Work Text:
**Uno**
Todo empieza con Senku llegando al laboratorio con un brazos rodeado de vendas.
Es fácil llamar la atención con eso, pero Senku siempre le ha restado importancia a problemas personales cuando está en el trabajo, no por nada tardaron 3 años —el tiempo que el científico llevaba trabajando en la NASA— en saber que tenía una pareja de 9 años de relación con la que se casó hace 7 meses después de que lo conocieron.
Efectivamente, Senku no era de los que compartía detalles de su vida personal.
¡Pero nada es imposible para la increíble Suika! Ella iba a averiguar hasta el mínimo detalle de esas vendas y Senku no sabría que lo golpeó.
— ¿Levantar las piezas de la nave te lastimó, Senku? — cuestionó curiosa
— Son solo rasguños, nada importante — resto importancia el chico
— ¿Rasguños? — Ishiaki se asoma sobre su computadora — ¿Gen es de esos? Que salvajes
— ¡No puedes decir eso en el lugar de trabajo! — quejó Chrome a gritos
— Solo fue Haruka — resto importancia Senku — Intentamos bañarlo, fue todo un caso
— ¿Bañarlo? — preguntó curiosa Suika
Debía tratarse de un gato, los gatos son los enemigos número 1 de los baños.
— Haruka odia el agua, se pone a llorar horrible cuando lo intentamos— aun desinteresado en el tema, Senku se mueve hasta la pizarra de ecuaciones —. Gen suele lograrlo, pero ayer se quedó hasta tarde en el trabajo y me tocó a mi.
— Ah, debe ser difícil — prosiguió Chrome pensativo — Cuando son pequeños suelen ser más agresivos ¿no?
— Ni idea, tiene cinco años, no debería tener tanto problema
— Wow ¿cinco? — Ishiaki camina hacia a él con una tabla llena de papeles que debe revisar — Ya está grande para eso ¿no?
— ¿A que te refieres?
— Bueno, lo esperaría de dos años para abajo, pero cinco ya es una edad grande
— Mirai jamás le tuvo miedo al agua
— Sí, pero Mirai es una niña — quejó Suika —. No puedes usarla en esto
¿Por que comparaban un gato con una niña? No tenía sentido.
— Cinco sigue siendo una edad pequeña — contesto Senku, pero su argumento se ve cortado por el sonido de su teléfono — Es Xeno, ya vuelvo
Cuando el segundo científico a cargo sale, la platica es olvidada.
Es algo…¿interesante? Saber Senku tiene un gato, no se ve del tipo de persona que logre mantener un animal vivo, no por ofender a Senku, solo que conocen la ocupada vida del científico y dudaba mucho fuera capaz de mantener una mascota.
**Dos**
— ¿¡Ir al espacio!?— cuestionó en un grito Chrome
— El comité considera lo más apto es que alguno de nosotros vaya a la estación espacial a hacer los arreglos del nuevo sistema — comentó Xeno a todo el grupo científico—. El viaje sería de seis meses, y Senku se anotó para ir
¿Para ir?
Chrome no puede creerlo.
¿Senku iría al espacio?
¿Era tan necesario uno de ellos fuera?
Chrome suele ser la persona más emocionada del mundo, en otros tiempos, quizá hubiera saltado y felicitado a su amigo. Ahora, solo puede pensar en sus llamadas con Tsukasa, en lo diferente que se ve, en el extraño tono de voz con el que siempre les habla a él y Mirai, lo cansado que se nota y él como aun con gente en la estación la soledad golpea de forma distinta.
Supone, claramente, que Senku podría con eso, ya debieron hacerle su examen psicológico y según Tsukasa, las terapias suelen llevarse cada que hay buena señal.
Xeno continúa con su resumen de la junta pasada, de como sus cabinas Miracle irán de la mano con la tecnología de ensamblaje lejano de Senku y la IA WHY en la que Ishiaki participó, de como tenían seis meses para lanzar todas la cabinas para que los astronautas en la estación pudieran encargarse dele ensamblaje con ayuda de los ingenieros en Houston.
— ¡El espacio es muy malote, Senku! — exclamó con alegría Chrome — ¿Que opina Gen de esto?
— Está feliz, algo preocupado, pero hemos hablado mucho de eso. El viejo me ayuda a calmarlo — comentó con desinterés y una sonrisa
— ¿Y Haruka como lo esta tomando?
No conocía a Haruka en absoluto, Chrome había oído un par de veces que Senku lo nombraba en llamadas con Gen o platicas vagas sobre que hizo ese niño ahora.
— Ni idea, seguimos esperando se acostumbre a nosotros— un suspiro cansado, que pocas veces se le ha escuchado, se escapa de sus labios —. Gen dice llevará mucho tiempo, su tiempo viviendo en la calle lo hizo duro
Chrome asiente con entendimiento.
— Pero estoy seguro también le está afectando, hoy cuando desperté estaba acostado encima mío, lo tenía en mi cuello y apenas podía respirar
— ¡Lo bueno es que pueden hacer llamadas siempre! Mirai hace una llamada con Tsukasa cada que puede
— Supongo podría funcionar. Gracias Chrome ¿me acompañas al ala de entrenamiento?
Chrome asiente y se levanta para seguirle y decirle algunas cosas que funcionaban con Tsukasa en los exámenes de resistencia.
Chrome solo espera el hijo de Senku no se sienta muy mal como Mirai cuando él se vaya.
**Tres**
El lanzamiento de la última cápsula del Mirai fue tripulada por Senku Ishigami el tercer jueves de abril a las tres de la tarde. Han pasado cuatro meses desde eso y Kohaku está alegre de ver a alguien más que no sean sus compañeros de siempre.
Demasiada testosterona en el aire. Es claro que ella no es la mujer más femenina del mundo, pero Dios, hasta ella necesita un descanso de tantos hombres estúpidos.
Senku no es el mejor hombre para poner de ejemplo, pero al menos es una cara nueva de la que está alegre de ver y es una nueva vida en la que puede meterse para perder tiempo.
Kohaku ya entrevistó hasta el cansancio a Tsukasa y su relación inexistente con Chrome, ya golpeó a Mozu las veces necesarias para que deje de ser un idiota, y ha jugado un poco con Hyoga. Su siguiente víctima, es Senku, por obvias razones.
— Haruka estuvo de inquieto toda la noche — comenta Senku — Apenas pude dormir
— ¿Por que lo veías?
Algo que Kohaku no entiende es porque Senku está tan al pendiente de su gato.
Las quejas son ocasionales, pero un tanto explicitas, lo mucho que extraña acariciarlo, dormir con él en el sofá, que no extraña mucho él bajarlo de los lugares raros donde se esconde pero disfrutaría hacerlo una vez más, sobre cómo tiene un estómago infinito porque come a cada rato, las poses extrañas en las que duerme y sus arrebatos de locura en las noches antes de dormir.
Kohaku jamás entenderá a la gente con gatos, Ruri es tan rara con su mascota como Senku lo es cada vez que se nombra a Haruka.
— Gen me manda muchos videos de él, porque Haruka solo se queda frente a la computadora cuando Gen habla conmigo
Cosa de gatos en su totalidad. La cámara de Ruri suele ser tapada por Bigotes al menos unas siete veces durante sus llamadas.
Kohaku se pregunta porque Senku es tan apegado a su gato, o quiza Gen es el obsesionado con Haruka y Senku solo ve los videos para tener algo de la tierra.
**Cuatro**
Cuando Tsukasa vuelve a la tierra con Senku, Kohaku y Hyoga; deja de hablar con su equipo por un rato. No lo culpen, no es por mala persona, pero ha visto la cara de la mayoría por un año y la de Senku por seis meses; Tsukasa cree todos entenderán se desaparezca un rato.
Se encierra en su departamento con Mirai y Chrome, tanto por querer recuperar el tiempo que paso extrañando su rutina hogareña como porque aún no se acostumbra a la gravedad y resiste poco tiempo de pie. Chrome se esfuerza en ayudarlo con su rehabilitación y hace los ejercicios como su fisioterapeuta recomienda.
Durante sus ejercicios hay mucho de que hablar, desde cosas que pasaron en la estación hasta diminutos como la aventura de Chrome y Mirai en el parque nacional.
El teléfono de Tsukasa suena en un momento y decididos a un descanso Chrome contesta la llamada por él.
— ¿Qué pasa Senku? — preguntó extrañado
— Por favor dime que tú tienes la memoria con los informes de la misión
La voz de Senku suena ahogada y aplastada. Es raro eso, como si tuviera mal la garganta.
— Lo deje en la maleta de equipo. La deben tener en el edificio sin saberlo — informó tranquilo — ¿Está todo bien? Suenas extraño
— Todo bien, Haruka solo se durmió encima mío. No respiro, esta asfixiándome
Ah, su gato.
Todos en la estación habían oído al menos una vez al mes sobre Haruka y sus travesuras. Sobre sus escondites elaborados que preocupaban a ambos, como les dejaba comida desagradable en la puerta de su cuarto y su humor variado. Kohaku fue la primera en contarles del gato después de que Senku solo lo nombró un día.
— ¡Saluda a Haruka por mi! — exclamó Chrome — Espero mi regalo le haya gustado
— Le gustó mucho — aseguró Senku — Gen dice ahora es su manta de apego, no la soltará jamás — ¿por que Chrome le daría una manta de apego a un gato? — Gracias, Tsukasa. Te dejo
La llamada se cuelga y Chrome le extiende su bebida a Tsukasa junto con un sándwich para que coma el resto de tiempo libre que les queda.
— ¿Por que le compraste una mata?
— ¡Se veía muy malota en la tienda! Mirai dijo que era una gran idea dársela y la compré sin pensarlo. Dije que también era de tu parte
— Es algo tonto ¿no lo crees?
— ¿Por que sería tonto?
— Un gato no necesita una manta de apego
Chrome deja su comida para mirarle extrañado.
— ¿Qué? — cuestiona sin entender — ¡Haruka no es un gato!
— Claro que lo es. Todo lo que Senku cuenta de él es algo de gatos
— ¡Haruka es un niño! — exclama Chrome
¿Un niño?
Eso no tiene sentido en absoluto.
Senku describía a Haruka como un gato pequeño y de temperamento variado. Hablaba de como se subía a árboles que luego no podía bajar, de sus garras que arañan los brazos en los intentos de bañarlo, de como lloraba en las madrugadas frente a su puerta hasta que le abrían, de como Haruka parecía odiar a todos con la mirada.
— ¡Eso también puede hacerlo un niño! — quejó Chrome cuando Tsukasa expresó su punto de vista— Senku también habla de como va y se mete a el cuarto en las madrugadas y que roba comida
— El gato del vecino viene a nuestro balcón cada noche a buscar comida. No es un gran ejemplo
— Estoy seguro de que no habla de un gato
— Creo Senku solo es terrible hablando de cosas personales — destacó Tsukasa divertido —. No me meteré en esto, ya pase problemas con lo de Gen
— ¿Qué problemas?
**Cinco**
Suika se pregunta en que momento Senku se volvió una persona de gatos
Primero eran las historias de Haruka, historias divertidas y extrañas del arisco gato de Senku; ahora a las historias se ha sumado Lewis.
Lewis parece ser un gato más agradable y entusiasta que Haruka. Senku presume orgulloso como Lewis se queda con él en su laboratorio —Haruka parecía preferir a Gen que a Senku—, de como Lewis juega mucho con sus batas, la forma impaciente en la que espera fuera de la puerta hasta que tenga permitido entrar y sobre todo, lo mucho que el gato parece encantado con todo lo que dice.
— ¿Y se llevaban bien Haruka y Lewis?
Suika recuerda que su anterior compañera de piso batallaba mucho para que los nuevos gatos que adoptaba se llevaran bien.
— Haruka ignora a Lewis mucho — admitió con un suspiro pequeño —. Aunque Lewis sigue intentando llevarse bien con él
— Haruka tardó mucho en adaptarse a ti y Gen ¿no? — preguntó Chrome — Quizá aún desconfía mucho de todos los desconocidos
— No dudamos eso, Gen cree que la infancia de Haruka influyó mucho de eso
— ¿Lo encontraron? — cuestionó curiosa Suika
— Lo encontramos en la calle — su voz sale un poco más seria, pero Suika solo cree es por lo apegado que es al animal—. Sabíamos que no sería fácil en absoluto
— ¿A Lewis lo adoptaron?
— ¿De que otra manera lo tendríamos? — burló un poco Senku — Lewis ha sido de ayuda para desenvolver un poco a Haruka, pero sigue encerrado en lo suyo. Se le pasará, nos aseguramos de eso
— ¿Le das premios o algo así? — bromea Ishiaki
— Claro — Senku rueda sus ojos —. Un sobre de comida cada que hace algo bien
+1
Dos veces al año, la compañía hace un gran picnic para que las familia se conozcan y quien sabe que más. Ruri no sabe exactamente para que porque Kohaku le resta gran importancia al tema, pero ella siempre va gustosa a hablar con todos los amigos de su hermana.
Hace cinco meses ellos regresaron del espacio, así que supone también es una fiesta de agradecimiento y bienvenida a los astronautas.
Se encontraron con Tsukasa, Mirai y Chrome en el estacionamiento, ven a Mozu traer a su hermana Kirisame, y a Hyoga con Homura. Ruri saluda con amabilidad a todos e intenta convencer a Kohaku de ser amable con sus compañeros de trabajo. Normalmente entiende sea así con ellos, pero ahora mismo podrían grabarla y quizá hacerle mala publicidad.
Ruri jamás dejaría que eso le pasara a su hermana.
— Mira ahí está Senku— exclamó con alegría — Deberíamos ir a saludarlo
— Está con Gen, creo podemos dejarlo un rato a solas — comentó Kohaku con desinterés — Luego pueden ponerse cursis o algo
Ruri iba a decir algo, pero toda palabra o idea mueren cuando nota algo.
Senku no está con Gen.
— Kohaku — chilla asombrada — Kohaku, ese no está Gen
— ¿¡Ah!?
El cabello es el mismo mitad blanco y mitad negro, pero es pequeño, lo notan porque Senku se acomoda el pequeño cuerpo mejor en su brazo al estarlo cargando mientras le muestra las escalas de cohetes frente suyo.
Es un niño.
Senku carga un niño.
— ¿¡Desde cuando tiene un hijo!?
— ¡Papá, debes ver el simulador de la nave! Es increíble — Ruri logra escuchar el grito extasiado de otro niño
Este otro, es rubio y de cabello levantado como el de Senku. Él viene corriendo detrás de Senku, lejos de ellas y acompañado de Gen quien sonríe mientras sostiene lo que parece ser una caja de un juego de química.
— ¡Y el abuelo Stan me ayudó en la carpa de tiro y me consiguió este juego de química! — sonrisa es enorme — ¿Verdad, Papá? — se voltea tan rápido hacia Gen que parecía romperse la columna
— Tienes un juego de química real y más genial en casa
— Querido Senku — la voz de Gen suena con un leve reproche — no arruines la emoción de Lewis
— Pa — el niño más pequeño alza su mano libre hacia Gen
— Mi queridísimo Haruka — canturreo contento Gen intercambiando con Senku lo que cargaba por el niño — ¿Quieres vayamos a los brincolines de una vez? No hay porque ser tímido
— ¡Te dije que no eran gatos! — se escuchó la exclamación de Chrome con emoción
Los ojos de la —nueva— familia Ishigami se dirigen hacia Chrome y Tsukasa. Chrome es el único que luce avergonzado por tal grito, Tsukasa se disculpa por la impertinencia de su acompañante de forma más calmada que Chrome.
— Me debes diez dolares — dice Senku a Gen con una sonrisa soncarrona
Es lo poco que Ruri escucha de Senku antes de que el pequeño en brazos de Gen gruña un poco cuando todos comienzan a acercarse.
Ya había escuchado del temperamento del pequeño Haruka gracias a su hermana, pero era diferente saber todo eso ahora que conocía la realidad.
Se trataba de un niño.
El “gato” que se escondía cuando se asustaba y que lloraba fuera la puerta de Senku, era un niño.
El “gato” que se comía todo lo que encontraba se trataba de un niño que guardaba comida porque no sabía cuánto duraría.
Oh, por Dios.
El gato que era callejero y que Senku encontró en la calle era un niño.
Ruri intenta que ese último punto no se muestre en su rostro. Intenta contener lágrimas y preguntas incómodas mientras Gen intenta calmar al pequeño que se esconde entre su cardigan, como si fueran uno mismo.
— Él es mi hijo menor, Lewis — presentó Senku con una sonrisa poniendo su mano sobre el cabello puntiagudo del Niño — Y, mi hijo mayor, Haruka
— ¿Que no los mayores son los de mayor edad? — preguntó Kohaku con burla
— Haruka dice que él es el mayor por haber llegado primero a la casa — explicó Lewis —. A mi no me molesta mucho, Haruka puede ser el mayor si quiere
— Quiero — su pequeña e infantil voz apenas se escucha bajo el abrigo de Gen
— Ser un hermano mayor es genial — aseguró Taiju a lo lejos mientras corría a ellos — Ya hablamos de esto Haruka ¡Los hermanos mayores son los más fuertes!
— ¿Tu sabias? — cuestionó asombrada Suika
— ¡Yo fui a sus fiestas de bienvenida! — presumió con orgullo el chico — No entiendo porque creían que eran gatos ¡pero hubieran preguntado! Yuzuriha y yo tenemos muchas fotos de ambos
Ruri sera benevolente y no dirá que su hermana si pensaba eso, pero por la mirada que Senku le da a todos; Ruri sospecha que Senku lo hizo de esta manera.