se escucho de él fue un grito seguido del crujir de sus huesos al romperse y su cuerpo terminó aplastado al punto de quedar irreconocible.

-¿Ahora si esta muerto? -Pregunto Rudeus con indiferencia casi como si esto fuera una rutina y no el acto de acabar con la vida de alguien.

-Si -Asintió -Una vez alguien queda atrapado en el "sello mortal" si no tiene una forma de romperlo morirá -Dijo mientras se volvía a concentrar en la perturbación en el oxígeno que ocasiona una persona al respirar ya no sintiendo nada.

El "sello mortal" también es una técnica de manipulación de oxígeno, en donde en una pequeña área el objetivo es rodeado por paredes de oxígeno solidificado que toman la forma de un cubo que se va encogiendo de a poco hasta que se cierra por completo, asesinando de una manera lenta y dolorosa pero asegurándose de que la víctima esté muerta. Esta técnica fue creada para cerciorarse definitivamente de que el enemigo esté muerto, ya que si son lo suficientemente habilidosos pueden engañar la perturbación que puede sentir Bruilard en el oxígeno cuando alguien respira.

Muchos llamarían a esta técnica cruel pero Bruilard simplemente la llama práctica, y a Rudeus tampoco le importa, mientras cumpla su propósito de matar apóstoles, Rudeus lo aceptara.

-Ahora... -Dijo Bruilard mientras una pequeña sonrrisa se formaba -Respecto al nombre de nuestro dúo....

-No nos llamaremos "Los asesinos mundiales"

Bruilard se quedó en silencio, mientras el aire a su alrededor se elteraba debido a las perturbaciones que ocasionaba su estado de ánimo.

-Pero te dejaré beber de más solo por esta vez.

Esto le saco todo el mal ánimo a Bruilard y este sonrío de oreja a oreja.

-¡Que esperamos entonces!

Bruilard jalo de la manga a Rudeus casi arrastrándolo. Mientras Bruilard lo arrastraba de vuelta a la ciudad, Rudeus volvió a ver a ese joven inquieto que era Bruilard en su juventud.

Rudeus no sabía porque alguien como Bruilard, alguien que si bien en estos últimos años se comportaba de manera fría, fuera de los momentos de asesinato se mostraba como un joven adulto alegre y animado se obsesionaba por estar junto a él, incluso al punto de llamarlo padre.

Rudeus abia cometido incontables errores en lo que se supone era su segunda oportunidad, pero Bruilard parecía recordarte que no todo estaba perdido.

Rudeus mientras seguía siendo arrastrado recordó una vez más su juramento.

'Lo mataremos juntos Bruilard' pensó mientras una pequeña sonrrisa se formaba en su rostro.

Chapter Text

Narrador

[Presente]

Después de la charla sobre Orsted, Rudeus decidió comprobar algo.

-Dime Bruilard -Bruilard lo miro con interés -¿Comprobaste como estás física y mentalmente?

Bruilard asintió -Tal como dictaba el plan lo hice y tal como se esperaba no soy tan fuerte como antes.

-¿Cual es tu estado? -Pregunto con seriedad.

-Verás......

Los próximos minutos se dedicaron de Bruilard comentando sus rangos en los tres tipos diferentes de esgrima.

Dios de la espada estaba en rango santo, el estilo del Dios del agua esta en la misma situación, en el caso del Dios del norte para sorpresa de Rudeus el rango era rey y a palabras de Bruilard ya casi un emperador.

-Ya veo... -Rudeus se llevo las manos al mentón adoptando una pose pensativa.

-Lo siento si es decepcionante pa-hermano.

Rudeus negó rotundamente las palabras de Bruilard.

-Es más que perfecto por ahora Bruilard -Dijo mientras ponía una mano en su cabeza, aunque ya no de la misma manera paternal debido a que ya no había una diferencia grande de estatura -Como espadachín esto del viaje en el tiempo sin duda te afecto más. -Le dio una sonrrisa tranquila a Bruilard para animarlo -Como esta el resto -Con eso aparto su mano de la cabeza de Bruilard.

-Pues mentalmente.... -Se le notaba algo preocupado -Me siento algo raro últimamente pero tal vez solo estoy asimilando esto todavía -Bruilard despejo su cabeza para sentarse en lo que ahora era importante -Mis habilidades de manipulación de oxígeno se mantiene casi igual pero.... la tensión, y el cansancio que se sufre al usarlas ha aumentado considerablemente si hablamos de las más fuertes... ya no puedo usar prisión eterna.

Rudeus asintió esperando que continuará.

-Como pudiste notar mi "muerte silenciosa" esta igual y mi magia esta comosiempre.... -Bruilard busco en su mente algo más pero no lo encuentro- Creo que eso es todo.

Rudeus asintió pero dentro de él algo lo inquietaba, sabía que si bien tenían un plan, el enfrentamiento con Orsted pondría en riesgo principalmente la vida de los dos. El debía de asegurarse de que Bruilard estuviera preparado.

-Bruilard -El tono serio alertó un poco a Bruilard -Confío en lo que dices pero debo de estar seguro.

Mientras decia esas palabras, él se alejó un poco de Bruilard y entonces desenrrollo a su "Aqua Heartia" y lo apunto hacia Bruilard.

-Quiero que tengamos un duelo Bruilard -Su mirada reflejaba seriedad.

Las palabras de Rudeus perforaron a Bruilard de una manera excepcional, la emoción empezó a crecer dentro de su interior como una pequeña braza que se extendía a pasos agigantados. En el pasado este sería el enfrentamiento entre dos de las siete grandes potencias, pero ahora era un simple duelo entre hermanos no sanguíneos, y eso de alguna forma solo emocionó más a Bruilard.

-Claro que si hermano -Bruilard desenvaino lentamente su espada -No te contengas por favor.

Rudeus sonrió con ironía.

-No pensaba hacerlo.

Rudeus empezó a conjurar tres de sus "cañones de piedra" todos giraban de una manera excepcional para haci aumentar su velocidad.

Y el duelo empezó...

Rudeus disparo rápidamente sus cañones de piedra, Bruilard sabía que en su estado actual desviarlos no era una opción por lo que tenía que esquivar.

El primero fue fácil pero los otros lo rozaron casi haciéndole un daño considerable, pero Rudeus no paro hay y cuando Bruilard estaba reposiciónandoce Rudeus conjuro múltiples "Lanzas de tierra" que salieron del suelo.

Bruilard saltó entre las lanzas y cortaría algunas que no podía evadir con cortes limpios. Después Bruilard se apoyaría en la última de las lanzas para saltar hacia arriba, sabía que Rudeus se aprovecharía de cualquier posición que el tuviera, era un veterano con años de experiencia después de todo. Pero hundirse en el suelo por el hechizo "Pantano" de Rudeus no era muy alentador por lo que por ahora se mantendría en el aire.

Empezó a comprimir el oxígeno y aún en el aire lanzó su "corte fantasma" hacia Rudeus, Rudeus retrocederia rápidamente, gracias a su ojo de previsión podía ver el movimiento de Bruilard antes de que el propio Bruilard los hiciera.

'Su velocidad aún haci es sorprendente debo tener cuidado' pensó Rudeus.

'Debo acercarme a como de lugar' pensó Bruilard mientras caía de las alturas.

Nada más tocar el suelo, Bruilard usaría su "muerte silenciosa" para desaparecer de la vista. Pero Rudeus ya sabía lo que venía, nada más Bruilard apareció en su espalda este último notó como uno de sus pies se hundía en el suelo. Rudeus había conjurado un "pantano" a su alrededor para atraparlo.

-Parece que esto ya....

Antes de que Rudeus terminará su frase, sus ojos se abrieron con sorpresa cuando el otro pie de Bruilard, aquel que todavía no tocaba el suelo no se hundió en el suelo y en su lugar parecía que su pie estaba pisando el aire.

-Sabía que usarías ese hechizo hermano -Bruilard sonrió.

El había solidificado el oxígeno de una parte del suelo nada más notó que uno de sus pies se hundía, haciendo que su otro pie nunca se hundiera en el "Pantano" y usando este otro pie como apoyo para sacar el otro.

Rudeus sabía que enfrentarce a Bruilard en un combate directo era un suicidio, por lo que canalizó su mana en la mano que no sostenía a "Aqua Heartia" para conjurar un rápido "sonic boom"

Para suerte de Rudeus, Bruilard no lo pudo alcanzar con su espada antes de que la enorme onda de aire lo alejara unos metros, Rudeus aprovecharía esto para retomar su distancia y apuntando su bastón al Bruilard que se estava recomponiendo y lanzado su "Electric" potenciando gracias a "Aqua Heartia"

El rayo más nunca alcanzó a Bruilard, este último solidificando el oxígeno delante de él para formar una barrera. El rayo casi la rompería pero le faltó potencia. Bruilard no tuvo tiempo cuando más hechizos de todo tipo lo atacaron rompiendo fácil la barrera.

Bruilard recibiría heridas menores, y activarla su "muerte silenciosa" otra vez.

Rudeus estaba atento con su ojo de previsión, y noto las cadenas de oxígeno que salían del suelo. Rudeus se protegería detrás de "Lanzas de tierra" para ganar tiempo mientras ponía una de sus manos en el suelo para conjurar un pilar de tierra para salvarse de como Bruilard las llamaba "cadenas fantasma", estas serían imposibles de esquivar para Rudeus sin su ojo de previsión, pero Rudeus desde hace tiempo había notado de que no podían elevarse más de cuatro metros más pequeños que el pilar.

Más el ataque de Bruilard no había terminado, el estaba en la espalda de Rudeus una vez más abiando trepado aprovechando las salientes del pilar, se habia impulsado hacia arriba y cuando se encontraba a espaldas de Rudeus había solidificado el oxígeno para poder desatar una "Espada larga de Luz"

Pare que Rudeus estava acorralado hasta que....

-No otra vez...

Se quejo Bruilard mientras veía como la magia de gravedad de Rudeus lo detenía lo suficiente como para que Rudeus apuntara su bastón hacia el preparando su "Electric"....

Pero Bruilard no se quedaría de brazos cruzados.

Rudeus vería como su propio cuerpo lo traicionaba, haciéndolo apuntar su bastón a una dirección a una distancia minima de la original, pero lo suficiente como para fallar.

Bruilard abia usado toda su concentración para sentir el oxígeno dentro de Rudeus para mover aunque sea un poco su mano, esta técnica se llamaba "manipulación corporal", en su mejor época Bruilard apenas necesitaba esfuerzo para usarla, pero desde el viaje en el tiempo había notado de que esto era ahora muy diferente. Se necesitaba de mucha concentración sobre todo en una situación tan movida como un duelo.

Rudeus cancelaria su hechizo, y Bruilard volvería a intentar atacar, pero ahora que Rudeus no tenía que dividir su concentración en dos hechizos pudo centrarla toda en su magia de gravedad para lanzar a Bruilard lejos del pilar. Bruilard trataría de resistir pero era inútil.

Salió en caída libre hacia abajo, mientras Rudeus saltaba del pilar y cayendo bien.

-Ventajas de ser joven -Murmuro Rudeus para si mismo.

Por su parte Bruilard abia logrado salvarse un poco del daño al rodar por el suelo.

El pilar se deshizo y una vez Rudeus y Bruilard se recompusoeron ambos se miraron directamente.

-Veo que se te está complicando Bruilard.

-No soy... tan... rápido con el oxígeno como antes -Dijo entre jadeos.

-Bueno aun tengo algunas cosas que comprobar haci que.... -Rudeus reajuste su agarre sobre su bastón y le sonrrio a Bruilard -Sigamos.

-¡Si!

Ambos se prepararon.

'Quiero ganar' pensó Bruilard

Tras esa breve pausa, Rudeus vio que Bruilard, a pesar del cansancio que había acumulado, tenía un brillo en los ojos, una chispa que Rudeus reconocía como la voluntad de no rendirse, aquella que le hizo ganarse su respeto.

Rudeus avanzó con una ráfaga de "Lanzas de tierra", esta vez mucho más rápidas y cercanas entre sí para probar la resistencia de Bruilard. Bruilard se movía con precisión, desviando algunas con cortes de su espada y esquivando las demás, cada vez que el filo de una lanza se acercaba demasiado a su piel.

Pero Rudeus no le dio tregua. Aprovechando que Bruilard estaba completamente enfocado en defenderse de las lanzas, Rudeus lanzó su "sonic boom" pero en lugar de apuntar a Bruilard el lo lanzó al suelo, creando una cortina de polvo y tierra que obstruyó la visión de Bruilard.

'No puedo perder el ritmo,' pensó Bruilard mientras se preparaba para contraatacar, comprimiendo el oxígeno a su alrededor para lanzar otro Corte Fantasma para destrozar la cortina de polvo. Sin embargo, en el último instante, sintió una amenaza y, siguiendo su instinto, detuvo su ataque.

Desde la nube de polvo, surgieron múltiples Cañones de piedra que Rudeus había conjurado sin descanso. Bruilard saltó hacia un lado, rodando para evitar el impacto directo, pero uno de los cañones lo alcanzó, lanzándolo unos metros.

A pesar de la punzada de dolor, Bruilard se levantó rápidamente, jadeando pero determinado.

-¡Hermano, voy en serio! -Grito Bruilard, mientras solidificaba el oxígeno a su alrededor para formar una serie de "Cadenas Fantasma". Al lanzarlas, estas se movieron con precisión hacia Rudeus, que retrocedió con rapidez.

Rudeus usó su Ojo de Previsión para anticiparse al movimiento de las cadenas, esquivando algunas y deshaciéndose de otras con sus hechizos. Aprovechando la distracción, Bruilard se acercó rápidamente, desvaneciéndose de la vista una vez más con su "Muerte Silenciosa"

Rudeus, consciente de que Bruilard intentaría aparecer cerca de él, concentró su mana preparándose, cuando Bruilard apareció se encontró de nuevo con la magia de gravedad formando algo parecido a una burbuja alrededor de Rudeus evitando que se acercaba, cosa que le hizo recordar a Bruilard su primer encuentro con Rudeus. Pero no tuvo tiempo para la nostalgia cuando otro "sonic boom" lo empujó hacia atrás.

-No es tan fácil sorprenderme, Bruilard -dijo Rudeus, ajustando su posición y preparándose para otro hechizo.

Sin perder un segundo, Bruilard condensó el oxígeno y lanzó un de sus viejas técnicas "torrente puro" convirtiendo el oxígeno en un líquido y bajando su temperatura para crear una ráfaga gélida que se lanzó hacia Rudeus como una corriente afilada e imparable. La técnica hizo contacto, dejando una estela helada en el suelo donde Rudeus se había movido.

Rudeus, ya con varias heridas menores y sintiendo el desgaste, no pudo evitar una sonrisa.

-Tienes talento, Bruilard, aunque ahora lo estás recordando todo, ¿cierto?

Bruilard asintió con una mirada decidida, aunque el agotamiento era evidente. A pesar de sus limitaciones actuales, había podido resistir y presionar a Rudeus.

-Por supuesto, hermano. Aunque mi fuerza ya no sea la misma.

-Incluso con las limitaciones que te dejó el viaje en el tiempo... Has demostrado que sigues en forma, y sin duda eres mucho más fuerte de lo que eras a esta edad -Elogio Rudeus -Pero creo que es hora de poner fin a esto.

Bruilard respiró hondo, su cuerpo entero se sentía agotado, pero una chispa de determinación seguía brillando en sus ojos.

-No estoy listo para rendirme todavía, hermano -contestó, estabilizando su respiración mientras apretaba su espada con fuerza.

Rudeus asintió y preparo su bastón.

Era momento de él intercambio final.

La sensación nostálgica rodeo a Bruilard y decidió ocupar uno de sus viejos trucos.

-Como en los viejos tiempos no -Bruilard llevo el mango de su espada a su boca, y se agacho, posicionándose a cuatro patas.

-Vas con todo no -Dijo Rudeus preparando más "cañones de piedra" y "cañones de agua" -Pues entonces te responderé con igual fuerza.

Bruilard no respondió, debido a la espada en su boca, pero no podría estar más emocionado por esa declaración.

Rudeus disparo en rápida sucesión, pero cada uno era esquivado, Bruilard se movía como una bestia en plena cazeria, guiada casi por puro instinto.

No tardo en estar cerca de Rudeus, este utilizaría un "muro de tierra" para defenderse, Bruilard lo destruyó con la espada de su boca sin dificultad pero noto como el muro abia sido sustituido por otro rápidamente.

El volvería a destruirlo pero justo detrás le espera un "erizo de tierra" el cual surgió del suelo en forma de múltiples espinas, si no fuera por la velocidad que le daba este estilo Bruilard ubiera perdido. Pero pudo esquivarlo, estaba claro que Rudeus no le dejaría acercarse, en el estilo a cuatro patas Rudeus no tendría forma de activar su magia de gravedad a tiempo.

'Acaso en este estado podre usar eso' se preguntó Bruilard internamente 'vale la pena intentarlo' concluyó volviendo a su frenesí.

Tomando impulso Bruilard saltó hacia arriba todavía en cuatro patas, parecia que no iba a ningún lado pero en ese momento sus pies tocaron algo sólido sólido pleno aire. Abia solidificado el oxígeno en un camino recto hacia Rudeus, hacer esto le costaría gran parte de sus fuerzas, pero era eso o nada.

Corrió a gran velocidad y en ese momento lo vio, Rudeus estava jadeando mientras su mirada se fijaba en los múltiples "muros de tierra" que abia conjurado, cada uno era más grueso que el anterior esperando de esa manera retener a Bruilard. Pero Bruilard ya estaba sobre el.

Escupiendo la espada de su boca a su mano, y adoptando una postura más estándar se preparo y saltó. Estava seguro de que Rudeus no se lo esperaría.... sin embargo....

-Yo también abría ido por arriba Bruilard -Dijo con calma y una sonrisa engreída mientras miraba directamente a Bruilard.

Antes de que Bruilard procesará lo que pasó, este noto como múltiples "cañones de piedra" que se abian ocultado en el suelo salían disparados hacia el.

-¡Mierda! -A Bruilard le abia quedado claro de que Rudeus solo invoco los muros para que se confiara y haci poder acorralarlo.

Bruilard bloqueo lo mejor que pudo en el aire pero estaba recibiendo múltiples heridas, y concentrarse en los "cañones de piedra" hizo que no se fijara en el potente "Electric" que Rudeus estava por lanzar. El hechizo se lanzó con un zumbido ensordecedor debido a la potencia y que Bruilard no pudo desviar ni bloquear.

Bruilard sabía que abia perdido, haci que por lo menos quería minimizar el daño, convirtió el oxígeno que estava debajo de él en un líquido rápidamente y de esa manera salvándose de algo del daño de caída.

Bruilard volvió el oxígeno a su estado original, mientras veía con resignación la herida que quedó del "Electric" de Rudeus.

-Perdí -Fue lo que dijo de manera apagada -De verdad quería ganar.

Fue lo que dijo mientras se acomodaba en el duro suelo, lo único que podía esperar ahora era que Rudeus viniera a curar sus heridas.

Rudeus miraba desde lejos al Bruilard caído, por un momento se olvido de su análisis objetivo y solo sonrió con orgullo por el desempeño de Bruilard.

-Estamos listos -Fue su conclusión.

Estaba claro que Bruilard nunca usaría su "Mundo muerto" contra el, y tener ese recurso era bueno, si bien la pérdida de "Prisión eterna" era importante no era nada de vida o muerte.

Cuando llegara el momento estarían más que listos.

Chapter Text

Narrador

Mientras Bruilard (ya curado) y Rudeus volvían al campamento, Bruilard volvió a recordar el pasado, sobre todo una cosa en específico.

-Si ubiera tenido a Kahakut ubiera ganado -Intento rescatar un poco de su orgullo herido.

Ante esto, Rudeus levantó una ceja. Mientras recordaba vagamente.

-¿Hablas de la espada del Dios del norte que te regale para tu cumpleaños? -La pregunta era retórica pero hizo que ambos volvieran al pasado.

Llevaban poco siendo compañeros de equipo, apenas unos meses, Bruilard ni siquiera y empezado llamar padre a Rudeus. Más Bruilard cumpliría años pronto, para ser exactos quince años.

Y Rudeus encontró a alguien, a quien darle la espada que abia sido un peso en su equipaje. Si bien el podía usar la espada, no había tanta diferencia en la magia de gravedad a excepción de ser más rentable en el uso de mana, blandirla le era difícil y en si no podía sacarle provecho.

Entonces recordó que Bruilard abia salido de la posada, para salir a comprar dulces como auto regalo de cumpleaños. Entonces decidió sacar la espada de su equipaje, y la puso en una linda caja que construyó con magia de tierra, adornandola con algunas piedra preciosas también echaz con magia de tierra. Esto le hizo recordar los tiempos en donde hacía muñecas, ya sea solo o con Zanoba y Julie.

Cuando Bruilard volvió y vio el regalo, y cuando lo abrió Rudeus pudo ver estrellas en sus ojos, levantó la espada y sorprendiendoce ligeramente por el peso. Kahakut era una espada enorme, y Bruilard si bien no era pequeño tampoco era tan alto como Rudeus (de hay que el pueda acariciarle la cabeza de manera paternal).

Más también sintió un extraño poder venir de la espada, en ese momento Rudeus le explicó como funcionaba la espada y la magia de gravedad y si bien Bruilard no lo entendió del todo, aria que Rudeus no se arrepintiera de habérsela regalado. Por su lado Rudeus recordó el cómo Paul abia echo lo mismo con el, pero en su cumpleaños número cinco.

-Es curioso que digas eso cuando nunca aprendiste a usarla del todo. -Se burlo Rudeus.

-Nunca fui el mejor para la magia de gravedad -Argumento -Aún haci la extraño fue un regalo muy especial.

Rudeus río suavemente.

-Pues si la quieres devuelta tendrás que matar al Dios del norte.

-No se si podría hacer eso en mi estado actual sinceramente.

-Estoy seguro de que no podrías.

-Gracias por el voto de confianza hermano -Se burlo Bruilard.

-Solo lo digo para que tengas cuidado -Concluyó Rudeus -Deberíamos apurarnos en volver con Ruijerd y Eris, ya está anocheciendo.

Ambos miraron el cielo nocturno, estaba lleno de estrellas. Rudeus pensó que era una de las ventajas de que en este mundo no ubiera contaminación lumínica. Bruilard por su lado solo las apreciaba, pero también sintió algo más....

¿Alivio?

Eso era raro, no tenía muchas razones para sentirse aliviado ahora mismo. Después de todo acababa de perder hace poco.

'Ahora que lo pienso me e sentido raro desde el viaje en el tiempo' pensó Bruilard, pero no encontró respuestas 'Bueno, sea lo que sea, si no me impide pelear no debe ser tan importante' eso elimino su liña de pensamiento.

Rudeus no notaria esto, su mente ocupada en pensar en todas las fases del plan que se debían cumplir.

Mientras caminaban, el silencio entre ellos se llenó con el sonido de sus pasos sobre la hierba. Bruilard, aún perdido en sus pensamientos, no pudo evitar preguntarse sobre el extraño sentimiento de alivio que sentía pero aún restandole importancia.

De repente, Rudeus rompió el silencio.

-¿Recuerdas la primera vez que usaste Kajakut en combate? -preguntó con una sonrisa nostálgica.

Bruilard asintió, recordando claramente aquel día. -Sí, fue contra ese grupo de bandidos en el bosque. Estaba tan nervioso que casi dejé caer la espada.

Recordó con algo de vergüenza, la espada era difícil de manipular, y también de blandir. Si bien abia entrenado con ella bajo la mirada de Rudeus, eso no quito su nerviosismo, ante una amenaza mínima para alguien como el.

Rudeus se rió un poco. -Pero al final, lo hiciste bien. Siempre has tenido un talento natural para adaptarte a las situaciones.

Bruilard sonrió ante el cumplido, pero su mente seguía dándole vueltas a sus recientes sensaciones. -Hermano, ¿has sentido ultimamente que algo no está bien contigo, pero no puedes identificar qué es?

Rudeus lo miró con curiosidad. - ¿A qué te refieres?

-Desde el viaje en el tiempo, he sentido algo… diferente. No sé cómo explicarlo, pero es como si algo dentro de mí estuviera mal o... fuera de lugar.

Rudeus frunció el ceño. - El viaje en el tiempo no es algo que deba tomarse a la ligera. Puede tener efectos secundarios que no comprendemos del todo. Debes tener precaución.

Bruilard asintió. Mientras tanto, decidió centrarse en lo que podía controlar: su misión.

-Tienes razón. Pero por ahora, debemos concentrarnos en nuestro objetivo. No podemos permitirnos distracciones -Bruilard le dio fin al tema.

Rudeus asintió, y ambos continuaron su camino hacia el campamento, donde Ruijerd y Eris los esperaban. Bueno por lo menos Eris estaba esperando a Rudeus.

Bruilard no podía evitar sentir una pasión que solo abia sentido en su juventud, aquel deseo de querer seguir mejorando. Cuando llegó al rango Rey en los estilos del Dios del agua, y el Dios de el espada se sintió conforme, después de todo la mayoría de apóstoles eran débiles y Kajakut era un arma que se valía por sí sola, y aveces el mataba a los apostoles sin siquiera desenvainar su espada gracias a la magia de Rudeus o a su manipulación del oxígeno.

Ahora sentía que quería llegar incluso más lejos, volverse alguien que fuera digno del orgullo de su hermano. Y eso lo llenaba de una sensación de propósito.

.......

.......

......

Mientras Rudeus y Bruilard acercaban al campamento, las luces y chispas del fuego comenzaron a parpadear a lo lejos. Eris estaba sentada cerca del fuego, afilando su espada, mientras Ruijerd vigilaba los alrededores con su habitual seriedad.

¡Ya era hora! -exclamó Eris al verlos llegar. -Pensé que nunca volverían.

Rudeus sonrió. -Solo estábamos recordando viejos tiempos. ¿Todo bien por aquí?

Ruijerd asintió. -Todo tranquilo. Pero deberíamos descansar. Mañana será un día largo.

Bruilard se sentó junto al fuego, sintiendo el calor reconfortante en su piel. Mientras observaba las llamas danzantes, sintió denuevo ese extraño alivio, como si él calor de la fogata fuera algo de lo más reconfortante.

Era algo de lo que se debería preocupar más adelante. Observo como Rudeus se ponía a hablar con Ruijerd y Eris de cosas triviales, o experiencias pasadas. El podia sentir la felicidad de Rudeus atravez de la forma en que respiraba, casi nunca lo veía tan feliz y las pocas veces que lo veía tan feliz era cuando estaba borracho. La imagen entre el Rudeus anciano algo amargado al que llamaba padre, y la figura de el Rudeus que ahora era joven y parecía lleno de vida era un enorme contraste.

El mentiría si dijiera que no extrañaba a el viejo Rudeus, aquel anciano que le inspiraba confianza y sabiduría. Pero, estaba claro para el que Rudeus sería más feliz si esa versión de sí mismo fuera solo un mal sueño.

Cuando leyó el diario las primeras páginas reflejaban como Rudeus era feliz con la vida que llevaba, sus dos esposas, su hija Lucy, sus dos hermanas, y Lilia y su madre Zenith. Llendo a la universidad de magia, compartir tiempo con sus amigos como Zanoba o Cliff, y luego volver a casa.

Era algo que era tan lejano con la vida que llevaba antes y después de conocerlo a él. Matando casi todos los días, buscando pistas sobre Hitogami que se escapaban como arena entre las manos, teniendo enemigos por todas parte y todas las personas que alguna vez amo estando tres metros bajo tierra, algunas por su propia culpa.

Pero al avanzar en su diario y llegar a la parte en donde se conocieron.... al principio casi todos eran quejas. Mencionaba lo mucho que le molestaba cuando causaba problemas por su amor desmedido por los dulces, también lo que pasó cuando por su obsesión por el pastel de frutas de Millis iso que se volvieran enemigos de la iglesia de Millis otra vez (Bruilard, por alguna razón al recordar esto se sentía indignado, como si no le gustara que criticaran su amor por los dulces pero no entendía porque se sentía así), y más y más quejas. Tanto que ignoro por completo las páginas que no empezaban por "Hoy Bruilard iso X cosa que nos metió en problemas" pero cuando su mente racionalizó que no debería solo ver las opiniones negativas que tenía Rudeus sobre él, y decidió leer algunas páginas que lo mencionaban que se saltó.

En estas páginas se detallaban momentos que Bruilard recordaba con cariño, y que no esperaba que Rudeus recordara de igual forma. Como cuando Rudeus le regaló a Kajakut, describiendo la emoción en los ojos de Bruilard al recibir la espada. O las veces que compartieron risas durante largas noches de borracheras, donde Rudeus le contaba historias de su vida y Bruilard le hablaba de sus sueños y miedos.

Recordó una noche en particular, cuando ambos estaban bastante ebrios y Rudeus intentó enseñarle una canción de su mundo. Aunque Bruilard no entendía la letra (todavía no entendía Japones), la melodía y la pasión con la que Rudeus la cantaba hicieron que esa noche fuera inolvidable. También había momentos más tranquilos, como cuando se sentaban juntos a ver las estrellas (Rudeus y Bruilard casi siempre hacían esto en las tierras del norte, que tenía las mejores vistas nocturnas), hablando con tranquilidad.

Pero aquello que lo iso comprender lo mucho que Rudeus lo valoraba, fue la página que hablaba de lo que el sintió despues de la pelea que el tuvo con el Dios de la Muerte:

La página detallaba el como Rudeus casi sufrió un infarto cuando vio el estado en el que quedó Bruilard después de su feroz enfrentamiento con el Dios de la Muerte. La escena que se desplegó ante sus ojos era aterradora: Bruilard estaba cubierto de sangre, con múltiples cortes profundos y hematomas que cubrían su cuerpo. Su ropa estaba hecha un desastre, apenas colgando de su cuerpo, y su respiración era irregular y entrecortada.

El corazón de Rudeus latía con fuerza en su pecho mientras corría para curarlo. Cada paso que daba parecía un eterno tormento, temiendo lo peor. Cuando finalmente llegó a su lado, cayó de rodillas, sus manos temblorosas mientras recitaba un hechizo de curación de nivel santo. La sangre manchaba sus dedos, y el pánico se apoderó de él al ver la gravedad de las lesiones.

¡Bruilard! -gritó, su voz llena de desesperación. -¡Aguanta, por favor!

Rudeus comenzó a canalizar su magia curativa mientras intentaba recitar correctamente el encantamiento, pero su mente estaba nublada por el miedo. Sabía que podía curar la mayoría de heridas, pero si Bruilard hubiera perdido una extremidad, no habría nada que pudiera hacer. La idea de no poder salvarlo de la misma manera que no pudo salvar a ninguno de sus seres queridos lo llenaba de impotencia y terror.

Mientras sus manos brillaban con una luz verde. Rudeus agradeció internamente que Bruilard no hubiera perdido ninguna extremidad. Las heridas eran graves, pero manejables. Aun así, el estado de Bruilard era crítico, y cada segundo contaba. Rudeus trabajó frenéticamente.

El tiempo parecía detenerse mientras Rudeus se concentraba en su tarea. Cada vez que una herida se cerraba, sentía una pequeña chispa de esperanza. Pero el miedo persistía, un recordatorio constante de lo cerca que habían estado de perder a Bruilard. Finalmente, después de lo que parecieron horas, las heridas de Bruilard comenzaron a sanar y su respiración se volvió más estable.

Rudeus se dejó caer hacia atrás, aliviado. Miró a Bruilard, quien ahora descansaba con una expresión de dolor, pero vivo. La adrenalina aún corría por sus venas, y su mente seguía repasando la escena una y otra vez. No podía permitirse perder a alguien más, no después de todo lo que habían pasado.

-¿Te sientes mejor? -Pregunto, exhausto pero aliviado.

Bruilard levantó el pulgar -Yo.... gane -Y de la misma manera se hecho a descansar.

Esta experiencia quedó anotada en el diario de Rudeus, un recordatorio constante de la fragilidad de la vida y de la importancia de estar siempre preparado. La imagen de Bruilard herido quedó grabada en su memoria, un recordatorio de lo cerca que estuvieron de perderlo y de la necesidad de proteger a uno de los seres queridos que le quedaban.

Esa fue una de las múltiples razones por la cual él no pudo contener las lágrimas, y no pudo hacer más que abrazar a Rudeus cuando volvió a la posada

Pero ahora eso era distante, Rudeus parecía ahora mismo la persona más feliz del mundo. Incluso si no lo demostraba.

Pero el tren de pensamientos de Bruilard finalmente seso, el día había sido largo y lo mejor sería descansar. Faltaba poco para llegar a la "Mandíbula inferior del dragón rojo" y que ocurriera el encuentro con Orsted.

Por hoy tanto el como Rudeus debían descansar.

......

......

......

[Al día siguiente]

El sol apenas comenzaba a asomarse en el horizonte cuando el grupo se puso en marcha. El aire fresco de la mañana llenaba sus pulmones mientras caminaban por el sendero que los llevaría a Roa. La noche anterior había sido tranquila, y todos se sentían un poco más descansados y preparados para el viaje que tenían por delante.

Rudeus lideraba el grupo, con Ruijerd a su lado, siempre vigilante. Eris caminaba detrás de ellos, su espada lista y su mirada alerta. Bruilard, mantenía el paso, decidido a no quedarse atrás.

El camino hacia Roa sería largo, aun faltaban días para llegar. A medida que avanzaban, el paisaje cambiaba de verdes praderas a bosques espesos. Tanto Bruilard  como Rudeus sabían que estaban cada vez más cerca de la "Mandíbula inferior del Dragón Rojo", un lugar decisivo para su plan.

-¿Cuánto falta para llegar a Roa? -preguntó Bruilard, rompiendo el silencio. Todo esto solo era parte de su actuación, después de todo él sabía orientarse bastante bien.

-Si mantenemos este ritmo, deberíamos llegar en un par de días -respondió Ruijerd, su voz firme y segura.

El grupo continuó su marcha, cada uno perdido en sus propios pensamientos. Rudeus no podía evitar preocuparse, pero confiaba en sus habilidades como en las de Bruilard.

-¿En qué piensas, Rudeus? -preguntó Bruilard, notando la expresión pensativa en el rostro de Rudeus además de su respiración algo pesada.

-Solo en lo que nos espera más adelante. Debemos estar preparados para cualquier cosa -respondió Rudeus, tratando de sonar optimista.

-Lo estaremos -dijo Bruilard con determinación -Se que nada será como lo recuerdo pero me siento en paz siempre que estoy contigo.

Era otra charla que buscaba mantener las apariencias de amigos cercanos, que se reencontraban después mucho tiempo, siguiendo un mismo camino.

........

.......

.......

El tiempo paso y ocurrieron cosas que Rudeus recordaba, fue el cumpleaños número quince de Eris y ella tuvo una nueva pelea junto a Ruijerd.

Esta ves siendo observada tanto por Rudeus, como por Bruilard.

Tal como Rudeus lo recordaba Eris fue nombrada como una guerrera, cosa que la lleno de orgullo. Otra cosa que ocurrió fue que Eris le dijo a Rudeus que le pellizcara, para ver si no estaba soñando. Esta vez Rudeus simplemente le pellizcaría la mejilla ahorrándose el golpe que sufrió en el pasado.

Se sentía triste de no poder regalarle nada especial a Eris, pero Bruilard tenía otros planes diciéndole a Rudeus que tuvieran un combate por los viejos tiempos.

Esto llevó a preguntas, y Rudeus dijo que ambos solían entrenar juntos lo que también incluía combates amistosos de vez en cuando, Bruilard decía que era la parte más emocionante del día.

Al final ambos tuvieron su combate delante de Ruijerd y Eris, a una distancia segura.

El combate no fue tan vistoso como el que habían tenido antes, debido a que Rudeus no quería explicar cómo conocía cosas como la magia de gravedad, o hechizos de rango rey, y Bruilard tampoco mostró lo máximo de sí, en su mayoría era un combate para que los dos se divirtieran y así sacar algo de la tensión que Bruilard sabía que tenía Rudeus.

Al igual que el combate anterior Rudeus ganó, y curo las heridas de Bruilard y las suyas.

Y aunque Eris no lo admitiera, abia disfrutado de la pelea, haciendo que Bruilard se ganara aunque sea un poco de su aprobación.

Llego la fecha y se encontraban delante de la imponente "Mandíbula inferior del dragón rojo" mientras surgía la misma conversación en donde Rudeus y Ruijerd le decían a Eris porque era una mala idea enfrentarse a un dragón rojo. Los pensamientos tanto de Bruilard como de Rudeus estaban en otro asunto.

No abia marcha atrás. Ya no podían hacer un cambio de planes. El Dios dragón estaba ahí y se toparían con él muy pronto.

Y ellos estarían preparados

Chapter Text

Narrador

La "Mandíbula Inferior del Dragón Rojo" se alzaba majestuosa ante el grupo, unas enormes montañas heladas llenas de nieve. El aire era denso y pesado pero a Bruilard no parecía afectarle gracias a su manipulación del oxígeno pero se sentía inquieto por estar tan cerca del hielo, no sabía porque.

Mientras tanto las palabras de Ruijerd resonaban firmes mientras seguia disuadiendo a Eris de cualquier idea imprudente sobre enfrentar a un dragón rojo.

-No es una simple bestia, Eris. Un dragón rojo es una calamidad viviente. Incluso para mí, enfrentarlo sería un desafío.

Eris, como era de esperarse, refunfuñó cruzándose de brazos, pero no insistió demasiado. Sabía que Ruijerd no hablaba a la ligera. Rudeus, por su parte, mantenía su mirada fija en el horizonte, una mezcla de nerviosismo y concentración pintada en su rostro. Tanto el como Bruilard sabían lo que estaba en juego.

-Sigamos adelante. Ya discutimos esto lo suficiente -intervino Bruilard, aunque sus pensamientos estaban en otra parte.

-¡Tu no te metas! -Eris fulmino con la mirada a Bruilard.

Bruilard retrocedió instintivamente 'Como mi padre se pudo enamorar de alguien haci' Bruilard intentaba buscarle lógica pero se le escapaba como granos de arena entre sus dedos, y la incomodidad de estar cerca del hielo no ayudaba.

Mientras avanzaban, una sensación incómoda comenzó a invadir a todos menos a Rudeus. Era como si el aire se volviera más espeso con cada paso, obligándolos a respirar más profundamente. La temperatura descendió ligeramente, y un escalofrío recorrió la columna de todos incluso Rudeus. Fue entonces cuando lo vio: dos figuras caminaban lentamente desde el otro extremo del paso.

Era un hombre alto, vestido con un manto blanco. Su cabello plateado brillaba bajo la tenue luz del lugar, y sus ojos dorados, fríos y calculadores, parecían atravesar a todos los presentes. La otra llevaba ropa más normal siendo lo único destacable la mascara blanca y su cabello negro (no es muy común en el mundo de las seis caras).

Tanto Bruilard como Rudeus sabían que se trataba de Orsted y Nanahoshi. Después de años buscando al Dios dragón y de no tener éxito ahora estaba delante de ellos.

La maldición de Orsted afecto a todos menos a Rudeus. Eris y Ruijerd se paralizaron casi por completo, y Bruilard se sorprendió de que la maldición fuera tan fuerte, también estaba paralizado pero también sentía una inmensa ira.

Tanto Orsted como Nanahoshi pasaron a su lado ignorandolos, ni Bruilard ni Rudeus se alarmaron por esto ya que sabían que iba a pasar. Como también sabían que Orsted se detendría y les dirigiría la mirada.

-Rudeus, Bruilard tu también Eris -dijo Ruijerd en voz baja. -No se muevan ni un centímetro.

Bruilard permaneció callado, pero su mente trabajaba rápidamente. Nunca pensó que la maldición de la que hablaba Rudeus fuera tan fuerte, y también se debatía si tuvo mala suerte o no en que en lugar de sentir miedo por él sintiera odio.

-Acaso eres Ruijerd Superdia -La voz de Orsted se escuchó con una calma alarmante que hizo que todo se tensaran menos Rudeus como de costumbre -Y tu debes ser Eris Boreas Greyrat y tu.....

Orsted se sorprendió, pero no por no reconocer a Rudeus como en el pasado si no por la persona que estaba a su lado.

'¿Que hace el miko del oxígeno aquí?' se preguntó internamente 'Debería de estar congelado y descongelarce de manera natural en unos setenta años'

La mente calculadora de Orsted trabajo rápidamente, le era bien sabido por los bucles anteriores que cualquier intento de liberar al miko del oxígeno antes de tiempo siempre terminaba con este último muriendo despues de uno o dos días, siempre, en absolutamente todas las veces. Y no conocía ruinas cercanas que quedarán a menos de dos días de viaje.

Esto para el no tenía sentido, el miko del oxígeno se suponia que tenía el destino fuerte de siempre terminar congelado en alguna ruina aleatoria del mundo a los catorce años, y después descongelarce debido a que la ruina colapsaba y exponía el hielo al sol, el hielo se derretía, el miko del oxígeno era liberado y luego.... moría a los pocos días o con suerte semanas debido a que vagaba por un mundo que ya no entendía, y de paso se la pasaba metido en problemas. O tenía mala suerte y era algún reino completamente aleatorio lo liberaba, el mataba a múltiples soldados debido a su paranoia, para después morir por agotamiento.

Orsted había intuido que el destino de Bruilard era como el de la resurrección de Laplace, no estaba escrito en piedra pero era casi siempre lo mismo. Era una lástima que este miko tuviera un destino tan cruel, ya que su habilidad era bastante interesante y poderosa y Orsted sabía que tenía potencial pero parecía siempre estar condenado a la muerte.

'Pero si a estado descongelado antes de tiempo por más de dos días, y no había muerto.... ¿acaso el desastre de maná o el mago que esta a su lado tiene algo que ver con esto?'

La voz de Ruijerd sacaria a Orsted de su propia mente. -¿Quien eres tu? ¿Cómo sabes mi nombre?

-¿Cómo sabes el mio también -Añadió Eris.

Orsted pensó en posibles respuestas pero algo más lo interrumpió.

-Deberías relajar un poco esa manera en la que respiras, cualquiera se sentiría ansioso al verte -Bruilard intento aligerar la tensión que sentía sin tener que recurrir a morder su lengua.

Rudeus le daría un golpe a Bruilard en la cabeza.

-Auch.

-Cállate Bruilard.

Bruilard suspiraria de manera pesada -Esta bien hermano.

Esa simple palabra "hermano" llamaría la atención de Orsted, sabía que el miko del oxígeno tenía un hermano (apesar de que no sabía casi nada de este último) pero no esperaba que fueran tan distintos.

-¿Hermano? No lo parecen -Murmuro Orsted para si mismo, sin saber que le había dado a Rudeus una oportunidad.

-No es de sangre, solo somos amigos.

Eris y Ruijerd se tensaban por cada segundo que pasaba, pero Rudeus abia obtenido lo que quería, abia llamado la atención de Orsted.

Orsted se extraño, la condición de miko normalmente causaba que estos no tuvieran amigos y eso convinado a que no reconocía a Rudeus solo le dio más razones para su siguiente pregunta.

-¿Y tu quien eres?

Rudeus sintió una enorme tensión, pero sabía que no podía vacilar ahora -Yo soy, Rudeus Greyrat.

La intriga de Orsted volvió a crecer, el no reconocía a este miembro de la familia Greyrat. Debía indagar más, y tal vez de esa manera obtendría respuestas.

-Y dime ¿cual es tu parentesco con los Greyrat? ¿Quien es tu padre? -Sus preguntas parecían órdenes.

-Paul Greyrat -Respondió Rudeus sin vacilar.

Eso definitivamente no podía ser cierto.

-Paul no tiene un hijo, solo tiene dos hijas.

Rudeus lo miró extrañado y Bruilard intervino. -Lo que dices no tiene sentido, conozco a Paul y se parece mucho a Rudeus.

Lo que decía el era la cosa que no tenía sentido, el miko del oxígeno vivía lejos de donde vivía Paul, está conversación estaba contradiciendo bastante cosas que el sabía. Pero algo más le llamó la atención, Ruijerd, Eris y el miko del oxígeno parecían tensos tanto que evitaban mirarlo tenía sentido debido a el que les estaba afectando su maldición, pero a este pequeño mago no.

Rudeus continúo mientras miraba directamente a los ojos a Orsted -Si sabes tanto quizás tu....

Oye niño -Orsted lo interrumpió -¿Acaso estas mirándome a los ojos?

Su tono hizo que Eris y Ruijerd se alarmaran, y Bruilard intervendria para intentar relajar el ambiente otra vez.

-Oye, que te dije sobre esa manera de respirar das miedo, de seguro no tienes amigos por eso.

Rudeus volvio a golpear a Bruilard -Cállate Bruilard -El negaría con la cabeza -Al parecer me equivoque perdónenos por molestarlo.

Todos caminarán unos pasos hasta que el momento por fin llegaría, por unas simples palabras que tanto Bruilard como Rudeus también abian usado múltiples veces para sellar el destino muchos.

-Oigan ustedes dos ¿Conocen a Hitogami?

Tanto Bruilard como Rudeus se voltearon al unísono.

-¿Cómo sabes sobre....

.........

........

La escena, tal como se abia planeado fue una copia exacta del pasado:

Ruijerd lo dio todo para protegerlos, pero terminó noqueado de unos cuantos golpes.

Eris intentaría abalanzarse contra Orsted, pero el detuvo su espada con los dedos y la mando a volar contra la pared de un golpe

Solo quedaron Rudeus y Bruilard de pie.

.........

.........

.........

'Todo va de acuerdo al plan' pensaron tanto Bruilard, como Rudeus. 'Es la hora de continuar con la actuación.

.........

.........

-¡Denemos tener cuidado, Bruilard! -Grito Rudeus, desenvolviendo a "Aqua Heartia" y apuntandolo hacia Orsted mientras el aire se llenaba de un zumbido eléctrico, mientras poco a poco Rudeus iba acumulaba maná. Su "Electric" chispeaba con un poder palpable, pero Orsted no parecía inmutarse.

-¿Magia sin encantamientos? -Orsted murmuró con desdén mientras sus ojos se fijaban en Rudeus. -¿Acaso Hitogami te otorgó ese poder? -Un ligero tono de burla se deslizó en su voz antes de que su mirada se endureciera -Bueno, no debería sorprenderme de un apóstol.

Bruilard sintió cómo su rabia se encendía con cada palabra. Sus manos temblaron, y por un instante deseó lanzar todo su poder contra Orsted. Pero sabía que ese no era el momento, y se obligó a mantener la compostura.

-En ese caso "Disturb ma....' mhh.

-¡Ahora, hermano! -gritó Bruilard mientras las "cadenas fantasma" que había creado con prisa envolvían a Orsted como unas serpientes.

Rudeus lanzó su hechizo. Un rugido ensordecedor se extendió por la montaña cuando el rayo fue lanzado. Sin embargo, Orsted rompió las cadenas con un movimiento brusco pero sin ninguna dificultad aparente, los fragmentos dispersándose como polvo. Con un giro preciso, esquivó el rayo que pasó a centímetros de su rostro, dejando una grieta ardiente en el suelo detrás de él.

Orsted se recompuso, su mirada afilada como un cuchillo. Analizó al dúo frente a él.

-Así que un mago que lanza hechizos sin encantamientos y el miko del oxígeno -Su tono era frío, calculador -Es una combinación rara, pero funcional. Eso explica el por qué Hitogami los eligió como apóstoles.

Bruilard apretó los puños, la furia burbujeando en su interior. 'Acaso está diciendo que mi relación con Rudeus es obra de ese idiota' Pero se obligó a calmarse una vez más. Era crucial que el plan no se viniera abajo por sus emociones.

-No somos lo que tú crees -Dijo Rudeus, intentando razonar de algún modo.

Pero Orsted no se dejó engañar. En su mente, todo estaba claro: un buen apóstol es un apóstol muerto. Sin mediar palabra, avanzó, su aura opresiva intensificándose, su maldición lo hacía peor para Bruilard.

-Es inútil, hermano -Dijo Bruilard mientras desenvainaba su espada. Su mirada se centró en el ritmo de la respiración de Orsted, notando fácilmente sus intenciones -No piensa escucharnos.

Bruilard alzó una mano, el aire a su alrededor vibrando de forma casi imperceptible. De repente, el oxígeno comenzó a solidificarse en docenas de agujas invisibles, afiladas como bisturís, un arma en toda regla.

-¡Aber que te parece esto! -Rugió mientras disparaba las agujas hacia Orsted.

El ataque era mortal, cada aguja iba a puntos vitales pero Orsted apenas se inmutó. Con un simple gesto, repelió las agujas, que cayeron al suelo como simples astillas. Las contrarrestó con la misma facilidad con la que desintegró los "cañones de piedra" y otros hechizos que Rudeus conjuraba frenéticamente, solo usando sus manos.

Rudeus se movió hacia atrás, ganando distancia mientras Bruilard desaparecía en un abrir y cerrar de ojos. Orsted quién abia terminado de desviar todos los hechizos y agujas frunció el ceño ante este echo, desconcertado. Pero nuevos hechizos de Rudeus lo obligaron a girarse, sus manos deshaciendo los hechizos con precisión brutal, pero manteniendo esa mirada tan desconcertante. Entonces, Bruilard reapareció junto a él, su espada descendiendo como un rayo, lanzando una "Espada larga de la Luz"

Más aún haci la espada fue detenida con un movimiento casual. Orsted agarró la hoja con su mano desnuda, deteniéndola en seco.

-Así que ahora sabes usar la técnica del dios de la muerte -Orsted torció los labios en una mueca pero sus ojos seguían fríos -¿Hitogami también te enseñó esto?

Bruilard odiaba tener que darle la razón internamente mientras intentaba liberar su espada, pero la fuerza de Orsted era insuperable para su estado actual o incluso su mejor estado. Su mandíbula se tensó, su rabia acumulada comenzando a desbordarse.

-¡No sabes nada! -Gruñó con una furia real debido a la maldición de Orsted y por las palabras de este último mientras forzaba su cuerpo al límite.

Orsted, aburrido de la resistencia de Bruilard, levantó su otra mano para hacer su propia "Espada larga de la Luz". Sin embargo, cuando la lanzó, su brazo se desvió de manera extraña, y la hoja pasó rozando a Bruilard cortandole un poco el cabello.

-¿Qué...? -Orsted miró su mano, desconcertado.

Bruilard aprovecho y saco su espada del agarre de Orsted, esbozando una sonrisa de burla.

-Hasta alguien como tú necesita oxígeno en su cuerpo -Con un movimiento rápido, desapareció de nuevo en la niebla.

Orsted analizo y rápidamente comprendió lo que había ocurrido. Bruilard había manipulado el oxígeno en sus músculos, forzándolos a moverse de manera involuntaria.

-Su poder es más versátil de lo que imaginé... -Admitió con un tono de voz bajo.

Nuevas cadenas intentaron envolverlo, pero Orsted las destruyó con un gesto, bloqueando de paso los constantes hechizos de Rudeus. Cuando Bruilard reapareció para atacarlo, Orsted lo atrapó del cuello con una enorme velocidad.

-Agh -Bruilard solto un quejido ahogado.

-Se acabó -Murmuró con desdén mientras levantaba a Bruilard como si fuera un muñeco roto.

Bruilard se intentaba liberar mientras que su mirada seguía siendo desafiante. Con un esfuerzo sobrehumano, drenó todo el oxígeno del cuerpo de Orsted. La reacción fue inmediata: el cuerpo del Dios dragón comenzó a pesar toneladas, cada movimiento ralentizándose como si estuviera atrapado en un pantano invisible. A la hora de que Bruilard se enfrentaba a situaciones de vida o muerte, su poder tendía a mejorar su eficacia, permitiéndole hacer cosas como esta.

-El oxígeno es la esencia de la vida... -Gruñó Bruilard, jadeante.

Pero antes de que pudiera terminar su frase, Nuevos hechizos de Rudeus que atacaban desde múltiples ángulos obligaron a Orsted a soltarlo. Bruilard cayó al suelo, tosiendo sangre y con el cuello rojo debido a lo fuerte que abia sido el agarre de Orsted, pero no perdió tiempo en retroceder y desaparecer con su "Muerte silenciosa" una vez más.

Orsted se recompuso, sus ojos brillando con una furia fría mientras observaba cómo Bruilard y Rudeus mantenían una distancia estratégica.

Bruilard se estaba recomponiendo, y Rudeus lo miró claramente preocupado.

-¿Estás bien, Bruilard? -preguntó Rudeus, su voz llena de preocupación mientras Bruilard se frotaba la herida.

Rudeus se sentía mal por tener que arriesgar tanto a Bruilard solo para mantenerse a salvo, y en la distancia correcta para poder lanzar sus hechizos. Rudeus extrañaba su armadura mágica que le permitiría arriesgarse más incluso si el sabía que esta ultima tenía muchos fallos, y Bruilard por su lado extrañaba a Kajakut.

Bruilard intento responder pero Orsted volvió a atacarlo, Rudeus apoyaría a Bruilard tanto como podía pero parecía que no podía hacer mucho.

Bruilard apenas había esquivado el ataque, volvió a desaparecer y reapareció lejos de Orsted. Este último notó como Bruilard preparaba un nuevo ataque.

-Veamos si esto es de tu talla -El "corte fantasma" de Bruilard fue super rápido y devastador, y Orsted se sorprendería de que el ataque logrará atravesar su touki. Pero se recompuso rápidamente.

Pero cuando volvió a intentar moverse se topó con otra barrera de oxígeno, pero rápidamente se daría cuenta de que estaba completamente rodeado por barreras que tomaron la forma de una esfera.

Era el "Sello mortal" de Bruilard, pero el sabía que ni de chiste podría matar a Orsted de esta manera haci que en lugar de cerrar poco a poco movió sus manos para manipular la barrera y lanzarla al lado contrario al de ellos. Las venas de sus brazos comenzaron a marcarse debido al esfuerzo pero lograron cumplir su cometido de hacer distancia.

Cuando la esfera aún seguía en movimiento Orsted la destruyó pero se toparia con un "Cañón de piedra" que venía desde el suelo, este giraba a una enorme velocidad y fue disparado a la misma velocidad, Orsted lo atrapo con una mano pero una vez más su touki sería atravesado, su mano sangraba a bordotones manchando el suelo helado.

Mientras que todo eso pasaba Bruilard volvería tomar distancia, pero se seguía manteniendo alejado de Rudeus para no arriesgarlo.

-Debemos encontrar una forma de escapar con el resto, Bruilard -La voz de Rudeus reflejaba resignación, el sabía que no podían ganar, y Bruilard también lo sabía aunque odiara admitirlo.

Mientras esto sucedía Orsted analizo todo otra vez, el dúo de Rudeus y Bruilard se basaba en su mayoría en el desgaste continuo, por lo menos contra alguien como el, Rudeus lanzaba hechizo tras hechizo aprovechándose de que no tenía que recitar los encantamientos y al parecer de una enorme reserva de maná, Bruilard por su parte, como miko del oxígeno lo aprovechaba lo máximo posible para desgastar con sus habilidades de manipulación y también alejarlo de él o de Rudeus, y como espadachín buscaba formas de dañarlo. Haciendo que por momentos a cualquier otro rival se le olvidara la presencia de Rudeus.

¿Entonces que debía de hacer?.... pues Orsted solo tenia que romper ese equilibrio.

Bruilard sintió como Orsted tomaba una respiración más profunda, Bruilard sintio como su piel se erizaba intuyendo casi de inmediato la intención de Orsted.... Pero incluso haci... el show debía continuar.

-¡¡Onii-San!! (¡¡Hermano!!) -Grito Bruilard en un intento de advertir a Rudeus.

Rudeus activo al máximo su ojo de previsión, pero al igual que en el pasado el solo podía ver a Orsted atravesandolo, adiferencia de la última vez, Orsted no iba por sus pulmones ya que sabía que Rudeus no necesitaba conjurar sus hechizos, por lo que iba por su corazón. Pero adiferencia de la última vez, la visión no lo paralizó y preparo un "muro de tierra" del máximo grosor posible.

Orsted lo atravesó como si fuera mantequilla solo con sus manos, pero cuando estaba apunto de matar a Rudeus, se topó con la barrera de oxígeno de Bruilard otra vez.

-¡No te dejaré hacerlo! -Bruilard tenía las manos extendidas para mantener la barrera. Hacerlo parecía cobrarle factura ya que las venas de sus brazos se remarcaron bastante, incluso más que la última vez.

Orsted cambio de estrategia rápidamente, sentrandoce en Bruilard. Se dio cuenta de que Bruilard le estorbaria si atacaba a Rudeus con el estando en perfecto estado. Pero esta ves Rudeus salvaría a Bruilard, con un "Erizo de tierra" que le estorbaria, para luego ser alcanzado por un "Electric" que lo hizo retroceder unos pasos. Para al final toparse con el mismo truco de Bruilard que lo alejó, pero esta vez no tanto debido a que no tardo en escapar de la técnica.

Durante todo el combate, Orsted pensó que si bien Bruilard llamaba hermano a Rudeus, Rudeus nunca hizo lo contrario, y como Rudeus nunca abia aparecido en anteriores bucles y no tenía información sobre el Orsted pensó que tal vez solo Bruilard veía su relación como una hermandad. Pero se abia equivocado ya que ambos se preocupaban del otro al extremo, incluso si Rudeus no lo demostraba tan directamente como Bruilard. Eso era algo que tendría en cuenta.

Más, abia otra cosa que lo hizo reflexionar ahora que se encontraba distanciado de Rudeus y Bruilard, cuando intento atacar a Rudeus Bruilard lo llamo "Onii-San" ese no era un idioma que reconociera, al menos no del todo....

El pensamiento llegó como en las caricaturas, casi se podía ver el foco. Orsted recordó que el idioma que hablaba Nanahoshi "Japonés" tenía esa palabra pero.... ¿como el miko del oxígeno la sabía?

Orsted volteó a ver a Nanahoshi, la cual estaba alejada del combate, y vio que estaba pensativa.

Durante todo el combate Nanahoshi abia mirado con algo de indiferencia el combate, durante su tiempo con Orsted verlo matar se abia vuelto una trivialidad. Lo único que le abia llamado la atención abia sido que Orsted no acabara con ellos de inmediato como a los otros, si no que parecía que se tomaba su tiempo para medirlos en especial a Bruilard.

Pero ella también abia escuchado a Bruilard pronunciar la palabra en su idioma natal, un idioma que el no debería conocer, ella recapitulo y al principio parecía que Orsted reconocía a Bruilard. Por lo que el no debería ser un enviado de otro mundo como ella. El propio Orsted le abia dicho que nunca abia visto nada similar a ella.

'....Espera' Nanahoshi recordó que Orsted no abia reconocido al mago (Rudeus). Los puntos se conectaron lentamente y al final hicieron click en su mente 'Entonces.... ¿Acaso el....'

Su pensamiento fue interrumpido, por algo que terminó de confirmar su teoría.

-Daijoubu ka, Bruilard (¿Estás bien Bruilard?).

Ambos por primera vez se abian juntado, lo que le pareció sospechoso a Orsted, hasta que noto que Bruilard ya tenia una barrera de Oxígeno desplegada. Y estaba haciendo algo raro con su mano derecha.

-Hai.... demo... dou yate kateru ka nigeru ka wakaranai?! (Si pero.... ¡¿como se supone que ganemos o escapamos de esa cosa?!) -Señalo como por enésima vez a Orsted -Ano baka wa kyoufu no kemonoda! (¡Es una maldita bestia!)

-Shizuka ni shiro, Bruilard (No tienes que gritar Bruilard) -Corrigió Rudeus -Anata mo wakate iru yo ne, kare wa mou nihongo ga wakeranai (sabes que el ya no puede entendernos ¿cierto?).

Bruilard parecio calmarse pero estaba bastante alterado, todos sintieron como el oxígeno se volvía más pesado.

-Hai..... demo..... (Si.... p-pero....) -Señaló con el dedo a Orsted otra vez -Ore wa, nigate da! Kare wa watashi ni kare o nikumu yōna fun'iki o ataeru dakede wa arimasen (¡No lo soporto!..... No solo me da una vibra que me hace odiarlo) -Nanahoshi entendió que Bruilard se refería a la maldición de Orsted -Sōdenakereba, kare wa keikoku nashi ni watashitachi o kōgeki shi, Ruijerd to Eris o kizetsu sa se, soshite... (Si no que también nos atacó sin aviso, noqueo a Ruijerd y Eris y además....).

Bruilard se paralizó, como si le costara terminar su frase. Orsted por su lado, abandono momentáneamente la idea de matar a Rudeus y Bruilard, dirigiéndose al lado de Nanahoshi.

-Nanahoshi -Hablo con autoridad- ¿Ese idioma es....

Nanahoshi lo interrumpió. -Si -Asintió con la cabeza confirmando las sospecha de Orsted -Es Japonés.

Muchas preguntas llenaron la cabeza de Orsted ¿cómo lo conocían? ¿Rudeus era el viajero? Y si era haci ¿Rudeus le abia enseñado el idioma a Bruilard? Eran muchas pero se sentro en una por ahora.

-¿Sabes que dicen? -Pregunto.

Nanahoshi escucho la conversación que se abia detenido después de lo último que abia dicho Bruilard.

-Pues el chico de cabello blanco se le nota bastante alterado, y el mago parece intentar calmarlo pero...

Las palabras de Nanahoshi fueron interrumpidas por un grito.

-Orokamono wa aete wareware o ano uragirimono no shito to yonda nda! ! (¡¡El idiota se atrevió a llamarnos apóstoles de ese maldito traidor!!) -Bruilard exclamó en un tono entre ira, y indignación.

Rudeus, que estaba al lado se tapo los oídos para salvar sus tímpanos.

-Hai, ore mo okotte iru.... (Si, y yo también estoy enojado por eso pero....)

Bruilard lo interrumpió.

-Hitogami no sei de ore wa korosareta kashirenai! (¡¡Por la culpa de Hitogami casi nos matan!!) -Bruilard solto lágrimas de frustración y sus palabras se ahogaron -Ore wa shinou to shita.... shinou to shita... anata wo ushinai sou ni natta, Onii-San (Casi me matan.... casi.... casi te pierdo hermano.... y yo.....)

Rudeus llevo la cabeza de Bruilard a su pecho, y acaricio su cabello para consolarlo.

-Daijoubu da Bruilard (Esta bien Bruilard estoy aquí y no pienso separarme de ti) -Continua acariciando el cabello de Bruilard como un hermano mayor -Hitogami wo futari de taosu to yakusoku shita darau, Bruilard (Prometimos que matariamos a Hitogami juntos ¿verdad Bruilard?).

-Hai... Onii-San (Si... hermano).

Nanahoshi abia traducido palabra por palabra a Orsted, e incluso detrás de la máscara Orsted sabía que ella tenía una mirada complicada. Pero Orsted también noto como la mano derecha de Bruilard volvía a hacer algo raro, como si se estuviera preparando para algo.

Rudeus dejo a Bruilard solo, y le dio una sonrisa -Demo ima wa, watashi to nokori no hitobito o kono jōkyō kara kyūshutsu shite moraitai nodesu, onegai dekimasu ka? (Pero ahora necesito que nos saques a mi y al resto de esto ¿puedes?)

- ..... Hai... dekiru (.... Sí... puedo) -La mirada de Bruilard se endureció y miro a ambos lados, los preparativos estaban listos, tanto Eris como Ruijerd estaban detrás de ellos gracias a que Rudeus los abia movido gracias a la magia de gravedad. Solo tenia que lanzar su técnica, y luego cargar a uno de los dos (Eris o Ruijerd) y escapar.

La mano de Bruilard terminó también los preparativos, las venas de su mano derecha eras más visibles que nunca incluso su mano abia empezado a sangrar. Bruilard levantó la mano preparado para lo que venía....

-¡Mundo muer....

Pero algo lo interrumpió....

-Matte! Tomatte kudasai! (¡Espera! ¡Deténganse por favor!) -Nanahoshi grito.

Rudeus reacciono de inmediato deteniendo la mano de Bruilard con magia de gravedad. Aunque en verdad no era necesario Bruilard ya abia cancelado la técnica al escuchar a alguien que no era Rudeus hablar en Japonés.

Bruilard miro directamente a Rudeus, luciendo impactado.

-Doushite kanojo wa ore-tachi no gengo wo shitte iru, Onii-San? (¿Cómo ella conoce nuestro idioma, hermano?) -Bruilard cuestionó -Kimi wa kore wa ore-tachi dake no tokushuna mono da to itta yo (Dijiste que era algo único de nosotros).

Rudeus le devolvió la mirada luciendo igual de impactado que Bruilard -Ore wa... wakaranai (Yo... no lo sé).

Ambos voltearon su mirada hacia Nanahoshi mirándola con duda.

-Doushite nihongo wo shitte iru no? (¿Cómo conoces el japonés?) -La voz de Rudeus denotaba su confusión, mirando a Nanahoshi con incredulidad, ignorando por completo la presencia de Orsted.

Nanahoshi se relajo un poco -Tabun... anata to watashi wa onaji tokoro kara kita (Creo... que tú y yo venimos del mismo lugar) -Dejo ver algo de sorpresa en su tono.

Eso despertó algo dentro de Bruilard.

-Espera, espera, espera -Bruilard devolvió su mirada a Rudeus abandonando el Japonés y volviendo al idioma común -Entonces todo eso de que venías de otro mundo no era una broma muy elaborada.... ¿sino que era verdad?

Rudeus le devolvió la mirada y al igual que el abandono el Japonés -Eso parece... espera.... ¡¿no me creías?!

-¡Como querías que te creyera que existe un mundo en donde se necesita una licencia para llevar una espada! -Se intento justificar

-En primera ¡¿de todo lo que te conté y después de que casi nos matan eso es lo que te hacía no creerme?! -Se notaba tanto molesto como confundido -¡Y en segunda! ¡En serio piensas que diría una broma como esa después de casi morir!

-¡Que se yo!

-Pues tu......

-¡Ehem!

Orsted se aclaro la garganta bastante fuerte deteniendo lo que parecía iba a volverse una discusión. Miró tanto a Bruilard como a Rudeus de una manera aterradoramente sería.

-Lamento interumpir pero creo que ustedes tienen algo muy importante que decirme -El se acercó lenta pero firmemente cortando la gran distancia que abia entre el y el dúo -Ahora díganme ¿que relación tenían con Hitogami? -Su pregunta una vez más parecía una orden.

Con lo que se encontró Orsted fue primero miradas de confusión o de precaución, pero después se volvieron unas de una intensa ira.

Una iré genuina y pura, Bruilard y Rudeus en ese momento no estaban actuando. Orsted nunca pensó que vería esta ira tan grande en estos supuestos apóstoles, una ira hacia Hitogami que solo podría compararse con la suya.

Por el lado de Rudeus y Bruilard apesar de la ira sonrieron internamente al saber que su plan abia funcionado. Todo marchaba correctamente y ahora tenían una oportunidad que habían esperado por años.

-Supongo que debemos de hablar si queremos salir vivos todos de aquí -Dijo Bruilard con fastidio.

Más, internamente solo abia una palabra:

Esta es una victoria para los asesinos mundiales.

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Esto va a ser breve.

No tengo ni una idea para continuar esta historia, me frustre hace tiempo por esto y dejé la historia en pausa. Pensé que tenía una estructura bien pensada, pero no pensé realmente como conectar cada capítulo futuro tenía planeados por lo menos 23 contando los ya publicados.

¿Esto significa que esta cancelada? No realmente. Pero si les pido ayuda con alguna idea o sugerencia que me pudieran dar para el siguiente cap si no es mucha molestia.

Sin más, me despido que tengan una buena mañana tarde o noche.

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Esta es una escena cómica que aparecerá en el futuro si es que continuo, me dio la suficiente gracia como para no querer guardarmela para mí y compartirla con ustedes díganme qué les parece.

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El sol comenzaba a descender, tiñendo el cielo de tonos cálidos mientras Bruilard y Rudeus caminaban por la llanura. La brisa era suave, y el horizonte parecía prometer nuevas aventuras. Durante un largo rato, ambos guardaron silencio, disfrutando del paisaje… hasta que Bruilard rompió la tranquilidad.

—Oye, hermano… —dijo, girando la cabeza con una sonrisa nerviosa—. ¿Qué haremos cuando ellas dos se reúnan?

Rudeus levantó una ceja, sin dejar de mirar al frente.

—¿A qué te refieres?

—Pues… le dijimos a Eris que tú y yo éramos amigos de la infancia. Pero cuando te reencuentres con Sylphiette, no podremos usar esa misma excusa. Ella sabe de antemano que eso es falso, así que tendremos que inventar otra historia. ¿Y si se llegan a encontrar y empiezan a hablar? ¿Y si descubren la tremenda mentira que les soltamos?

Rudeus soltó un leve suspiro, contemplando las nubes que flotaban perezosas en el cielo.

—Tranquilo, Bruilard —dijo con voz serena—. Algo se nos ocurrirá.

—¡Espera! —Bruilard levantó una mano, deteniéndose—. ¡Tengo una buena idea! ¿Qué tal si…

—Tranquilo —interrumpió Rudeus sin mirarlo—. No tienes que romperte la cabeza con eso. Para eso falta muuucho tiempo. Vamos, sigamos.

—¡Pero en serio! ¡Es una buena idea!

—¡Dije que continuemos!

Rudeus siguió caminando con paso firme. Bruilard se quedó un segundo quieto, luego lo alcanzó, frunciendo el ceño.

—Hermano… —murmuró, notando algo extraño en la expresión del otro—. ¿Estás teniendo un monólogo interno? ¿Otra vez?

No obtuvo respuesta.

—Sabes que eso no detiene el paso del tiempo, ¿verdad?

Rudeus no respondió.

—Oye, te hablo en serio. Si no resolvemos esto ahora y ellas se encuentran… vamos a quedar como unos completos mentirosos. (Que lo somos por cierto) Y se van a enojar. Mucho. ¿No te importa?

Silencio. El viento arrastró una hoja que giró entre ambos. Rudeus seguía en su monólogo

—¡Hermano!

Pero Rudeus seguía sin decir nada, inmerso en sus propios pensamientos, como si pudiera controlar el caos que vendría solo ignorándolo.

Bruilard suspiró.

—Esto va a salir mal. Lo sé…

Y siguieron caminando. Uno en silencio, el otro con un plan que nunca pudo compartir.

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Orsted pov

La ira y sed de sangre del miko del oxígeno y de Rudeus era palpable, era una ira genuina y pura. Podría pensar que intentan engañarme, pero su ira es demasiado pura y si bien podría atribuirlo a él efecto de mi maldición por alguna razón a los enviados de otro mundo como Rudeus y Nanahoshi parecen ser inmunes, y al parecer el miko del oxígeno parece tener cierta resistencia pero lo pondré en duda por ahora.

De la nada Bruilard se quejo -Auch.....

La ira de Rudeus desapareció y en cambio se preocupo por su compañero.

-¿Estas bien Bruilard? -Se acercó a él viendo como una liña de sangre se deslizaba por las comisuras de la boca del miko.

-Si solo....

Rudeus lo interrumpió -No finjas se que te moriste la lengua, déjame curarte.

Esto sería irrelevante para mi, sino fuera porque por primera vez Rudeus empezó a recitar un encantamiento, en este caso el del hechizo "Curación"

Haci que cuando termino el encantamiento y el brillo verde emano de sus manos, pregunte por mera curiosidad.

-¿Pensé que eras un mago sin encantamientos?

El no despegó la mirada del miko pero me respondió -Puedo realizar cualquier magia ofensiva sin necesidad de un encantamiento -Exclamó con seguridad pero sin una sola pizca de alarde -Pero por alguna razón no logro hacerlo con la magia curativa.

Bueno ese sera un detalle importante.

Cuando termino puso una de sus manos en el suelo y uso el hechizo "Fortaleza de tierra" envolviéndonos a todos menos a sus compañeros noqueados.

La sala se iluminó con magia de fuego y luego uso otro hechizo.

-Esto no involucrará ni a Ruijerd ni a Eris haci que insonoricé la sala -Hablo con relativa calma pero podía seguir notando lo tenso que estaba.

Después de eso conjuro cuatro sillas de piedra con magia de tierra, al parecer tenía razón, sus reservas de maná deben ser muy altas para usar magia para cosas tan banales.

El y el miko se sentaron y con un gesto me invito a mi y a Nanahoshi a hacer lo mismo, lo hice con algunas dudas.

Al final ambos nos miramos directamente a los ojos, puedo decir ya con certeza que el es inmune a mi maldición.

-Entonces ¿que quieres saber? -Su mirada era calmada por primera vez, y por alguna razón sentí que veía a alguien que ya a pasado por demasiado.

Pero tengo que ser directo, necesito saber con absoluta precisión que relación tenían con Hitogami.

-Díganme absolutamente todo respecto a su relación con Hitogami -Clave mi mirada en el de manera más profunda para enfatizar lo siguiente -Si intentan engañarme los mataré sin dudar.

Tanto Bruilard como Nanahoshi se tensaron... pero Rudeus me miró con calma como la de aquel que ya no le teme a la muerte. Y también me dio la impresión de que acepto algo dentro de sí mismo.

-Si quieres puedes matarme después de lo que te diré.... pero prométeme que no matarás a Bruilard o ah mis compañeros.

El miko se tenso de repente.

-Hermano, ¿no me digas que...

-No hay opción Bruilard -Expreso con calma y dando una débil sonrisa -Si mentimos moriremos y todo lo que emos logrado será en vano.

¿Logrado? ¿Que demonios? Habla de eso como si fuera algo demasiado serio para alguien tan joven.

Aun haci necesito saber todo respecto a Hitogami -Pensaré en no matarlos -Eso debería ser suficiente.

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Mente de Bruilard

"Antipático de mierda"

"Todo saldrá buen sino"

......

Aún tengo una opción.

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Orsted pov

Rudeus lo acepto y empezó a hablar -Supongo que te diste cuenta de que somos un dúo formidable -Frunci el seño ante esto -Tenemos una estrategia de desgaste para enemigos tan fuertes como tu, sabemos como cubrirnos simultáneamente, y en mi caso puedo usar los mismos hechizos de diversas maneras.

Mi seño siguió fruncido -¿Cuál es tu punto? No tiene nada que ver con lo que te pregunte.

El negó -Si lo tiene -Dijo con total seguridad -Dime ¿crees que un adolescente de trece y uno de catorce podrían hacer algo haci? Estando en contacto solo durante unos años.

Si fuera cualquier otra persona diría que está intentando desviar el tema, pero por alguna razón siento que esto es más importante de lo que parece.

Bueno supongo que debo de responder -Incluso con todo el talento que tengan se me haría imposible -Negue con la cabeza -Si por ejemplo me dijeras que los dos estuvieron juntos durante tres años no te creería, su destreza en combate marca que han estado por lo menos ocho años juntos.

-Y... ¿que pasaría si te dijiera que emos estado más de veinte años juntos?

......

¿De que demonios está hablando ahora? Eso sería imposible.

-No te creería porque los dos se ven demasiado jóvenes. Y dijiste que tenían 14 y 13 respectivamente, por lo que los números no dan.

El tomo un gran aliento y después exhaló llevándose al parecer toda la tensión que le quedaba (Ojalá fuera lo mismo que con su compañero que me sigue mirando de manera homicida).

-Y ¿que pasaría?.... ¿si te digo que nosotros venimos del futuro?

........

.......

.......

-Explicate.

.......

El silencio se prolongó unos momentos.

-La magia es todo poderosa -Rudeus parecía más seguro que nunca -Da igual lo que sea, con suficiente inteligencia y investigación la magia puede hacer lo que sea incluso viajar en el tiempo.

Espera... ¿acaso?

-Durante nuestros largos viajes en el futuro nos encontramos con unas viejas ruinas de la raza dragón -Mi mente solo repetía "imposible" -En donde se encontraba un escrito del primer Dios Dragón que nos dio las instrucciones suficientes para formar nuestro hechizo.

Quería decir algo, pero de tantas preguntas quede en blanco por un momento.

-Fueron años de investigación. Años en los que estuve cerca de la muerte debido al deterioro de mi cuerpo por la vejez -El Miko del oxígeno se mordió el labio con fuerza, parecia dolerle recordar el estado de su compañero -Todo esto solo motivado por una soma y sencilla razón, una que yo y Bruilard compartimos -Su rostro puso una gran mueca de ira -Nuestro gran odio hacia quien se llama haci mismo el "Dios Humano" Hitogami.

.....Por fin lo que me interesa.

-Todo empezó hacia cuando tenía poco menos que la edad con la que me vez ahora. -Parece que su mente hizo un largo recorrido al pasado -El se me aparecía en sueños y me daba consejos, al principio fueron buenos. Me ayudaron a confiar en Ruijerd y así no morir en el continente demoníaco cuando el desastre de maná nos teletransporto hay. Me ayudo a conseguir mi ojo demoníaco. A ir a Sharia y reencontrarme con una vieja amiga que se volvió mi esposa.

Orsted no parecía tan sorprendido por esto, era lo típico de cualquier apóstol y podía intuir el final.

Rudeus puso su mano sobre su cabeza -Pero el primer indicio de que algo estaba mal vino cuando el insistía en que no fuera a Rapan en donde estaba mi madre atrapada en un laberinto -Bajo su mano y entrelaza los pulgares -Siempre decía lo mismo "Si vas hacia allá te arrepentirás" siempre lo decía y ponía siempre la misma razón y es que no podía dejar a mi esposa embarazada sola durante tanto pero lo hice viaje hasta Rapan y de paso salve a Roxy quien se volvió mi segunda esposa tiempo después.

El se tomó una ligera pausa.

-No lo vi durante un tiempo, pero cuando lo hizo me dio otro consejo, siendo sincero nunca confíe mucho en el pero esa vez solo me pidió bajar al sótano a comprobar -Sus palabras se volvieron más pesadas -No abia absolutamente nada.... -Pareció darse cuenta de algo -Lo siento, me estoy desahogando y no estoy llegando al grano el punto es que si abia algo en ese sótano, una rata que infecto a Roxy co  una enfermedad llamada síndrome de petrificación o algo así.

Parece que se enoja cada vez más.

-Intente salvarla pero no pude, intentarlo le costó la vida a un amigo mío y después de que Roxy murió todo se fue al demonio. -Se volvió a llevar la mano a la cabeza -No me extendere lo perdí todo y cuando digo todo es todo, y cuando lo volví a ver solo se apareció para burlarse de mí.

El me miró a los ojos.

-Tal vez esto te interese -Parecia bastante seguro de lo que decía -Dijo que el abia mandado esa rata para matar a Roxy porque la hija que tendría con ella estaba destinada a aliarse a tí.

¿Qué?

-Y cuando eso pasara sus días estarían contados, ambos estaban destinados a matarlo definitivamente.

.....

.....

.....

¿El padre de una heroina? ¿Qué su nacimiento aria que mi victoria contra Hitogami estuviera asegurada?

Parece demasiado bueno para ser verdad. ¿Me está mintiendo para que lo deje vivo?

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Narrador

Orsted se levantó de la silla. Eso puso alerta tanto a Nanahoshi como a Bruilard pero Rudeus se mantuvo con una calma infinita.

Lo miro a los ojos una vez más -Ya te expuse mis razones, si quieres saber las de Bruilard tendrás que preguntarle a el. Y si decides matarme de todos modos créeme yo no soy el que saldrá perdiendo -Su confianza no venia de arrogancia sino de certeza y Orsted también lo notó.

Rudeus se acomoda en la silla y siguió.

-Te propongo que nos volvamos aliados, tanto yo como Bruilard no estaremos tranquilos hasta que Hitogami este muerto. -Rudeus miró al techo -La decisión es tuya Orsted, Dios Dragón y segunda persona más fuerte del mundo -Lo miro a los ojos por lo que podría ser la última vez -Aceptaras nuestra ayuda.

Bruilard al ver la confianza de Rudeus se contagio de esta y también vio a Orsted desafiante.

Y por primera vez el Dios dragón....

No supo que hacer.

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Hola, lo se me estoy tardando en la segunda parte del cap anterior pero tengan paciencia por favor.

Me preguntaba si les gustaría que añada otro OC a este fic que es compañero de Rudeus y Bruilard. Abrí viajado junto a ellos al pasado y sería el único de su grupo grupo no ser humano.

Ni se si seria joderme mucho la historia aunque en su defensa su rol era más de quedarse atrás en forma de investigador que ser parte de los "Asesinos Mundiales" siendo sin duda el más inteligente de el Trío

Pero estoy en duda y por eso pregunto. Tengo buenas ideas con el (Por lo menos desde mi punto de vista son buenas). Aparte de que me serviría para justificar algunas cosas que no tienen mucho sentido dentro del fic hasta ahora (como Bruilard sabiendo medicina cuando no tiene casi ningún conocimiento). Y si se preguntan que si es tan listo cómo voy a justificar que no haya ayudado con el círculo de viaje en el tiempo. Pues la verdad es muy simple y es que uno de los chistes para su personaje que he pensado es en su brutal odio e incomodidad hacia los círculos mágicos. En un momento cuando les toca usar los círculos de teletransportación este casi hay que rogarle que se meta porque los odia. O también como la justificación para que no haya estado dando su maná durante la activación de el círculo de viaje en el tiempo también se deba que no se prestó para eso y prefirió estar de espaldas con los ojos vendados cerca del círculo y aún así lo hizo regañadientes.

Tendrá su propio transfondo con Hitogami pero eso me gustaría dejarlo como una interrogante por ahora.

Bueno lo dejaré al publica.

Quieren que León Brughmore, el híbrido demonio y poseedor de un ojo de demonio nunca antes visto se una a las aventuras o no.